Polos Opuestos

CAP. 60

P.D.V EMILY

Desperté rodeada por unos fuertes brazos, con la cabeza enterrada en el cuello del chico más maravilloso del mundo.

Le miré, fijándome en como sus rizos se esparcían por la almohada, sus labios ligeramente abiertos, rosas, tan apetecibles.

Acaricié el rizo que caía por su frente, viendo como se enrollaba en mi dedo índice.

Suspiré, apoyando mi cabeza en mi mano, mientras seguía tocando su pelo.

Harry se removió, haciendo un sonido adorable.

- Buenos días dormilón.

- Hola- dijo restregándose los ojos, mientras sonreía- ¿Cómo has dormido?

- Muy bien- dije besando su nariz- ¿Y tú?

- Contigo a mi lado, de maravilla- dijo acariciando mi muslo.

Abracé su cintura, besando su pecho.

- ¡¡Buenas!!- gritó Robert entrando a la habitación- jo-der.

- ¡¡Que no mires!!- exclamó Harry tapando mi culo con la sábana- ¿Qué cojones quieres?- le preguntó, sin soltarme.

- Ya que hoy no vamos a clase podemos hacer algo- dije sentándose a mi lado.

- ¿Quién más ha faltado?- pregunté, incorporándome, mientras agarraba la sábana para que mis pechos no se viesen.

- Zoe, Harry, tú y yo.

- ¿Y Hannah, Lou, Niall y Caroline han ido?- preguntó Harry, pasándome una camiseta suya.

- Dijeron que sería muy obvio que faltásemos todos, además Tomlinson y Horan ya tienen tres faltas.

- ¿Por qué no vamos a los recreativos?- propuse mientras me ponía la camiseta.

- Me parece bien, voy a llamar a Zoe, ¡¡gracias cuñada!!- gritó antes de salir.

- Ignórale, es un idiota.

- Es un amor- dije levantándome de la cama y saliendo de la habitación.

- ¿Dónde vas?- preguntó desde el cuarto. Entré en el de Robert, viendo como hablaba por teléfono.

- ¿Estás hablando con Zoe?- susurré. Asintió sonriendo- Dila que me traiga ropa por favor.

- Amor, ¿puedes traerle algo de ropa a Emily?

Robert sacó su dedo pulgar, en señal de aprobación.

Sonreí, saliendo.

- ¿Harry?- dije entrando en la habitación. Hoy el agua caer en la ducha, asi que se me ocurrió una idea.

P.D.V HARRY

El agua caliente caía por mi espalda, mientras cerraba los ojos disfrutando del momento.

Unas manos se posaron en mi cintura, sobresaltándome.

- Joder, que susto- dije volteándome.

Emily sonreía con esa sonrisa coqueta, traviesa.

- ¿Sabes lo sexy que te queda ese chupetón?- dijo mirando mi cuello.

- ¿Y sabes lo bien que quedaría uno en el tuyo?- la pregunté acercándola a mi, hundiendo mi rostro en su delicioso cuello.

Lo besé lentamente, a lo que Emily enrolló sus brazos en mi nuca.

Chupé desde el lóbulo de su oreja hasta la clavícula, haciéndola gemir.