Bienvenido A Secundaria

Capítulo 19

El título de este capítulo es interesante, y todo esto es debido a los directivos del colegio que al parecer no tienen oficio y solo quieren ver el mundo arder.

Yo antes sentía un odio prioritario a Marielena, pero eso cambió. Frank no sé porque pero desde el tercer trimestre parece que tiene una garrapata en las nalgas o qué, pero siempre está jodiendo.

En menos de un mes (el plazo desde que no he actualizado), se las ha arreglado para generar un odio desmesurado de mi parte hacia él que me ha hecho considerar cambiarme de colegio por la calidad nefasta que posee la administración del colegio.

Por un lado tenemos al viejo que nos interrogó en la feria de ciencias, que solo sirve para mirarte fijamente desde la ventana mientras están dando clases. Esto se ha repetido varias veces y es sumamente incómodo.

El señor se queda en medio de la ventana treinta minutos espiándonos creyendo que somos imbéciles y que no notamos su presencia. También suele pasear como zombie por todo el colegio creando presión. El tipo parece analfabeta, no modula bien cuando habla y parece un borracho, es nefasto.

También está la directora del colegio, una vieja pelirroja que tiene un problema que consiste en que no puede separar los dientes al hablar. O sea, así como lo están leyendo, la señora nunca separa los dientes al hablar, es súper extraño.

Generalmente se queda en su oficina perfectamente diseñada para generar incomodidad con su aire acondicionado a -39 grados, y su computadora para hablar con su nieta en Facebook.

Este año casi no ha tenido participación en asuntos escolares, esto debido a la inclusión de Frank en la administración. Simplemente se presenta en situaciones "importantes" como por ejemplo premiaciones o momentos críticos (como cuando una tipa de octavo grado se fracturó la pierna en educación física).

Tenemos a la mundialmente conocida Marielena, nuestra inservible consejera que siempre nos mantiene al tanto sobre la situación del país y los servicios de transporte en Australia, así como la forma en que funcionan las escuelas en Japón, también que jabón corporal es mejor y muchos etcéteras que no interesan a nadie.

Ya he recalcado varias veces que como consejera es repulsiva. Principalmente porque ni siquiera nos menciona sobre temas escolares, ni nos pregunta nuestra opinión sobre algún tema que sea realmente importante en el colegio. Aparte de ser nuestra consejera, es coordinadora de secundaria, más cargos que aumentan su relevancia en las absurdas decisiones que toma.

También tenemos a la psicóloga, que no hace nada nunca, es una especie de relleno. Es muy triste que no pueda aportar nada sobre ella, pero literalmente nunca hace nada. Nunca pasa por los salones, ni siquiera la vemos en el recreo; es un fantasma.

¿Y cómo podíamos olvidarnos de él? Hay que dejar lo mejor para el final. Él es el culpable de lo que mencionaré más adelante en este capítulo. Se trata de nada más y nada menos que de: Frank, el más grande y fastidioso acosador del país entero.

No sé porque, pero de repente siento que nos ha estado agarrando manía a mis a amigos y a mí.

Para que entiendan mejor mi punto y el título de este capítulo, debo contarles una historia.

Hace un par de semanas estábamos en clase de ciencias, aburridos y cansados de lo que sea que estuviese diciendo la profesora. O sea, en el tercer trimestre no tienes ganas de hacer absolutamente nada, ya sientes que todo está perdido y nada importa porque está apunto de acabar al año. A fecha de hoy faltan menos de 20 días hábiles para acabar las clases, no es casi nada.