Salvándote.

♠Capítulo 5♠

Habían pasado algunos días desde la llegada de ChanYeol y sus alfas a El Dorado y en ese transcurso de tiempo las cosas parecían hacerse cada vez más tensas entre ellos.

KyungSoo y Tao se habían emparejado con JongIn y YiFan, o Kris, como insistía en ser llamado, pero eso no era algo que le sorprendiera realmente, lo que sí lo había impresionado era el hecho de que ambos alfas habían aceptado el estilo de vida de sus amigos y no les impedían seguir con sus ideales liberales, siempre y cuando tuvieran cuidado todo el tiempo. BaekHyun se preguntaba a veces por qué ChanYeol no pudo haber sido así con él; si lo hubiera escuchado y se hubiera detenido a pensar las cosas probablemente estuvieran juntos en ese momento y él no tendría que pasar por tantas dificultades solo, pero lamentarse por la situación no iba a devolverle el tiempo perdido ni le permitiría estar junto a ChanYeol nuevamente, por ello no se permitía caer en los temidos y sis y se concentraba en sus deberes como líder omega.

BaekHyun suspiró, tachando una respuesta incorrecta en un examen perteneciente a uno de sus alumnos y continuó con su lectura, aún cavilando en sus memorias y sacando recuerdos de su cerebro.

Dos días después de acordar todos los puntos por tratar y ponerse de acuerdo en lo que harían, los dos escuadrones habían partido a las manadas vecinas y habían expuesto la situación a los líderes, avisándoles del futuro ataque y pidiendo ayuda para brindarle protección a los pueblos y ciudades humanas que los bordeaban. Como era de esperarse, todos los líderes ofrecieron su ayuda y mostraron sus respetos a BaekHyun al enterarse de cuál era su verdadera identidad, por lo tanto, los escuadrones fueron desplegados por todos los bosques y la cacería de neófitos dio inicio.

El plan fue un éxito y BaekHyun estaba orgulloso de decir que casi habían sido erradicados y los humanos podían respirar tranquilamente de nuevo, por lo cual era el turno del segundo paso del plan: ir ante el Consejo.

BaekHyun recuerda estar estúpidamente nervioso y que le costó un infierno no ponerse de puntillas y dejar a su nariz chocar contra la piel del cuello de ChanYeol para buscar la calma que necesitaba en ese momento, sin embargo, no retiró su mano de la del alto cuando él, notando su exaltación, la cogió y envolvió con delicadeza, apretándola suavemente, y eso fue suficiente para renovar su confianza y seguridad.

BaekHyun pensaba en lo increíble que era la unión de las parejas destinadas y lo fuerte que ésta era para poder superar cosas tan simples con sencillos gestos regalados por parte de la otra persona, aunque también admitía que esto mismo podía llegar a ser un dolor de culo especialmente fuerte y molesto.

Maldijo cuando puso una palomita en vez de una equis en una respuesta equivocada y trazó otra línea sobre ella para hacerla pasar por una tachadura. Mierda, debía concentrarse porque sino aprobaría a las personas equivocadas. Negó con la cabeza y dejó a un lado la hoja de examen, tomó su vaso de plástico con café hace poco comprado y lo bebió todo de un sorbo. Se echó para atrás en su asiento, dejando el vaso vacío nuevamente en el escritorio, y se refregó los ojos con la yema de los dedos.

Se dijo que debía dejar de pensar en ChanYeol durante las horas laborales, el alfa era claramente una distracción y él había corrido con suerte por no ser despedido cuando hizo un stripptees frente a sus jóvenes estudiantes, no quería ser reprendido por el rector por distraerse en el trabajo y hacerlo mal. Suspiró, totalmente desganado y resignado a echar en falta el aroma a especias de ChanYeol y tener su mirada oscura y penetrante puesta sobre él en todo momento y maldijo su suerte por no haber nacido como un beta.

Ellos no pasan por necesidades tan extremas como las nuestras, no tienen celo, no sufren calores anormales, no son dependientes de su pareja... qué suerte la suya.