—¿Y qué? Te divertiste limpiando los vestuarios, Jeonie— Hoseok pasó su brazo sobre los hombros del menor, con su mano libre se tomó el atrevimiento de pellizcar la delgada mejilla, provocándole al castañito un puchero.
Sentía un poco de pena por el, seguro tuvo mucho trabajo. Los vestuarios no eran cosa fácil si de higiene hablamos. Esperaba no obtener una mala noticia que algunos de esos bribones se metió con él.
—Ja, ja, que gracioso hyung— apartó la mano de Hoseok de su mejilla sin ser brusco—.Taehyung trató de hacerme una de sus bromas, pero lo empecé a acosar con piropos raros y se fue.
—¿Le dijiste ese del bóxer?
Asintió con una sonrisa divertida recordando lo divertido que había verlo huir como un cachorrito. Creyó que las cosas acabarían en una pelea, pero fue mejor aún.
—Uff, yo también hubiese huido.
—Ya, pero no fue para tanto.
El sonido de los megáfonos colgados en algunas esquinas del instituto interrumpieron a ambos chicos, con un desagradable chirrido proveniente del micrófono, acompañado de un carraspeo y el famoso probando sonido, 1, 2, 3 que el director siempre usaba.
—Queridos y apreciados estudiantes de nuestra bien aclamada y respetada institución, este día queremos anunciarles el inicio de las nacionales donde nuestros mejores clubes participarán y darán lo mejor de ellos para dejar el nombre del instituto 'Seoul Education' en alto como lo hicieron el año pasado nuestro club de música. Esperamos su cálido apoyo y el placer clasificar. Tengan un buen día. Gracias por su atención.
Hoseok y Jungkook compartieron miradas una vez el anuncio acabo. Aunque Jungkook y Hoseok era compañeros de baile, Jeon no pertenecía a ningún club, ya que le parecían una perdida de tiempo.
Sabía que este año Hoseok estaba dispuesto a llevar al club de baile a las nacionales, y aunque no ganaran nada, podían llevarse la maravillosa experiencia de estar ahí. Además de sentirse aclamado unos pocos minutos, pero que le serían suficientes. Siempre había soñado estar ahí, debía ser su año.
—¿Realmente no quieres unirte al club de baile, Jungkook? Contigo tendríamos más posibilidades de ganar las nacionales.
Jungkook negó acomodando su mochila, sin mucho que decir. Estaba seguro que no quería más responsabilidades. El Instituto era suficiente.
—No, no quiero. Suficiente es tener que limpiar los vestuarios y venir todos los días a esta cárcel como para tener que ensayar también. Moriría de cansancio.
—Jungkook por favor, no sabes lo mucho que nos ayudarías si te unes— suplicó juntando sus palmas. Tenía que convencerlos sí o sí. No tenía opción.
Si acaso pudiese tener una oportunidad para las nacionales, estaba seguro que Jungkook sería si salvación.
—Hyung no puedes obligarme, no quiero y punto.
—Mierda...—murmuró pasando una mano por su cabello.
Sin Jungkook y su gran capacidad de baile, estaban perdidos.
—Jamás pondremos un pie en las nacionales— suspiró. Era una de esas ocasiones donde definitivamente no podía ser positivo.
—No seas negativo hyung, seguro que si se esfuerzan irán.
—¡Claro que nos esforzamos, yo me esfuerzo! Pero no puedo sobrecargarme. Me presione demasiado el año anterior y ni por cerca entramos, este año será lo mismo, y los que restan también.
Hoseok estaba sumamente frustrado. Hace un año se sobre esforzó para poder llevar al club de baile a las nacionales, y terminó siendo internado en el hospital por una fuerte crisis de nervios y el tobillo lastimado.
Derramó lágrimas de frustración, por todas aquellas lesiones y múltiples horas de ensayo que tuvo, todo en vano; incluso perdió una gran cantidad de peso. Pasó su miércoles en la tarde viendo las nacionales en la televisión con un galón gigante de helado de melocotón, una manta gigante y el tobillo fracturado.
Jungkook notó la frustración de Hoseok, cualquiera podría decir que estaba fingiendo para que el menor le tuviera lástima y terminará aceptando, pero no es así, Hoseok no es así. El sonriente pelinegro realmente sentía como si una nube gigante estuviera sobre su cabeza mojándolo con una torrencial lluvia y electrocutándolo con fuertes rayos. Se sentía lo peor cuando ni siquiera lo era. Sentía no dar lo mejor de él cuando si lo daba.
Hoseok siendo negativo era lo peor y más doloroso que podía ver el mundo. Porque el día anterior podría estar diciendo que la vida era dulce como una manzana, pero al siguiente —y si algo le salía mal— decir que el mundo es un árbol viejo de manzanas podridas.
—Hyung no te pongas así, sé más positivo.
Hoseok apoyó su espalda en los casilleros con la cabeza gacha sin prestar mucha atención a aquellas palabras. Decir "sé positivo" Era tan fácil como gastar dinero, pero serlo no lo era.
—Estoy harto de ser positivo, jamás consigo nada por serlo— despegó la espalda de los casilleros yéndose cuando no tenía más que agregar. Era su momento de llorar, y no quería ser visto así.
El menor lo observó con una desagradable sensación en el cuerpo. La sensación del egoísmo que por fin había conseguido. Porque era egoísta con todos y seguía su vida como si nada, pero con Hoseok no funcionaba igual.
—Soy un egoísta— se dijo a sí mismo mirando el techo con desgano.
—Hola nenita— río un chico, pellizcando el estómago del menor.
Ante aquella acción, suspiro y regresó la vista al frente para ver de quien se trataba. Al momento de hacerlo, un granizado de fresa le había impactado en la cara, manchando su ropa igualmente.
—Creo que merezco esto— susurró para sí mismo quitando parte del granizado de su cara y dirigiéndose al baño para poder limpiarse.
Sí lo mereces, baboso. Ah, lo re bardeaba.
Atte:
~SerendiTear🌹
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Ligando Al Capitán ❃ [RESUBIENDO - EDITANDO]
FanfictionTaehyung es el popular y guapo capitán del equipo de fútbol del instituto. Jungkook está buscando un chico guapo y popular que quiera tener sexo sin compromiso con él. ¿Qué mejor que el capitán del equipo de fútbol? Porque el sexo sin compromiso, si...