A to Z -One Direction

Capítulo 21 "Secret to death"

Me quedo parada justo unos pasos después de la puerta y miro alrededor de la casa como si este lugar fuera algo totalmente desconocido para mí, no sé en qué momento Harry desapareció sólo me di cuenta cuando casualmente puso un toalla de baño alrededor de mis hombros, no dijo nada y agradezco enormemente que lo haya hecho porque en realidad en este momento no quería dar explicaciones que no tenía pero estaba aquí y tenía que asumir cualquier cosa que fuera a pasar porque ahora a “mi casa”  no podía volver así que con toda mi disposición espero pacientemente a que él me pregunte del porqué de mi repentina visita a estas horas pero lo único que me dice es:

— ¿Sabes? Cada vez me sorprendes más…— Me mira por un nanosegundo /tal vez exagero un poco/ y casi inmediato pasa su vista a mi ropa mojada— Debes estar congelándote, mejor ven y te doy algo de ropa seca— sin siquiera mirarme otra vez me agarra de los brazos y me lleva a lo que conozco como el cuarto de huéspedes, frota sus manos sobre mis brazos en modo de darme un poco de calor, al parecer se da cuenta de lo que hace y se detiene abruptamente, lo miro confundida pero ni una mirada de respuesta me envía simplemente camina hacia el armario y espero pacientemente a que diga algo más que “yo lo sorprendo”

Termino con una camisa de Gema (la hermana de Harry) y un pantalón de la misma persona y aunque no la conozca en lo absoluto y esté usando su ropa le doy las gracias a Harry y le pregunto acerca de ella pero lo único que me dice son monosílabos que me colman la paciencia, luego de unos minutos mirándonos las caras por lo que a mi parecer es una eternidad dice que puedo dormir aquí y se va dejándome totalmente confundida /¿no se supone que debería pedirme explicaciones o algo así?/

Debería pero no es tu novio y quizá ni siquiera fue tu amigo ¿Qué esperas? ¿Qué te diga que te sucede, te interrogue y le sueltes la sopa? ¡Oh, Vamos! Esto no es Hollywood pero ellos si son estrellas y tú solo eres otro punto blanco más que decora

Es lo más largo que mi subconsciente ha podido decir rendida totalmente le doy la razón y me dejo caer en una cama que no es mía pero que me da completa seguridad porque sé que en esta no va a venir Marcos a abrazarme de la nada como si fuera su oso de peluche.

Duermo como hace rato no lo hacía, me estiro un poco y busco un reloj que me indique la hora, lo encuentro en la pared del frente así que me acerco un poco y la miro mejor: 9:50 a.m, sé muy bien que hoy no iré a clase y estoy bien con eso porque en verdad no tengo ganas de ir y si se preguntan el por qué faltamos demasiado y nuestros padres putativos no se dan cuenta es porque hacemos trampa a pesar de estar enojadas las unas con las otras nos anotamos como presentes cuando el profesor no se da cuenta y así cuando el director la mire (o quien sea que la mire porque de verdad no sé quién lo hace) crea que venimos todos los días y si por otras razones hay alguna cosa pues le damos una carta falsa de los Smith diciendo que estábamos enfermas y ya, no es gran cosa mientras seamos cautelosas y nadie lo sepa.

Bajo las escaleras un poco insegura pues no sé qué me esté esperando allá abajo, llego a la cocina como si fuera mi casa, veo a Harry preparando lo que parecen huevos y me preparo para lo que viene, hago un sonido con mi garganta para que sepa que estoy presente cuando voltea a mirarme sé de antemano que está enojado pero lo que me dice me desconcierta tanto que ya no sé con quién estoy hablando y por un momento me siento mal pues tal vez sea mi culpa que esté así.

— ¿Cómo amaneciste? — sigue preparando el desayuno como si nada

—Bien— susurro un poco distante

El suspira y sé que está evitando decirme algo, camina hacia el comedor con dos platos en las manos; me hace señas para que lo siga y nos sentamos en la mesa

—Solo dilo ¿vale? — pido un poco exasperada esperando a que sea el Harry que conozco desde hace tiempo

— ¿Qué se supone que debo decir? — pregunta dándole un mordisco a su Omelet