NaruSaku

CAPITULO 11: DOS MESES PARA AMARTE

La cómoda cama del hospital de la hoja cobijaba a Tenten como lo haría el abrazo de su madre.
-O el abrazo de Naruto –pensó sonrojada.

Era increíble para la Kunoichi como su corazón había florecido por el rubio. Hace años que lo conocía. Sin embargo solo hace un par de meses pudo tenerlo cerca todos los días. Era gracioso y muy amable. Tenten recordaba con una sonrisa como tenía que regañar a Gai-sensei por los "excesos" en los entrenamientos con Rock Lee y Naruto.

Primero sintió simpatía por el rubio, al fin y al cabo, era casi como Rock Lee a quien ella consideraba un hermano. Pero una tarde calurosa. El destino de ambos se entrelazo para siempre. Naruto había encontrado, entre la herencia de su padre, unos Kunai muy exóticos cuyos propósitos eran la utilización del mejor jutsu de su padre. Tenían tres puntas y forma diferente al estándar.
Inicialmente Naruto pregunto a Gai quien podría hacer este tipo de arma. Gai aseguro que esa pregunta solo la familia Nakamura podría responder. Esa misma tarde cerca de la montaña de Konoha. El rubio visito la casa de los Nakamura. Era una gran estructura familiar. Gran cantidad de habitaciones, salón principal y un enorme taller donde la familia fabricaba las armas que vendía en la aldea.

Naruto entro a la zona del taller y encontró a Shio Nakamura (Hermano mayor de Tenten). Luego del saludo y presentación Shio le indico que jamás había visto un Kunai como ese. Naruto dudaba de decirle su procedencia. Pero entonces Tenten entro al lugar. Estaba con su delantal de herrero. Tenía su cara con varias manchas de restos de metal. Pero con una sonrisa encantadora. Se saludaron con un beso en la mejilla, lo cual extraño profundamente al hermano. Shio jamás había visto a Tenten saludar como una "dama". Generalmente eran apretones de manos terribles. Discretamente se retiro al ver que lo ignoraban. En su mente estaba ir corriendo a contarles el chisme a sus padres. Mientras Naruto y Tenten charlaban sobre cualquier cosa (locuras de Gai y Rock Lee, como enfadaban a Neji, entrenamientos, etc.). El padre de Tenten hizo su aparición.

Naruto trago saliva. Goro Nakamura era un hombre "monumental". 2,20 cm. de altura, cuerpo ancho y musculoso. Mirada de escasos amigos. Naruto sintió unas ganas terribles de salir corriendo. El saludo de Goro solo lo aterrorizo más. Con su brazo derecho atrajo a su hija bruscamente cubriéndola.

-¿Qué intenciones tiene con mi hija? ¿Señor? – Mirada de amenaza

-Mi....mi nombre es......Naruto Uzumaki, señor Nakamura- tratando de no temblar.

- Señor Uzumaki – bruscamente- Dígame entonces a que ha venido.

- ¡Papa! –Dijo ofuscada dándole un suave golpe en el vientre- Naruto es un amigo.


Naruto todavía atemorizado solo atino a estirar su mano para entregarle el Kunai de su padre. Goro observo la pieza y sus ojos demostraron rápidamente que conocía su procedencia. Miro a Naruto como escrutándolo profundamente. Algo en sus recuerdos se agitaba para salir.

-Espero por tu bien, -amenazador- que no hayas robado este Kunai ¿Cuál es el nombre de tus padres?

-Mi madre fue Uzumaki Kushina y mi padre Namikase Minato – dijo con orgullo.

Los ojos de Goro se llenaron de felicidad. Fue una transformación tan asombrosa que tanto Naruto como Tenten sonrieron con él.

- Tu padre, "el Yondaime", fue mi mejor amigo. Puedo verlo en ti Naruto. Permite que lo abrase otra vez.

Fue una situación tan extraña. Goro Nakamura era un hombre nada sentimental. Jamás abrazo a sus hijos como lo hizo con el rubio. Su risa monumental, como el mismo, fue tan grande que la madre de Tenten vino corriendo a verlo. De pronto todo estuve bien. Fue toda dulzura y alegría.

Naruto fue invitado/obligado a quedarse para cenar. Goro se paso toda la velada contando historias de Minato y el juntos. Naruto pasó esa noche, un momento en familia. Como si su padre fuera el que hablaba. Por su parte Tenten sintió en el pecho un escalofrió. La risa de Naruto, sus ojos, sus palabras.
-¿Será Naruto?- se pregunto a sí misma- ¿Será el hombre que despierta mi corazón?

