Solamente tú (Suerte #1.5)

(parte 7)

Aron había pensado mucho en la manera de decirle a su madre sobre Scott y quería que todo fuera perfecto, sin embargo el no sabía que al destino le gustaba más la idea de que fuera sorpresivo.

Era una hermosa mañana de sábado y ambos se encontraban sentados en la cama de Aron, estudiando para la prueba de Historia que tendrían el próximo lunes. En secreto, Aron no podía evitar reirse de lo mucho que se le dificultaba la matería a Scott, pero claro, eso era algo que no diría en voz alta. En cambio se encargo de subrayar en el libro de Scott los parrafos más importantes y así facilitar su estudio.

—Listo, creo que esto puede ayudar— le devolvió el libro y sonrio cuando el chico de ojos azulados hizo una mueca de horror.

—¿Tengo qué aprender todo eso?— Aron asintió— Pero es demasido y no quiero, mi cerebro va a hacer corto circuito y entonces vas a quedarte sin novio...a menos que te guste salir con un vegetal.

—Seras el vegetal más guapo del mundo— el rubio le dio un beso en la mejilla—Ahora estudia Scotty, no es tan difícil.

—Es que la verdad no se por qué debemos de saber todos estos datos historicos. No es como que al saberlos vayamos a cambiar el pasado ¿o sí?— Aron se encogió de hombros — ¿Y por qué debo saber el nombre de todos los presidentes de la nación?

—Es cuestión de deber cívico, creo...

—¿Y qué gano yo con eso?

—Bueno, imagina que algun día entras a un concurso y estas a punto de ganar muchos millones de dólares, pero la última pregunta es sobre historia, ¿qué harias?

—Irme al carajo— Scott frunció el ceño— y que más da si me quedo sin un centavo, al menos no tendré que guardar información innecesaria.

—Dios, eres tan sexy cuando te enojas— Aron tiró del cuello de su novio y le dio un suave beso en los labios. —Pero por favor estudia aunque sea un poco, tal vez no ganaras millones de dólares, pero si suspendes la prueba el profesor va a castigarte.

—Lo sé, pero es que es tan aburrido. Tal vez si tuviera algún insentivo todo sería más fácil.

—¿Qué clase de insentivo?

—Un beso por cada respuesta correcta.

—Mmm, eso suena justo.

Scott sonrio de medio lado y empezó a hacer a un lado los cuadernos y libros. Aron por su parte empezó a retroceder en la cama hasta que su espalda topo contra el cabecero. Scott aprovecho eso para tomar uno de los tobillos del rubio y hacerlo resbalar hasta quedar de espaldas contra el colchon.

—¡Oye!— se quejó el rubio más no hizo nada por alejarse. En cambio se  quedo quieto, sonriendo de forma coqueta.

—¿Alguna vez te he dicho que eres hermoso? — Scott se colocó sobre Aron manteniendo su peso sobre los brazos y rodilla.

—Creo que si...pero no esta tan claro en mi mente. —Aron deslizó uno de sus dedos por la barbilla de su novio. —Tal vez quieras refrescar mi memoria.

—Puedo hacer eso— Scott bajo su cabeza hasta que sus labios tocaron la tersa mejilla del rubio robándole un suspiro—Eres hermoso y eres todo mio.

—Si, eso no tienes que dudarlo, soy todo tuyo.

Aron deslizó sus manos por el cuello de Scott y tiró suavemente de él hasta que sus bocas estuvieron a milímetros de tocarse. Le dio una última mirada a esos ojos azulados que eran su cielo personal y luego eliminó la casí inexistente distancia gimiendo agusto cuando los labios de Scott se presionaron contra los suyos.