capitulo 3

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Relámpagos.

Gritos.

Fuego.

Todo paso de un momento a otro, parece como di fuese una pesadilla de la cual no saldré. Miro mi alrededor, la gente siendo calcinada, otros simplemente inertes descansando en el asfalto. Un valle sanguinario, se queda corto para toda esta masacre. De los aviones emanaban misiles, esa gente le faltaba corazón, o solo tenían la orden de destruirnos.

Mi corazón latía acelerDanente. Desde muy niña, había intentado entender el porqué siempre ocurrían cosas así en mi vida. Tengo sueños, o bueno tenía. Todos se truncaron desde los ocho. Quería la respuesta, pero solo veía fuego y sentía el humo ahogándome. quería despertar de esta amarga pesadilla, pero cualquier intento seria en vano.

Me senté en medio de este caos.

<< ¿será que perdí a mi familia?>> es lo único que logro pensar.

Las lágrimas resbalan por mis mejillas. Me removí incomoda, entre las abrasadoras llamas. Un efímero recuerdo me asalto.

Las flores flotando en mi cabello. Música y alegría atestando el campo. Todo era risa, lleno de amigos. Mis padres felices, y mi hermano junto a mí, todos mis sueños con el camino libre. Siento que nada de lo que había vivido era verdad, más estaban grabados en mi corazón.

Ahora es una cruda realidad.

Un poco de tierra cayo en mi por el impacto de un misil lejos de mí, Arthur... mamá... hasta había perdido a Dan, a todos.

- ¡mami! - oí el chillido de una niña.

Me vuelvo hacia atrás. Era la imagen más horrorosa que alguien podía ver. Una pequeña de unos cuatro años, llorando encima del cuerpo de su madre, que fue impactado por un puñado de balas. Oigo el sonido de la pólvora, ahora una balacera, no quieren que sobreviva ni siquiera el polvo de nosotros.

No lo pienso dos veces. Me levanto evitando tropezar con algún cuerpo. Tomo a la niña entre brazos, la cual sigue llorando sobre mi pecho, el nudo se hace más grande.

-shhh, tranquila. -susurro.

-mi mamá...-solloza

Cubro su cabeza con mi mano. Miro hacia todos lados, no hay lugar seguro. Balas, misiles, fuego... el mismísimo infierno. Corro hacia la playa, por lo menos podremos estar a salvo del fuego y este mar de sangre.

Me precipite a salir de ese lugar, esta imagen para la pequeña niña jamás se borrará. Ni siquiera para mí. No tenía razón sobre la cuestión del tiempo, al otro lado estarían tranquilos, felices sin vivir este calvario que nosotros estamos viviendo.

Llego a la playa, el mar está muy calmado, como si este se compadeciera de nuestra mísera vida. Me escondí con la niña en unos escombros, lo suficientes como para pasar desapercibidas.

-quiero a mi mamá. - murmura la niña.

Suspire.

- ¡busquen gente viva! -grito un hombre. - ¡desásganse de ella!

La niña me miro con temor, yo la aferre más a mí, si podía ayudar a alguien no lo dudaría. Ella escondió su cara en mi cuello, tiene miedo... al igual que yo.

-no te muevas, ni digas nada ¿está bien? -pregunto en un susurro.

Ella asintió.

Ladee ligeramente mi cabeza. No se parecían a los guardias de la familia real. Sus uniformes eran negros y los de los guardias del reino, eran blancos con dorado y unos vaqueros negros... tal vez un grupo terrorista.

al otro ladoWhere stories live. Discover now