Con el correr de los días. Naruto visitaba a los Nakamura para aprender a hacer sus Kunai. Goro le hubiera enseñado personalmente. Pero Tomoko Nakamura (madre de Tenten) intuyo con picardía que su hija tenía interés en el joven Uzumaki.

Tenten nunca había sido vergonzosa. Pero se ruborizaba constantemente cuando Naruto se quitaba su remera para quedar solo con el delantal de herrero. El esfuerzo del entrenamiento había logrado en Naruto marcar como nunca sus músculos. Pecho, brazos, vientre. Tenten veía a un hombre realmente guapo. Sus ojos azules parecían ver siempre en el interior de todos. Su risa, aunque no tan a menudo como antes, era magia pura.

Solo un par de semanas bastaron para que Tenten lo esperara en las tardes con ansiedad. Se arreglaba como nunca lo había hecho. Se compraba ropa nueva en la aldea cuando eso nunca le había interesado. Preparaba comida para llevarle en el mediodía de entrenamientos. Algo se agitaba en los sentimientos de la chica.

Un viernes en la tarde, Naruto no apareció. Dijo que vendría, por las clases de forja y no llego. Tenten experimento el exquisito dolor de la ausencia. Lloro, en su cuarto, como una niña pequeña. Como si nunca más lo volviera a ver. Su madre, quien más pendiente estuvo de sus cambios emocionales, fue la que comprendió su ansiedad.

- El amor es complicado –sonriendo- Sobre todo cuando nos llega de repente.

- ¿Qué dices mama? –Avergonzada- Estoy triste porque....no sé porque.

- Claro –dijo divertida- No tiene nada que ver con la ausencia de cierto rubio apuesto.

Tenten sonrió totalmente ruborizada. Su madre la veía a través de todas sus mascaras. Esa mujer dura, áspera y de fuerte carácter. Esa mujer que quería demostrar su capacidad como ninja ante todo. Ahora había caído en las redes del amor.


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Al día siguiente, en el entrenamiento de Naruto con Gai y Rock Lee. Tenten se presento con signos claros de enfado. Tanto Gai como Lee indicaron el cambio de humor como "Problemas de mujeres". Por supuesto recibieron como premio una sonora patada que los mando a volar muy lejos.

Naruto, aun sin entender el motivo real del enojo, se disculpo con Tenten por no haber ido a la forja el día anterior. La Hokage lo había enviado a reforzar un equipo cerca de Suna. Así que le tomo toda la tarde y noche esa misión. La explicación estuvo acompañada con una encantadora sonrisa de disculpa.

Tenten sintió en su interior que iba a estallar de felicidad. Lo abrazo calurosamente y tomándolo de la mano lo llevo hacia una canasta donde ella le trajo su almuerzo. Naruto aun sin comprender el asunto dijo que tenía que entrenar. Pero Tenten le aclaro que debía comer para estar fuerte. Además, Gai y Lee tardarían en volver de donde cayeron por los golpes de la chica.


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Llevaban casi un mes en los trabajos de forja. Naruto era algo torpe para aprender el oficio. Sin embargo su determinación para nunca rendirse lo compensaba todo. Tenten lo miraba fascinada trabajar. Pero en los ojos de Naruto, muy en el fondo, había una frialdad terrible. Tenten decidió borrarla. Decidió devolver la alegría a esa mirada. Así que le hablo, para saber el motivo del dolor.

- Dime Naruto ¿Cuál es el motivo de la tristeza que esconden tus ojos?

- En realidad –suspirando- me he dado cuenta. Que solo sirvo para la guerra. Soy solo un "arma". "La gran bestia de Konoha"

- No puedo creer que pienses de ese modo – mirándolo a los ojos- Tú no eres así.

- Yo no "era" así –corrigió- Pero el amor no me sonríe. De hecho se ha burlado de mí siempre.

- ¿Sakura verdad? –Gesto triste- ¿Aun sigues......pensando en ella?

- intento no hacerlo –serio- Pero es la única mujer que siempre he mirado. Aunque ella no me vea.

- Hay muchas mujeres en el mundo –ruborizada- Deberías intentarlo con alguien más.

- No lo sé- suspiro- tal vez, solo soy un arma. Nada más.


Tenten puso ambas manos en el rostro del rubio. Se miraron a los ojos. El silencio era tan profundo que solo latidos podían oírse. La mirada triste de Naruto la volvía loca. Simplemente no pudo resistirse.

- Tú no eres un "arma" –voz suave- Soy maestra en armas y tu, no lo eres. Eres una persona maravillosa que nunca fue apreciada.


