Me, Myself & I

♤Parte 20♤

           
La mirada rabiosa de Jennie me indicaba que ya sabía que no vivía más con mi madre.
— ¿Cuándo pensabas decírmelo?— me reclamó. 
—Hey, Hey— alargó Lisa haciéndola atrás como si fuera mi guardaespaldas.
—No te metas— le dijo de mal modo a Lisa matándola con la mirada.
—Mira yo me meto...
— Lisa — puse una mano en su brazo indicándole que se tranquilizara. Mi amiga solo se preocupaba por mí. Me miró con reproche a los ojos, besó mi mejilla y caminó por el pasillo dejándonos solas.
— Rosé ¿Te estás quedando con ella?— pregunto y asentí con la cabeza al mismo tiempo que ella negaba.
—Mira Jennie — dije con fastidio —Tú conoces mejor que nadie la situación mía y de mi madre— la señalé —Sabes bien que por más que lo intento ella no da su brazo a torcer— suspiré —Me cansé así que no creo que cambie mucho el que ya no esté en la casa— miró hacia abajo
— ¿Y por qué no me hablaste? ¿Ya no me quieres? — solté una carcajada.
—Porque me hubieras llevado arrastrando de regreso a casa— sonrió cosa que me indicaba un 'Si' —Y claro que te quiero— la abracé —Tú no te libras de mí nunca Jennie — di un beso en su mejilla.
—Está bien— acarició mi mejilla — Pero trata de hablar con ella.
ㅡ No te aseguro nada ㅡ levanté una de mis cejas.
ㅡ Jennie...ㅡ saludó Jisoo ㅡ Hola ㅡ me saludó no muy segura.
ㅡ Hola ㅡ sonreí ㅡ me voy, iré a buscar a Lisa ㅡ dije antes de despedirme con la mano para ir en búsqueda de Lisa.

♤♤♤♤♤♤

— ¿Por qué no Lisa? — alargué con tristeza.
— Rosé a mí no me gustan esas cosas— dijo fastidio.
—Pero...
—Si quieres ve tú, ya te lo dije— pasó su brazo sobre mis hombros pero me hice a un lado.
—Yo si entré a jugar cuando me lo pediste— le recordé cuando jugamos paintball y rodó los ojos —Incluso tardé ¡horas! sacando la pintura de mi cabello— me puse de pie —Eres injusta— le dije antes de caminar a la cocina. Donde estaban Haru y Bobby .
— Rosé es diferente...— me siguió hablando pero la ignoré.
— ¿En que es diferente?
— ¿Están enojadas? — pregunto Haru tiernamente.
—No, Haru...— le dije y también voltee a ver a Bobby —Estoy triste— me senté junto con ellos y ella solo me miraba con cara de 'No lo lograras' pero claro que lo lograría.
— ¿Por qué estas triste?— preguntaron ambos preocupados.
—Porque habrá un baile y yo tengo mi lindo vestido y mis zapatos y todo— miré hacia abajo —...Y Lisa no quiere ir— hice un puchero curvando mi labio inferior hacia afuera. —Dice que vaya sola y yo solo quiero ir con ella— Lisa soltó una carcajada.
—Eres una dramática— me puse de pie y di un beso en las mejillas de ambos niños quienes miraban a Lisa diciéndole 'llévala' me detuve frente a Lisa.
ㅡ No sabes cuánto esperé para este baile. ㅡ Era verdad ㅡ Pero sin ti no iría ㅡ me puse en las puntas de los pies para poder dar un beso rápido en sus labios. Lisa rio ante los 'ew' de ambos niños. Corrí escaleras arriba llegando hasta la que era mi habitación. Estaba triste, me lancé a la cama. En sólo dos días sería el gran baile temático. A lo 'Montecarlo' incluso desde antes de que Nayeon hubiera terminado conmigo yo ya tenía el vestido preparado. E imaginarme a Lisa con su vestido impecable, me hacía desanimarme aún más.

— Rosé — Me sacó de mis pensamientos cuando golpeó la puerta.
— ¡No hay nadie!— contesté y la puerta se abrió dejándome ver a Lisa recargada sobre el marco de la puerta. Me sonrió y me giré dándole la espalda indicándole que no quería verla.
—No estés enojada— sentí su mano recorrer mi silueta. —No lo estoy— me giré hacia ella.
— ¿Segura? — se acostó a mi lado.
—Segura— afirmé y me abrazó.
—Perfecto— dio un beso en mi mejilla y se puso de pie —Una pregunta— me señaló y solo levante mi mirada hacia ella — ¿Dónde puedo conseguir un vestido para dentro de dos días? — mi rostro se iluminó y luego cambio de nuevo a seriedad.
—No te burles de mí ¿sí?...— le dije ahora si molesta
—No— rió —Es que tengo una caprichosa en casa y la llevaré a un baile muy importante para ella— una vez más sonreí de oreja a oreja.
—Gracias Lisa— grité poniéndome de pie y corriendo a sus brazos.
—Solo dos condiciones— mordió su labio inferior.
— ¿Cuál? — pregunte divertida.
— No bailo — me miró fijamente y solté una carcajada
—Está bien...— no me quedaba de otra.
—Y solo si vienes a dormir conmigo— mi estómago se retorció al igual que mi corazón, qué más quisiera yo.
ㅡ ¿Pero tus hermanos?
ㅡ Ya están en sus habitaciones, además solo dormiremos. ㅡ me tomó por la cintura ㅡ También podemos platicar ㅡ la sensualidad de su voz me derretía ㅡ O te puedo abrazar... te puedo besar ㅡ su respiración vagaba por mi cuello erizándome la piel por completo. Y al sentir sus húmedos besos por mi cuello un leve gemido se escapó de mis labios. ㅡ Te gusta la idea... no me mientas, no te resistas ㅡ ¿Por qué era tan cruel? ¡Soy humana Lisa no lo olvides!
ㅡ Me encanta la idea ㅡ cerré los ojos dejándome llevar por las caricias y besos de Lisa. ㅡ No me resistiré ㅡ Tomó mi mano para guiarme a su habitación pero salimos de la mía y al mismo tiempo salió Haru.
ㅡ Lisa ¿Puedo dormir contigo hoy? ㅡ con los ojos cristalizados la pequeña traía en mano su cobertor y con la otra abrazaba un conejo de peluche. ㅡ Tengo miedo ㅡ Lisa mordió su labio con frustración. No solté su mano esperaría a que ella me dijera que haría. Aun que era más que claro que le diría a Haru que sí, y en caso de que le dijera que no, le obligaría a decirle que sí. Volteó a verme y sólo artículo 'Perdóname' sólo le sonreí y besé sus labios cortamente.
ㅡ Buenas noches ㅡ y Haru corrió a mí para darme un beso en la mejilla y decirme buenas noches.

Haru y Bobby estaban en el living, cada uno con una mochila y una almohada bajo el brazo.

— ¿A dónde van? — Les pregunté al bajar las escaleras

—A casa de Sam — dijo Bobby.

—Y yo a casa de Lesly — añadió Haru feliz.
—Es el mismo lugar— le dijo riendo
— ¿Me acompañas a dejarlos? — pregunto Lisa pero negué con la cabeza, quería darme una ducha. Me despedí de ambos con un —Diviértanse— y un beso para cada uno.
—Cuando regresé seguirás aquí ¿verdad?— preguntó Haru abrazándome.
—Claro que sí, hermosa— le devolví el abrazo.
—No quiero que te vayas ¡nunca!— sonrió.
—Aunque no viva aquí siempre estaré para ustedes— hablé con toda la sinceridad del mundo —Tu, Bobby y Lisa son lo más preciado que tengo— sus ojitos brillaron y volvió a abrazarme. —Tú solo iras a dejarlos— le dije riendo a Lisa.
—Sí pero yo también quiero un beso— puso su mejilla, riendo me acerqué pero corrió el rostro y me lo dio ella en los labios. Seguido todos salieron corriendo hasta el auto.

Subí y entré a mi habitación para tomar una ducha. Un simple short negro de tela y una blusa blanca de tirantes era mi pijama. Aún era temprano eran pasadas las nueve de la noche, pero seguramente no saldríamos. Ya vestida me fui a la habitación de Lisa, me senté en la cama y me recargué en el respaldo.
Encendí el televisor, recorrí todos los canales tratando de encontrar algo atrayente pero no había absolutamente nada. Dejé un programa de chismes. Entre un famoso que recién compró su mansión y otro que había sido demandado por millones de dólares mis ojos comenzaron a cerrarse.

Un leve cosquilleo en mi pierna atormentaba mi sueño. Entre abrí los ojos y me encontré con Lisa quien con la yema de los dedos producía esas cosquillas.
—Perdón— sonrió —No quería despertarte— le sonreí igual y acaricié su mejilla. Escuché el golpe de sus botas caer al piso y acto seguido se acomodó a mi lado. Aun algo adormilada me amarré a su cuerpo.
Corría mi cabello a un lado, dejando mi rostro y cuello descubierto, esparcía húmedos besos desde mi mejilla hasta mi cuello. Su cálida respiración chocando con mi piel era fascinante.
—Ya, te dejo dormir preciosa— ¿dormir? ¡Claro ya que despertaste todas mis hormonas ahora si me dejaras dormir! Estaba por ponerse de pie pero no la dejé, me puse rápidamente de rodillas en la cama y la tome por los hombros, escuche su risa.
— ¿No estabas dormida?— preguntó divertida.
—Lo estaba— contesté abrazándola por la espalda ocultando mi rostro en su cuello —Tú has tenido la culpa, me has despertado con tus provocaciones— mordí suavemente su piel y ladeó su cabeza dándome mejor acceso a su sensible zona.

Mordía, ancaba mis dientes e incluso mi lengua degustaba su cuello estratégicamente. Quería girarse hacia mí pero yo se lo impedía mordiéndole el lóbulo de su oreja. Hasta que finalmente logró ponerse de pie. De una se sacó la camiseta dejando al descubierto su pecho cubierto solamente por un sujetador negro. Su mirada desbordante de deseo solo aumentaba el mío de sobremanera. Subió a la cama y se acomodó sobre mí, pase mis manos sobre sus hombros, hasta su espalda, recorriendo su piel. Mientras que nos fundíamos en un apasionado beso, una de sus manos se posiciono en mi espalda por debajo de mi blusa y la otra masajeaba mi pierna elevando mi estado de éxtasis.

Su lengua se introdujo en mi cavidad bucal buscando con desesperación mi miembro. El cual no tardó mucho en encontrar ya que es segundos se debatían a muerte ya que ninguno tenía planeado rendirse.
De un momento a otro mi blusa desapareció de la escena y al igual no tardó mucho en despojarme de mi sujetador el cual quedó en algún lugar desconocido de la habitación al igual que el suyo.

La excitación y el placer se respiraban en la habitación, mis jadeos y gemidos iban en aumento solo con sus caricias y besos. No había centímetro cuadrado de mi cuerpo que sus manos no hubieran recorrido al igual que sus labios.
Como pude logré deshacerme de su pantalón. Minutos después nuestros cuerpos solo eran cubiertos por la ligera capa de sudor que nuestro alto calor interno producía. No podía más la necesitaba en ese mismo momento. Y como si leyera mentes se acomodó entre mis piernas para hacer el amor por primera vez.

           

♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤♤