Capítulo 6

1.2K 55 1
                                    

- ¿Ana? ¿Qué pasa? - justamente ella tenía que entrar en el baño en ese momento. También yo soy gilipollas de no poner el pestillo. - ¿Qué haces en el suelo llorando? ¿Qué ha pasado? - se acercó a mi bastante preocupada.

- Nada, nada, esto bien, tranquila. - dije mientras me sorbía la nariz.

- Ana...

- Que no es nada Mimi, un pequeño bajón, nada más. - qué bien se me daba mentir.

- Claro... ¿sabes que puedes contarme cualquier cosa, no? O sea, que ahora que volvemos a ser amigas, ten claro que todo sigue como antes, y puedes contar conmigo para lo que necesites, ya lo sabes. Que entiendo que no me lo quieras contar porque es tu vida, pero Ana, de verdad que me gustaría saberlo cuando estés mal y poder ayudarte...- dijo mientras le costaba un poco hablar, se había puesto nerviosa, qué tierna era...

Entonces se me pasó la mayor locura que se me podía pasar por la cabeza en ese momento, y estoy segura de que no fue por culpa del alcohol.

- ¿Puedo quedarme contigo esta noche?

- ¿Conmigo? - dijo mientras tartamudeaba.

- Por favor, Mimi.

- Pero, ¿qué ha pasado? - estaba bastante preocupada.

- Jadel.

- Ah.

- No es lo que piensas.

- Si yo no estoy pensando nada, solo quiero saber qué te he hecho para que estés tirada en el suelo de un baño llorando a las... ¿4 de la mañana?

- Mimi, te juro que no me ha hecho nada, solo me ha llamado algo alterado y ahora no es que estemos muy bien... y pues me he venido un poco abajo, ya está.

- Sabes que me tienes aquí para todo lo que necesites, siempre, ¿no?

- Lo sé, bonita. - dije mientras me acariciaba el rostro con su mano.

- Entonces, ¿necesitas sitio donde dormir?

- No quiero ir a casa esta noche... - dije con la mirada en el suelo.

- Ya sabes que en mi casa siempre va a haber sitio para tí, banana.

- Gracias Mimi. - dije antes de darle un abrazo.

- Te he echado de menos, muchísimo... - dijo apretando más aún el abrazo.

- Y yo a tí, ni te imaginas cuánto...

Entonces nos separamos y nos quedamos mirándonos a los ojos fijamente, podía ver mis ojos vidriosos reflejados en los suyos, tenía un aspecto de mierda ahora mismo después de todo lo que había estado llorando, la verdad. Vi cómo dirigía sus ojos poco a poco hacia la parte más baja de mi cara, concretamente hacia mis labios, y yo no pude evitar hacer lo mismo con los suyos. Volvió a mirarme a los ojos, como pidiendo permiso, entonces hice un movimiento de cabeza indicándole que sí. Me estaba matando por dentro esperar tanto, echaba de menos sus labios. Comenzó a acercarse poco a poco a mis labios, estábamos a escasos milímetros, casi juntando nuestros labios del todo, cuando justo aporrearon la puerta, qué inoportuno quien fuese.

- Marichochis, salid ya!! - era Ricky, qué majo él cortándonos todo el rollo...

- Bfff... - Mimi se había cabreado un poco bastante.

Empecé a descojonarme, porque quieras o no la situación era bastante graciosa, y Mimi me dio un beso en la mejilla y con una sonrisa se giró hacia la puerta y quitó el pestillo.

Mujer Bruja 🔮 #WarmiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora