Hikariare ❜ ┊ dotae _ taedo

ㅤㅤ · Capítulo 둘 !

—Tengo sueño... —se quejaba Taeil, siendo arrastrado por Yuta cuyo brazo estaba aferrado el más bajo, porque no podía con su vida—. Yo quería dormir más, Yuta ya es un especialista en defensa, a mí no me necesitáis —seguía gruñendo, apenas con los ojos abiertos.

—Va, que tenemos que entrenar con Taeyong y ganar a Dream —los dedos del japonés se enredaron en los del coreano, el cual siguió quejándose con un tono quejumbroso.

—Pero tanto Sicheng como Hendery no han venido... ¡yo quiero dormir!

—¿Si te llevo a caballito dejarás de quejarte?

Los ojos del líbero, ojerosos y apenas abiertos, parecieron despertarse de golpe para mirar al líder de Karasuno, con la barbilla alzada.

—¿Lo dices en serio? —preguntó con duda y con los ojos brillosos; Johnny sabía perfectamente lo que le gustaba que lo llevara a caballito, y no quería que bromeara con eso.

—¡Claro que sí! Vente, anda —se apartó de Jaehyun y Taeyong, que habían estado hablando entre los tres mientras andaban en esa fresca mañana.

Un eufórico y para nada dormido Taeil se lanzó entre gritos en la espalda de Johnny, abrazándolo como un koala humano.

—Yo también quiero hacer cosas de altos —refunfuñó apoyando su barbilla encima de la cabeza del americano, arrancándole una amplia carcajada.

—¿Cosas de altos? —siguió riendo junto a los demás, que les gustaba mucho el humor de Taeil—. ¿Tú haces cosas de bajos? ¿Cómo cuáles?

—Cómo sobrevivir entre la hierba, luchar contra hormigas, ver los pelos de las narices de los altos...

—¡Ew, hyung! ¿Me miras los pelos de la nariz? —Jaehyun exclamó con falso asco, recibiendo una mirada asesina por su parte.

—Pues depílatelos.

—Que nuestro Moonie se nos revela chicos —Yuta empezó a carcajearse con fuerza, mirando a Taeil divertido.

Después de unas cálidas risas, retomaron la conversación que habían estado manteniendo sobre probar nuevas técnicas, practicar las que aún iban algo pez, y también de lo emocionados que estaban de combatir contra Nekoma. Taeyong no aportó demasiado, no los conocía bien y estaba muy curioso de combatir contra ellos y aprender nuevas técnicas u jugadas que siempre eran únicas en cada equipo.

A los cinco minutos, Taeil se quedó dormido encima de Johnny, Yuta empezó a bostezar unas cinco veces por minuto contagiando a Jaehyun y Taeyong.

—Chicos, con estos ánimos no vamos a llegar ni en la cancha del parque —rio Johnny intentando despertarlos y animarlos—. Ya falta poco.

—Sí, vamos a correr un poco, que faltarán unos cinco minutos para llegar ¡vamos! —Jaehyun empezó a estirarse ahí mismo, y los demás lo imitaron sabiendo que les iría bien para terminar de despertarse a las seis y cuarenta y cuatro de la mañana.

—Taeil hyung, despierta... que vamos a correr un poco. —murmuró Yuta picoteando la espalda del mayor con su dedo índice, para despertarlo.

—¿Que qué...? —gruñó malhumorado de haber sido despertado, aferrándose aún más en la espalda de Johnny, el cual rio enternecido—. Ni hablar...

—Taeil hyung será pequeño, pero se engancha muy fuerte, eh. No voy a poder sacármelo solo... —un apurado Johnny intentaba, sin dar frutos, desenganchar las piernas de él—. Socorro, que lo tengo pegado con superglue.

—Ya te ayudamos —Jaehyun se acercó analizando la situación detenidamente—. Bien, yo intentaré separarlo de sus piernas, Taeyongie tú de las manos, pero ten cuidado que a veces muerde o araña. Yuta se encargará de tirar de él por la espalda.