A to Z -One Direction

Capítulo 30 "Hormone horrors"

Todo no fue tan sencillo como en el fondo de mi corazón deseaba que fuera, a la semana paso demasiado lento para mi gusto pues creí que Marcos jamás se iría pues no hacía nada más que tener fiestas con sus amigotes desde que despertaba hasta que se iba a dormir, tomando todo alcohol que se encontraba en la casa, yo me limitaba a encerrarme en mi habitación o salir por la ventana cuando Marcos se ponía muy insistente en que le abriera, caminaba por toda la playa a paso rápido y algunas veces me quedaba a dormir en la parte más privada pues eran casas muy costosas que tenían ciertas restricciones y como la mayoría eran casas de verano o algo así, los dueños no se quedaban allí en esta época del año así que no tenía problema en quedarme esa parte. No voy a mentir, en realidad estaba bastante asustada, con todo el alcohol en el cuerpo de Marcos, los amigotes del ya anteriormente nombrado (que eran como unos 7 u 8), las miradas de Nick, los inmensos intentos –Gracias a Dios fallidos— de Marcos en entrar a mi habitación y el hecho de que extrañaba enormemente a mis amigas.

Estoy en ese momento en el que me acuerdo de todas las veces en las que peleaba con ella en distintas formas, la mayoría por puras estupideces pero que terminaban por hacernos enojar como para no hablarnos en meses, ahora que recuerdo esos momentos (que sin mentir fueron bastante) quisiera devolver el tiempo y dejar las tonterías de lado y madurar, ¿Acaso alguien iba a creer que pensaría en eso en ese momento en el que perfectamente hubiera podido perder mi tarjeta v? Bueno pues sí, porque quizá esos momentos en los que ellas hablaron mal de mí o yo de ellas hubiéramos hablado a la cara, tenido esa suficiente confianza como para decir lo que pensábamos la una de la otra, arreglado todo para que así no hubiéramos perdido el tiempo y nos conociéramos de fondo; quiero decir, evitar todo esto porque si nos conociéramos demasiado bien sabríamos lo que nos estaría pasando, son bobadas pero quizá y así ellas hubieran conocido mis gestos y saber que necesitaba algo de ayuda aunque por mi orgullo no me dejaba decirlo en voz alta, no sé qué sea de mi vida ahora y es muy estúpido porque bien sabía yo que podía evitarlo pero exactamente cómo no. Tampoco es que les vaya a pedir perdón o algo así porque es agua pasada pero si quisiera tenerlas ahora a mi lado (a todas, no solo a Cata y Nath) porque me recuerda a esos momentos en los que me quejaba de mi vida y lo injusta que era cuando en realidad era mejor que esta porque estaban nuestras risas, nuestros grupies extraños y esas cosas que ahora necesitaría demasiado para sonreír un rato pero no me voy a seguir lamentando por cosas pasadas, lo que ya no hice no lo puedo hacer ahora.

Me levanto por la voz inconfundible de Marcos sobrio (por primera vez desde que llegamos) despertándome desde el otro lado de la puerta con unos gritos sobre “alistarme” y algo como “irse”, con una sonrisa al escuchar sus últimas palabras me arreglo en bombas y salgo a la intemperie de… eso a lo que le hacen llamar casa, paso que daba; olor que llegaba y yo creía que era desordenada pero esto sobrepasa los límites es un total chiquero de botellas, ropa sucia, vasos, platos, restos de comida y juro que eso que se movió fue una cucaracha

— ¡uhm, hombres! — exclamo en un murmullo para mi mientras encuentro en cómo salir de este lugar y no morir en el intento

—Ella no tardará en llegar— dice una voz masculina desconocida para mí

— ¿Seguro que es de confianza? — reconozco la voz de Marcos a lo lejos mientras me acerco a la puerta hacia la terraza

—Sí, le pagaremos bastante por ser su niñera— vuelve a decir la primera voz, un poco gruesa

—Eso espero sabes que es “algo” problemática— ruedo los ojos sabiendo que hablaban de mi por el tono cauteloso de Marcos y la forma en la que su voz hace un gruñido de fastidio

— ¿Algo? — pregunta una voz, supongo que es la de Nick pues se me hace que la he escuchado diciendo “Wiggle, Wiggle”

—Está bien pero espero que para cuando vuelva sea igual en la cama— pronuncia Marcos y hago una mueca mientras se escuchan varias risas