Keith es una chavala de ojos verdes con un pequeño matiz en marrón, cabello teñido de gris con las puntas de colores, alta, con el cuerpo muy cuidado, viene de una familia acomodada, nada más terminó sus estudios empezó a trabaja en la clínica priva...
Me dejo en la casa y se fue, era la primera vez que me traía a casa un camarero y sobre todo que dejaba mi coche, no sabia nada de él.
Subí a mi habitación y me acosté para dormir, realmente estaba echa polvo, gusto cuando estaba apunto de dormirme me sonó el móvil, era una de mis amigas que quería que saliera con ellas el fin de semana.
Yo estaba para salidas, salir un Lunes fue buena idea, bueno era Domingo cuando salí de casa pero me recogí un lunes a pocas horas de tener que levantarme. ¡Estaba muerta!
◇ Kavin ◇
Llego el viernes y este fin de semana no trabajaba ya que libraba un fin de semana si y otro no, por que mi jefe metió a su hijo para que se ganará la paga semanal, lo bueno que podía salir con mis amigos, lo malo que la próxima semana no me libraba ni un día. ¡Pero bueno! hoy tocaba disfrutar con mis amigos.
Me puse mi vaquero y una camiseta con un blanco roto, como un tono de gris, me entró pereza el afeitarme así que solo me arregle un poco, le di un beso a la cruz de plata que tenía colgada.
- ¡Dios mío! Que sea una noche tranquila.
Me puse en la pequeña entrada de la casa que tenía un espejo y me miré, estaba listo para salir, saque mi móvil y miré la hora, me tome una foto y la mande al grupo de amigos con el mensaje de 《Ya estoy listo》.
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Al poco rato ya estabamos en el lugar entre con Lucas y Mikael en la discoteca, era un sitio nuevo y la verdad que me dio buena impresión.
♡ Keith ♡
Mis amigas Lara y Michelle fueron a la barra de la nueva discoteca, lo que más me gustaba es que para estar de inauguración estaba bastante tranquila, y no era mala música la que se oía.
- ¡Perdona!¿Me dejas paso? - Pedí permiso para poder acceder a la barra y pedir una coca cola.
- Sí, claro. - El chico se echó a un lado sin mirarme.
◇ Kavin ◇
La chica pidió una coca cola, mientras yo estaba tomándome un botellin con mis dos amigos.
- ¡Perdona! - Se disculpo cuando su bolso me rozó.
- No pasa nada. - Me volví y vi a la chica del otro día. - Veo que te encuentras mejor.
- ¿Eres el camarero que me llevo a casa?
- Sí, él mismo.
- Te ves mejor con barba.
- Mi jefe me dice que me afeite, dice que así parece que no paso el tiempo.
- ¿Por que?
- Por que cuando empecé a trabajar no tenía barba, era un crió de 16 años.
- Soy Keith. - Me tendio su mano.
- Yo Kavin, encantado.
- Igualmente, voy a volver con mis amigas.
- Espero que tengas buena noche.
- Muchas gracias Kavin, e igualmente.
- Gracias. -Le guiñe el ojo y me gire a mis amigos.
Era pura inercia eso de guiñar un ojo, mis amigos empezaron a decirme de que la conocía y cosas así.
