Eres perfecta - Todoroki Shōto

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¡¿Acaso cree que soy estúpida?! Está restregandole sus pechos a MI Shōto!
No, no, no! Y lo peor es que no puedo decirle nada, si lo hago, me veré cómo una estupida celosa obsesionada con cada parte de la preciosa carita de mi novio, es tan hermo... Basta!!! ¡¿Qué hago ahora?!

-Y-Yaoyoruzo-san...- ¿Hablé muy bajo? ¿Por qué no me presta atención?- Oe!- Golpeé la mesa que se encontraba a mi lado llamando la atención de los presentes en el salón. La mesa se hallaba destruida gracias a mi tonto Quirk de volver débiles cosas o personas que toque.

-L-lo siento!-Me disculpé totalmente apenada, que vergüenza.

Ví a Kirishima reírse por lo bajo, se estaba burlando de mis celos. Sé que él no lo hace con mala intención, pero al ver el perfecto cuerpo de Yaoyoruzo-san, sus intenciones y toda la atención que le prestaba Shōto, mi corazóncito se encontraba débil y lleno de celos como para aguantar algo así.

-Alguien está celosa~- Canturreó Mina uniéndose a las risitas de algunos más, otras ya habían notado que estaba a nada de ponerme a llorar de la vergüenza. Si, soy demasiado sensible.

-Oye, ya basta...- Susurró Ojirou-San para los demás.

La campana sonó rompiendo el silencio que se había formado. Salí disparada hacia la azotea, que se jodan todos.

Cuando llegué, me senté en el duro y frío suelo abrazando mis piernas y ocultando mi rostro lleno de lágrimas en ellas. Odio mi baja autoestima.

Recordé las veces en las que preferían a otras por ser mucho más bonitas que yo, siempre ha sido así, no tendría porque cambiar ahora. Empecé a imaginar a Shōto y a Yaoyoruzo-san en una relación, hasta se ven mejor juntos. De pronto empecé a sollozar como una pequeña niña, cosa que no duró mucho ya que sentí un golpe no tan fuerte en mi nuca.

-Deja de llorar, fea!- ¿Eso se lo dice a todas las chicas, verdad? ¿En serio me veo fea? Me esforcé arreglándome esta mañana...

-l-lo siento, Bakugō-san...- Agaché la cabeza, no quería retarlo, éste chico si que dá miedo.

Oí el chasquido de su lengua antes de sentirlo al lado mío.-Ya estamos en segundo año y sigues llamándome por mi apellido, es una molestia, tonta- me dió un pequeño golpe con dos dedos en mi cabeza. Me queje bajo, no quería que me reprenda otra vez.

Empecé a jugar con mis pulgares con un leve rubor en mis mejillas, nunca había estado tan cerca de un chico que no sea Shōto, con él me ponía demasiado roja ya que es el chico a quien amo, no me gustaría arruinar mi relación, qué nervios.

-S-soy tan fea?- Me encogí en mi lugar, ahora me sentía más pequeña de lo que ya era. Cuando lo ví de reojo, aparté mi mirada de inmediato. Me estaba viendo con una cara de molestia.

Narrador

El rubio ceniza se sentía confundido, ¿Acaso la femenina no había notado que el insulto era para molestarla?
No dijo nada por un rato, trato de explicarle pero nada de lo que se le ocurría decir lo convencía. Hasta que lo recordó, recordó haber escuchado una conversación de los maestros sobre la autoestima de la chica.

-N-no eres fea, no digo que te me hagas bonita, pero tampoco creo que seas fea...- Continuó hablando tratando de hacerle entender a la chica algo que ni él sabía cómo expresar. Soltó un gran suspiro.- Eres... Linda.

La chica se sorprendió y escondió una pequeña pero significativa sonrisa entre sus pequeñas y algo regordetas piernas. Un leve "gracias" se escuchó por parte de la chica.

El receso se la pasaron hablando de las clases y de cómo el joven Bakugō sería el número uno, ganándose como admiradora a una inocente ___, que asentía y alababa el esfuerzo de su compañero de clase.

BNHA y tú • Escenarios • Donde viven las historias. Descúbrelo ahora