||Primer libro de la Cúspide, continúa en Red Force||
En un mundo regido por la desigualdad, los de abajo sufren las consecuencias de los actos de los de arriba. Sehun vive en un barrio promedio en la ciudad más pobre de Exodus, como protegido de Yi...
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Hoy te busqué
en la rima que duerme
con todas las palabras
Si algo callé
es porque entendí todo
menos la distancia
Desordené
átomos tuyos para hacerte
aparecer
(Gustavo Cerati,
Puente)
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La curiosidad podría ser para algunos el primer paso hacia el conocimiento, para otros el primer paso hacia el sufrimiento, pero para Jongin es simplemente un grano en el culo. Uno muy grande e incómodo, como la intriga que siente mientras persigue con la mirada todos los movimientos de Kyungsoo en el desayuno, esperando que algún gesto o acción le de un indicio de qué significó lo de la noche anterior. Sin embargo, es el mismo adolescente medio maduro de siempre, o al menos el que intenta ser desde que dejaron de pelear. No hay pruebas de que lo trate diferente ni reacciona a él de una manera especial cuando le habla. Es como si no hubiese ocurrido, como si hubiese sido cosa de su imaginación o la conversación que tuvieron antes de cerrar los ojos se hubiese metido en sus sueños.
Pero Jongin sabe que fue real.
—¿Qué tanto miras? —pregunta Kyungsoo sin levantar la mirada de su desayuno.