Naruto bajo sus brazos con resignación. Sus gestos de tristeza no parecían mutar. Como si las palabras de la chica no llegaran a fondo. Ella tuvo un impulso, el mismo que la seguía hace días. Se acerco a Naruto y lo beso tiernamente. Sus labios se encontraron, sus ojos se cerraron dejándose llevar. Ese pequeño momento de sus vidas fue milagroso. Se separaron para verse mejor. La luz del fuego en la forja ilumino sus sonrisas ella sintió el corazón desbocado. Ahora estaba segura de lo que sentía. El, cambio, vio frente a si a Sakura. Pero pestañeo, para ver a Tenten. Ella merecía ser vista...

- solo te pido, –susurrando- Que me des la oportunidad de entrar en tu corazón.

- Pero Tenten, -dubitativo- no creo que....

- ¿Momento? , nunca será el momento si no lo intentamos. Solo quiero que lo intentes, eso es todo.


En los días siguientes la rutina de Naruto continúo sin modificaciones. Pero los ojos del rubio brillaban con una nueva luz. Había recuperado la esperanza. Podía vivir, podía ser feliz. Había vida después de Sakura Haruno.

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Una tarde, días después, cuando solo Naruto y Tenten practicaban con espadas en un campo de entrenamiento. Sucedió un enfrentamiento que pudo terminar muy mal. Tenten le mostraba la manera correcta de usar a "RAYO DE LUNA" (la espada de Kushina). Le indicaba como pararse, como atacar, como defenderse. Ponía sus manos en la cintura del rubio para enseñarle equilibrio (y para tocarlo lógico).

Quiso el destino que Ino Yamanaka pasara por el lugar. La rubia, con su clásica mentalidad pervertida, intuyo que Tenten disfrutaba demasiado del entrenamiento. Corrió al hospital en busca de Sakura para comentarle quien estaba "entrenando" a Naruto.

Sakura sintió una puntada en el pecho. Tenía que verlo con sus propios ojos. La rubia y la pelirosa corrieron a toda velocidad. Ino reía divertida por la cara de rabia y celos que su amiga mostraba. Por fin se decidiría a pelear por Naruto.

En esos momentos, en el campo de entrenamiento, Naruto recibió la visita de Gamatatsu.

-¡Amo, amo! Tsunade-sama lo necesita urgente.

- de acuerdo –frustrado- ¿Al menos te dijo cuánto dura la misión?

- No me dijo –con gesto pícaro- Pero dos días, je je

- Ni modo - suspiro- ¿Nos vemos el domingo? –Sonrisa

- ¿Qué te parece un día de campo? –Sonrisa

- ¿Por como cocinas? Acepto – sonrisa


Tenten lo abrazo con fuerza y justo en ese momento, desde una grada, Sakura lo vio todo. Naruto se fue con la invocación. Sakura trono sus puños con furia. Ino, todavía a su lado, comenzó a sentir que se había equivocado al traer a su amiga.

Tenten estaba juntando algunas armas que había lanzado en el entrenamiento. Estaba feliz. Ahora mismo iría a su casa. Tenía que pensar con cuidado que comida hacer para Naruto.
- Da igual je, -pensó sonrojada- a él le agrada todo lo que cocino.

- ¡¿Se puede saber que haces con Naruto? – Grito Sakura con vena en la frente, roja de furia

- ¿A ti que te importa? – respondió Tenten mirándola acercarse

- ¡Claro que me importa! ¡Yo lo quiero!

- ¿Perdón? -seriamente

- Que.....yo......yo lo quiero como amigo - voz nada convincente.

SAKURA INNER :-(COBARDE)

-¡Ah! – Indico Tenten con gesto travieso- Entonces no te preocupes je je. Estará bien cuidado en mis brazos.

- ¡Aléjate de él! –rabiosa.

- ¡A mí no me grites! –sacando las uñas- ¿Quieres pelear?

-¡Te daré una paliza orejas de oso! – acomodando sus guantes.

SAKURA INNER (¡MATALA!!MATALA! CAMBIAREMOS LOS REGISTROS EN LA MORGUE)


-¡Será un placer darte una lección!- declaro Tenten


-será mejor que te prepares –acercándose amenazante

- Estoy preparada para darte una paliza. –respondió Tenten


Tenten dio un salto hacia atrás tomando distancia. Estaba muy concentrada en el encuentro. No sería una práctica inocente. Había claras intenciones de dañar a la rival. La castaña desplego un pergamino sobre su brazo izquierdo y con el derecho comenzó a lanzar una lluvia de Kunai directo a la pelirosa.

