CAP. 62

65 3 0
                                    

P.D.V EMILY

- Emily... Emily despierta.

- Mh mamá un rato más- protesté sin abrir los ojos.

- ¿Desde cuándo tengo voz de mujer?

Abrí poco a poco los ojos, para ver a un Matt sonriente.

- Lo siento...- dije soltando una leve sonrisa- ¿Qué hora es?- pregunté sentándome en la cama.

- Las once y media.

- ¿Y para que me despiertas?- dije frunciendo el ceño.

- Es sábado, habrá que hacer algo.

- No me apetece salir...

- Bueno pues podemos- dijo pensando- hacer algo.

Reí.

- ¿Algo como qué, genio?

- Ay no sé- dijo tirándose a la cama.

Me levanté buscando mi móvil, para encontrarme con Blue en la entrada de la habitación.

- Hola mi amor- dije cogiéndole. El pequeño maulló, chupando mi nariz, haciendo que riese.

- Como te quiero- le susurré, besando su cabecita.

- Asi que este es el famoso Blue- dijo Matty detrás mio.

Asentí, mostrándoselo.

Matty fue a cogerle, pero Blue le bufó, sacando sus pequeñas uñas.

- ¡Joder!- exclamó Matt, alejándose.

- No le caes bien- dije encogiéndome de hombros.

- Harry le ha puesto en mi contra- dijo mirando mal al gato.

Rodé los ojos, bajando a desayunar con Blue en mis brazos.

- Quiero huevos.

- Ya sabes donde está la cocina- le dije a Matt, tirándome al sofá- hazme a mi otros dos, con bacon.

- ¿Algo más señorita?- dijo sonriendo falsamente.

- Leche, para Blue.

Matt levantó una ceja, adentrándose en la cocina.

Jugueteé con Blue, que estaba en mi barriga apoyado, mordiendo delicadamente mis dedos.

Matty sacó la comida de Blue. Este al verla saltó rapidamente hacia el plato.

Aproveché para encender mi móvil, el cual tenía 8 llamabas, y todas de la misma persona. Harry.

Resoplé, borrándolas.

No quería saber nada de él, total, su excusa sería: "estaba borracho y no sabía lo que hacía" como dicen todos.

No pensé que su "amenaza" la cumpliera tan pronto.

- Aquí están mis maravillosos huevos- dijo Matt sacando dos platos con la comida.

Reí, ante la frase tan malpensada que había dicho.

- ¿En serio Emily? Creeme que los huevos del plato no estan tan ricos como-

- ¡¡Cállate!!- le grité, sentandome en la mesa.

Rió, dejando los platos en la mesa.

Empezamos a comer, mientras hablábamos de que haríamos hoy.

- Podemos echar un partido con la wii.

- No tengo juegos de esos.

- Tengo que ir a casa a cambiarme, pues ya de paso cojo unos.

- ¡Vale!- dije sonriendole.

Polos OpuestosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora