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Cuando me reuní con el resto pude ver que la directora ya había llegado y llamaba al orden para dirigir unas palabras

- Bien creo que ya están todos - comenzó cuando reinó el silencio

- Directora faltan un par de chicas de las nuevas, hubo un imprevisto pero ya se nos unen pronto - levanté la mano, intentando ignorar el ruedo de ojos de Lauren

- Gracias por avisarme querida, en ese caso esperaremos unos minutos a que nos alcancen - sonrió la directora

- No hace falta, ya estamos aquí -una ruda voz se hizo paso entre la multitud - Gracias por recordarnos güera

Me guiñó un ojo y sentí como el rubor subía a mis mejillas involuntaria e inapropiadamente

- Bien... - la directora nos dirigió una mirada con la ceja en alto tanto a mi correo a Lorena - Ya que estamos todos ahora sí, tengo el honor de anunciar el comienzo del programa de Danza Urbana. A partir del día de hoy se nos unen bailarines y bailarinas a nuestra academia, espero reciban la cordial bienvenida que merecen.

Dio una mirada fulminante al ver el ruedo de ojos de Lauren

- Se que se ven diferentes a lo que estamos acostumbrados en esta academia, pero los cambios son buenos y les recomiendo que no los subestimen, son excelentes bailarines, diría que incluso mejores que varios de los alumnos actuales, tienen espontaneidad que es algo impagable en la danza. Espero y puedan absorber esa cualidad de ellos, al igual que ustedes - se dirigió a los nuevos - puedan absorber de la técnica que poseen los antiguos. Bien, sin más a sus clases - anunció con una sonrisa

Fui arrastrada brutalmente cuando una exabrupta Lauren jaló de mi brazo con fuerza desmedida en dirección a nuestro salón

- Y ahora defiende a la chusma... Lo que faltaba - rodó los ojos por milésima vez

- Ay ya cánsate - fue mi turno de rodar los ojos - Eres molesta cuando nada más te quejas

- Isidora... ¿Eres tú? - me miraba con ojos inmensos - Es que te desconozco... Si tú eres más criticona que yo ¿Qué te sucede? No me digas que la llegada de los nacos esos te está lavando el cerebro

- No... Es sólo que me cansa tanto de esa actitud, se que he sido tal como dices toda mi vida... Pero me cansa estar siempre a la defensiva

- Bueno ya te quiero ver cuándo te des cuenta que nos quieren robar nuestro lugar... A ver si sigues tan relajada chava - rodó los ojos con actitud de mimada

- Bueno si llega ese momento veré que hacer - sonreí - De momento baja un cambio que aún no nos hacen nada

Comenzamos el estiramiento en lo que llegaba la maestra y la clase transcurrió sin mayor problema

Tras bañarme y cambiarme me dirigí a la salida sola, Lauren se había adelantado para encontrarse con el estirado de su novio. Sacudí la cabeza al recordarlo pues no me agradaba, por lo que preferí concentrarme en buscar las llaves de mi carro tras varios minutos de buscarlas en mi bolsa sin encontrarlas

- Aún por aquí güerita - una voz repentina atras de mí me sobresaltó, no fue necesario alzar la mirada para saber quién era, pues su voz algo ronca y ruda se me hacía ya conocida

- Si, buscando las malditas llaves de mi carro que me juegan a las escondidas - suspiré frustrada levantando la mirada por fin para ver qué tal estaba al frente mío, observándome - No las encuentro

- No serán el bulto que se ve en el bolsillo trasero de tus jeans

Instintivamente llevé una mano al bolsillo trasero y para mí sorpresa allí estaban las benditas llaves.

El vacío de Isidora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora