Capítulo 11
Conan Edogawa ¡Detective!
La luz de la mañana atravesaba las cortinas de su habitación, palpo con torpeza el despertador y al sacar la cabeza de debajo de las sabanas, observó la hora, no pudiendo evitar sonreír al ver aquella foto al lado, se levantó estirando su cuerpo perezosa, colocó su ropa deportiva para empezar bien el dia, salió del apartamento para ir a correr como siempre, al regreso pudo comprar algo de pan de su panadería favorita para poder desayunar. Tomo una ducha lavando su cabeza, al entrar en su habitación y ver a su perezosa mascota, solo la intentó despertar acariciando su cabeza.
-buenos días Rin...-El animal una gatita de color azabache solo la observó desde su posición, con aquellos enormes ojos azules, estirándose perezosa para volver a enroscarse y seguir durmiendo, al abrir el armario dejó caer la toalla para elegir una blusa blanca y unos pantalones ejecutivos, colocó un cinturón alrededor de su fina figura, puso la cartuchera de la pistolera encima y colocó su chaqueta, arreglo su cabello recogiendolo en un moño italiano, tal como su madre le había enseñado, Ran Mouri, sujeto su taza térmica entre las manos recogiendo su bolso con toda su documentación, se puso los zapatos de tacón y observando esa otra fotografía que estaba en la entrada, la sujetó entre sus manos depositando un suave beso encima de ella.- cuida la casa Shinichi...y dame suerte para vivir un día más...
Cerro la puerta tras de sí, para dirigirse a la planta de abajo, donde su compañero ya le esperaba apoyado en su coche, como siempre se iban turnando, al llegar a la comisaría mientras bebía su café, podía notar las miradas del resto de policías, como si acabara de entrar una super estrella a los pasillos de la central, Hattori lo había llamado, el síndrome de la diba, más bien se quiso hacer la desentendida sobre aquel asunto, algo que la inspectora Sato le solía aconsejar, ya que esos idiotas antes de casarse con Takagi, solían acosar al buen detective, incluso Shiratori se sumaba en el linchamiento hasta que conocía a aquella profesora, con la que también se casó, recordó que estaba en segundo de la academia cuando estos dos contrajeron matrimonio y ese año, tuvieron que asistir a la boda de Shiratori también, el cual esperaba felizmente el nacimiento de su segundo hijo.
Puso su chaqueta en la silla y se sentó delante de su ordenador noto esa mirada clavada en su nuca, y ver enfrente a su compañero encogiéndose de hombros, le confirmó que la inspectora Sato miraba su informe algo molesta, suspiro resignada al ver que se levantaba e iba en su dirección, señalando aquel punto en el que se mencionaba a esos tres.
-Mouri ¿en serio?...-Pregunto la morena a su subordinada, la cual se rasco la mejilla nerviosa.- es peligroso dejar que se metan tan a menudo en líos...
-resolvieron el problema...-Aunque aun estaba muy mosqueada por cómo lo solucionaron, era el proceso mental más que otra cosa lo que la traía de cabeza, Ran tomó un sorbo de su café y cada vez estaba más convencida que esos tres, tenían algún contacto con Conan.- ¿Quiere que los elimine del informe?...
-no...no es eso...-Sato suspiro viendo esa mirada fría en la chica, observó Hattori que se encogió de hombros divertido, regreso a su mesa algo preocupada por la hija de Mouri, claro que lo había notado aquel impenetrable muro alrededor de ella, le traía recuerdos, antes de casarse con Takagi, Jinpei Matsuda su primer compañero del que estuvo enamorada murió, jamás lo olvidaría y eso Takagi lo sabia, por eso amaba tanto a ese inocentón e considerado esposo, pero sabía que lo de Mouri no tenia comparacion, saber por boca de Yumi que aquel joven detective con tanto potencial, era amigo de la infancia de Ran y también su enamorado, ella misma intentaba aconsejar para que dejara entrar un nuevo amor en su corazón, como ella había hecho con Takagi.
-Sato ¿sucede algo?...-Takagi conocía esa expresión a la perfección, seguramente estaba pensando en Mouri, aunque esa chica debería tener cuidado con todo el personal de la central, el que tuviera la fortuna de ser su pareja, lo iba a pasar muy mal, si quería tener a todo el pelotón de fusilamiento del cuartel de policia detras, aun recordaba cuando la idol de la jefatura, era su esposa y aun a pesar de estar felizmente casados, las miradas de odio hacia su persona por compañeros, era su pan de cada dia.
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El Sacrificio del Detective
Fiksi PenggemarShinichi se da cuenta que por mucho que quiera, va a tener que abandonar a Ran ese lamento le perseguirá ¿pero que sucederá?¿conseguirá antes que eso la solución para todos sus problemas?