Día 21

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He caminado por estas calles completamente vacías una y otra vez. Iluminados por la luz de la Luna o el Sol, no es de mucha importancia, casi lo siento como algo nuevo cada vez que dirijo mis pasos por estos lugares.

A veces cambio el rumbo, no me gusta volver sobre mis pasos en un mismo día. La brisa del viento se siente durante la tarde, el cielo está naranja, va cambiando de color mediante pasan los minutos, para terminar en una total ausencia de estos. O al menos eso creía, hasta que levanté mi vista al cielo.

¿Esto era posible? Creo que jamás había visto tantas estrellas en el cielo, incluso distingo unas formas esféricas a lo lejos. Es como si estuvieran más cerca, siempre estuvieron ahí pero no se mostraban tal y como eran. ¿Por qué era así? Es como si una barrera hubiera caído, como si algo hubiera desaparecido, algo que cubría todo este espacio y no lo había notado hasta ahora.

Los segundos siguen pasando, el clima se vuelve un poco más frío. Es hora de volver a casa y apagar las luces que iluminan mi camino.    

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