Al dar Christian el portazo de salida, se escucha un leve silencio, que rápidamente se rompe porque se hace la platica presente.
Ya no era como antes cuando un par de veces me quedé sola con Poncho, que no teníamos que decir y terminábamos incómodos. Ahora el silencio no era incómodo como antes. Nos estábamos convirtiendo en grandes amigos.
Unas cuantas cervezas más y yo tenía mi lengua algo "suelta". Hablamos de Dul y yo le di mi punto sin pena alguna, acerca de su historia. Un punto bastante centrado, sin importar lo locas que aveces se ponían mis hormonas, haciéndome creer que me gustaba un poco Poncho. Un punto intermedio, sin importar que Dulce a pesar de todo era mi amiga, y que me dolía que sufriera por Poncho.
Y él también, sin pena me dió su punto de vista sobre mi relación con Christopher. Bendita cerveza Indio que nos hizo hablar. Me sorprendía lo que decía, ya que el tema de nuestras relaciones amorosas siempre se quedaba ahí, más el de la mía con Ucker.
—Any, la verdad cuando tu y Christopher comenzaron a andar me sorprendí. Fue como de la nada —dijo sincero y yo casi escupo a la alfombra la cerveza.
—¿Qué? —dije y me carcajeé.
—Sí! Nadie se lo esperaba —río él también.
—Pues, podría decirte que yo tampoco me lo esperaba —reí. Por un momento lo había dicho en broma, pero pensándolo bien, realmente no me lo esperaba.
—¿Cómo que no te lo esperabas? —preguntó con confusión.
—No, nada —reí.
—No, dime —dijo interesado.
—Pues... No es algo como lo fue lo tuyo con Dul...
—¿Cómo está eso? —dice confundido. Yo suspiro.
—Pues sí... Mira, tú y Dul llevaban tiempo de conocerse, hubo como ese "proceso" —enfaticé haciendo comillas al aire. —Después alguno de los dos dió el paso y comenzaron a salir, después se hicieron novios y todo lo demás ya lo sabemos... —el asintió— Y yo con Christopher todo fue muy rápido, sin tanto proceso, no salimos tanto, sino más bien nos fuimos directo a la parte de novios y no sé... No nos conocemos demasiado. —me rasqué la nuca. Traté de explicarme lo mejor que pude.
Poncho tenía una mano apoyada en su mentón y me miraba con la vista achicada, pensando. Esa pose lo hacía ver muy sexy.
Contrólate Anahí.
—¿Pero no piensas que es mejor? Digo, así se van conociendo durante novios y ya sería más fácil saber si en algún momento quieren continuar o no. —explica— ¿Si me entiendes?
—No —digo sincera. Ambos reímos.
Si entendía un poco lo que decía, pero eso no cambiaba mi forma de pensar y lo raro que aveces me sentía con mi relación.
—Mira, con Ucker me llevo increíble, me trata muy bien y yo lo aprecio mucho... —dije y el me miraba atento poniéndome atención. Eso a mi me hacía descontrolarme y distraerme.
—¿Any? —me llamó y yo volví a la tierra.
—¿Qué? —dije con las mejillas coloradas por si me había pillado viéndolo perdida.
—Me estabas contando y te quedaste pensando —rió. Negué divertida.
—Ah si... —reí— Pues nada, con Ucker me llevo muy bien, no se pierde esa esencia que tenemos de la amistad. Nos tratamos como amigos, pero aveces pienso que demasiado... —el hace una mueca de confusión y lo entiendo. Cuando cuento ésto todos se confunden. —Sí mira.. Aveces nos tratamos mucho como los amigos que siempre hemos sido, que aveces no sé si estoy hablando con mi novio o con algún amigo mío. Así estamos los dos, no sólo él.
