The Queen (Namo / Monayeon)

🍭⭐Capítulo 15: Observar⭐🍭

Momo observaba desde su privilegiado sitio en la mesa de los populares a Nayeon y sus nuevas amigas. Realmente parecía que se lo estaban pasando bien conversando entre ellas.
La japonesa tenía sentimientos encontrados por culpa de esa escena; se sentía muy feliz porque Nayeon hubiese encontrado personas tan buenas y ya no estuviera sola, pero por otra parte... Tenía envidia. Ella quería poder hablar con su novia o amiga o lo que fueran. No obstante, su terrible miedo a lo que dirían sus amigas la impedía hacerlo.

- ¿En qué piensas? - le preguntó Sana, parecía preocupada por ella.

- Nada en especial - respondió Momo encogiéndose de hombros.

La otra japonesa frunció el ceño. Cuando iba a insistir para que se abriera con ella, Jeongyeon intervino en la conversación preguntándoles por su opinión sobre el tema de los dos últimos días: ¿Desde cuando Nayeon era amable?

Sus amigos se habían pasado toda la comida hablando sobre la coreana, por eso apenas había participado en la conversación y sólo se había dedicado a observarla desde lejos, desde la seguridad de su asiento.

Siempre la pasaba lo mismo, no importaba si era en el comedor o en clase. Cada vez que su mente se abstraía del mundo real sus ojos se movían solos buscando a Nayeon. No entendía porque le pasaba eso y no le importaba. Ella observaba a la coreana, y se pasaría el día entero haciendo eso si pudiera.

La mayor detectó su mirada sobre ella y le guiñó un ojo con todo el descaro del mundo.

- ¡Nos ha guiñado un ojo! - dijo Mina con un volumen de voz alto pero sin llegar a gritar. Parecía enfadada y sorprendida a la vez.

- No ha cambiado del todo - comentó Jihyo.

- Sigue tan idiota como siempre - le apoyó Jeongyeon.

- Qué haga lo que quiera - las contradijo Momo. Ya estaba harta de no hacer nada cuando sus amigas se metían con Nayeon.

Le encantaba mirar a la coreana, pero odiaba ver como sus amigos criticaban todo lo que hacía.

- O sea que puede meterse con nosotras ¿no? - le discutió Mina - como puede hacer lo que quiera.

- No se mete con nosotras.

- ¿Cómo lo sabes? - le preguntó la otra japonesa.

Momo se quedó callada. No sabía que contestar. ¿Cómo podía justificarse?

La conversación no avanzó más sino que Jeongyeon cambió completamente de tema para evitar un enfretamiento entre las dos amigas. Sin embargo, aunque habían dejado el tema atrás, ninguna de las japonesas participó en la nueva conversación, ambas seguían atrapadas en la anterior.

Momo no paraba de lamentarse por ser tan cobarde. Debía encontrar el valor para hablar con claridad a sus amigos sobre sus sentimientos hacia Nayeon, tuviese las consecuencias que tuviese.

Las ligeras sospechas de Mina comenzaban a tomar forma. Se había dado cuenta de que cuando Nayeon no se dirigía a Sana o a alguno de sus antiguos amigos, sino que iban hacia otra persona. Al principio, ella pensó que Nayeon sólo tenía ojos para Momo, pero ahora, tenía otra hipótesis, la cual era que el sentimiento de la coreana era recíproco. Desde su interior rezaba para que no fuese así.

Nayeon se había dado cuenta de que algo le pasaba a su novia. Durante toda la semana había actuado raro. Normalmente, se esforzaba en ocultar sus sentimientos, sin embargo, llevaba unos días en los que la miraba sin disimulo y hablaba con ella cada vez que quería. Sus amigas, al igual que la propia Nayeon, se habían dado cuenta de su cambio de actitud.