30 días Shipp +18 by: Mäyra

•10• En cuatro

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Apto para +18, situación lasciva, sexual y puede ser considerada bizarra e inmoral para algunos.

Pareja: Scouronic

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-Narra Sonic-

-¿Me...me quieres...?

-¿Crees que esto es de querer, erizo? ¿Cuando has visto eso?

-Yo...yo sé que no te resistes a mi cuerpo, ¿Eso ya es querer, que no?

-Jajaja bien...me alegra que lo entiendas.

Esa ultima vez...hace una semana yo no tenía más que miedo. Más que impaciencia y nervios por lo que bien para muchos es conocido por oído pero desconocido por vivencia carnal. Las circunstancias se presentaron y todo fue tan rápido... Tan predecible pero repulsivo por la forma...

Y en esta tercera vez, estoy aquí más que lubricado y siendo follado en cuatro. ¿Importarme? Claro que me importa porque se siente tan bien a pesar de que mi pobre culo no está completamente acostumbrado.

¿A qué hombre le gusta que le rasguen el ano? Supongo que el recto es tan sensible y estrecho...el esfínter nunca se acostumbrará a una penetrada así del bastardo. En fin...no importan esos detalles. En periquetes así la mente se mantiene en blanco y vagamente la infinidad de conmoción, una sacudida en la psique que...

-¡Ahhh! Bien...¡Uff! -Desvariando en movimientos, me tiendo boca abajo sobre la almohada apretando con ayuda de mi mandíbula. Apenas logro oírle-. Venga, ¿Es todo?

Mantenida mi postura, inhalo y exhalo empezando a palpar el dolor por mi extremo trasero. Cuando sus brazos se recargan por mis hombros, empiezo a sentir un masaje de parte de él muy reconfortante. ¡Uff! Pero qué amigable erizo verde...

-Por qué serás taaaan mágico con esas manos... -balbuceo lisonjero, con los ojos cerrados volviendo a recuperar fuerza.

-Jajaja ¿No sabes, azulito? -Sentir el calor de su voz grave en el oído, me llena de mil maneras-, estás manos son así gracias a ti.

-¿A mí? ¿Qué acaso no...no has tenido mejor experiencia con...?

-Nadie es de compararse contigo... -Su lengua me agarra desprevenido y me produce un escalofrío en la columna.

-¡Ejey! No, no, no... -Irguiendome, me giro llevándolo sobre mí con sorpresa e impacta en mi pecho. Ambos reímos y ahora yo masajeo cerca de sus cicatrices.