- je lo que supuse, mantendrá las distancias. Pero de nada le servirá su arsenal. ¡DOTON JUTSU MURO DE TIERRA!


Un muro de tres metros se alzo frente a Sakura protegiendo su cuerpo de las armas que Tenten había lanzado. Los impactos de Kunai dieron con el muro sin más consecuencias.

- Solo debo acertar un buen golpe,-razono Sakura- y todo terminara.


Cuando el muro descendió y Sakura se disponía a avanzar. Tenten estaba encima de ella. La castaña aprovecho la sorpresa conectando una serie de puñetazos en cuerpo y rostro de su rival. Completando su arremetida con una fuerte patada en el estomago que lanzo a Sakura varios metros más allá.

- ¡si crees que tengo miedo de tu fuerza bruta. Te equivocas!

- ¡Puede que no temas, pero eso no evitara que te elimine de un solo golpe!


Sakura se lanzo de frente a su rival pero para su sorpresa Tenten también arremetió a gran velocidad y directamente. Cuando el puño derecho de la pelirosa iba a dar en el pecho de Tenten esta se agacho y barrio con su pierna a Sakura haciéndole perder el equilibrio. No alcanzo a caer, pero no tuvo oportunidad de esquivar una nueva combinación de patadas que volvieron a alejarla.

- Eres fuerte, lo admito. Te he golpeado duro y sigues de pie. Pero mi velocidad evitara que me toques. El combate es mío.


El combate en Tayjutsu continúo y si bien Tenten golpeaba más seguido los escasos aciertos de Sakura eran más efectivos. Sin embargo Tenten comenzó a herir a Sakura con Kunai salidos de todos los bolsillos de su traje. Sakura noto que su rival se movía mejor y comenzó a destruir el suelo del campo a base de terribles puñetazos.

- ¿Qué haces, acaso perdiste la cabeza?-sorprendida

- te mueves bien. -admitió la rosa- Pero ahora el piso está destruido. Veremos que tal lo haces.

Sakura había entrenado para luchar en suelos destruidos y eso le daba ventaja. Tenten la hería constantemente pero la pelirosa se curaba y volvía a la carga. La castaña noto que el combate no le era favorable. Encima de todo, sus más poderosos pergaminos lo habían dejado en su casa. Después de todo este combate nunca estuvo en sus planes.

- Vaya, tal parece que no lo haces nada mal. Era de esperarse tienes a la mejor maestra de todas. (Igualmente Naruto será para mí)

- Gracias, aunque Gai-sensei no lo hizo mal tampoco. Pero no voy a perder (No voy a perder a Naruto)


Tenten salto hacia atrás en una mortal para quedar sobre uno de los muros del estadio. Saco un pergamino rojo y desplegándolo ante sí dijo:

- ¡toma esto! ¡DANZA DE CADENAS, PRISION NEBULAR!


Una enorme cantidad de cadenas de diversos tamaños fueron lanzadas contra Sakura directamente. Esta esquivo el ataque, pero Tenten lo redirigía siguiéndola. Las cadenas se movía como si estuvieran vivas pero no eran lo bastante rápidas para darle alcance a la pelirosa. Finalmente el suelo quedo atestado de cadenas pero en el centro Sakura se paraba sin ningún rasguño.

- Esas cadenas son lentas. Nunca me atrapara con ellas.

- Nunca quise atraparte querida. Solo puse la trampa.


Tenten abrió sus manos y comenzó a moverlas. En sus dedos estaban hilos de metal que se conectaban con las masas de cadenas en el suelo, alrededor de Sakura. Con un rápido movimiento las cadenas se alzaron atrapando a la pelirosa. Sakura estaba prisionera, desde los hombros a la cintura las cadenas la tenían amarrada. Tenten salto de su posición se acerco con un Kunai frente a su rival.

- todo termino. Perdiste.

- ¡Aun no!- comenzando a hacer fuerza.

- no podrás liberarte. Tienes fuerza pero no tanta.


Sakura movió su manos rápidamente y en un mismo movimiento creo dos cuchillos de chakra (Uno en cada mano) con el derecho lastimo la rodilla de Tenten y con el izquierdo corto una parte de las cadenas. Dio un salto hacia atrás y aplicando toda la fuerza de sus músculos. Hizo estallar todas las cadenas de su cuerpo en pedazos.

-¡Ahora tu pierna no te servirá! -Bramo Sakura-! Ya no podrás correr! Toma esto!


Se lanzo con todo hacia Tenten que intento apoyar su pierna herida y el dolor la estremeció. Pero justo cuando la pelirosa iba a impactar. Tenten, parada solo en su pierna sana dio un salto de lado y quedo perfectamente parada en su pierna sana sobre una filosa roca que sobre salía en el campo destruido.

- Se llama técnica de la grulla. Aun con una pierna. Puedo pelear. –Sonrisa

- No dejas de sorprenderme. Pero no resistirás por mucho.


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Mientras tanto Ino miraba en las gradas presintiendo un desastre. Solo le quedo una solución. Correr hacia la oficina de Tsunade y rogar al cielo que Naruto aun estuviera allí.

En la oficina de la Hokage se encontraban reunidos los capitanes del escuadrón de interrogatorios. Inoichi Yamanaka e Ibiki Morino destacaban entre los presentes.

Naruto que inicialmente había llegado por una misión en la frontera de país del fuego fue invitado a quedarse para opinar sobre la información expuesta. El rubio estaba algo confundido. No comprendía en realidad el por qué debía inmiscuirse en esta faceta de espionaje que no iba para nada con sus cualidades. Tsunade, en cambio, quería comprobar hasta dónde llegaban las capacidades de zorro.

Aparentemente los capturados por ninjas de Konoha. Tenían una especie de barrera mental que les protegía de las técnicas para extraer información. Naruto estaba muy aburrido por la charla.

- así es como le informo Hokage-sama.-aclaro Inoichi- No se puede atravesar esa barrera.

- ¿Cómo es posible que hasta el más sencillo soldado de Madara tenga ese poder?-señalo Ibiki

-(no es poder de Madara.-aclaro el Kyuubi- El Nibi puede crear esas barreras mentales)


Naruto repitió textual lo dicho por el zorro. Además agrego que se disolvía con el tiempo esa barrera. Solo en cuestión de esperar. En la reunión todos supusieron la intervención del nueve colas en ese argumento. Cuando Naruto se retiraba por el asunto de su misión. Ino llego y lo cruzo en el pasillo.


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En el campo de entrenamiento. Sakura y Tenten se había atacado con furia. Había cráteres por todo el lugar. Armas regadas por doquier. Ambas estaban cansadas y heridas.

- ¡Increíble! – susurro Tenten jadeando, manos en rodillas

- ¿Increíble que?- respondió Sakura igual de cansada.

-peleas salvajemente, por alguien que perdiste por no pelear.

- ¡¿Tu que sabes?! ¡Apenas hace un mes que estas cercan!

- yo....-respirando difícil- Estoy enamorada. No lo voy a dejar.

- el me quiere a mí – contradijo Sakura, sangrando por la herida

- tal vez, pero con el tiempo voy hacer que te olvide.


Naruto e Ino aparecieron corriendo por una de las entradas.

- ¿Qué están haciendo? – dijo Naruto nervioso por la violencia de la escena.

-Solo practicábamos.-indico Tenten mirando de reojo a su rival- Solo una práctica y ¡AAY!


Había intentado caminar hacia Naruto y una de sus piernas estaba mal. El se movió rápido evitando que cayera al suelo. Sakura con gesto triste pensó que se le había ido la mano. Era eso, y que Naruto estuviera sosteniendo a Tenten junto como deseaba "ella" ser sostenida.

- ¿A ver? –Dijo Sakura con gesto despreocupado- Deja que te cure.

- Paso, – voz cortante- Prefiero ir al hospital y ¡AAY!

-Déjame que te ayude. – Dijo Naruto Levantándola en brazos- No puedes esforzarse tanto después de una herida de esas.


Sakura se quedo de piedra al verlo llevarse a Tenten en brazos. Fue un gesto tan amable, tan espontáneo. Que Sakura no tuvo fuerzas para recriminarle nada. Naruto pasó, con Tenten en brazos, junto a Ino y le pidió que ayude a Sakura con sus heridas. Ino se acerco a la pelirosa y Comenzó a curarla. Sakura ni se movía del lugar. Sus ojos estaban en la espalda del rubio. Algo definitivamente había cambiado.


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Tenten salió de sus recuerdos al escuchar el griterío en su habitación del hospital. Gai, Rock Lee y Neji discutían sobre el lugar de la cena con Naruto. Lo hacían tan importante y escandaloso que nadie podría dormir en todo el hospital. Neji miro a Tenten y como ella no había opinado le pregunto a dónde irían.

- Naruto es el invitado –suspiro la castaña- Que él decida.


Los tres hombres se miraron un momento y a la vez exclamaron:


-¡Ichiraku-ramen!