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Tony ya se estaba moviendo; se deslizó hacia Steve y en un instante estuvo en su regazo, presionando y aferrándose a él. Steve podía sentir su cuerpo temblando. Una confusión de terror y excitación lo recorrió. Una vez más, se vio obligado a concluir que los calores no eran tan divertidos como había pensado anteriormente.

"Oye", la voz del rubio era suave y su toque magnético cuando acurrucó a Tony en sus brazos. 

Comenzó a pasar sus dedos por el cabello de Tony de una manera suave, las uñas se rascaron ligeramente en el cuero cabelludo. El cuerpo de Tony temblaba contra el suyo. 

Todavía recordaba la simulación ... encontrando a Tony en la cueva y él pensando que era un ángel.

"Estoy aquí contigo. Siempre estaré aquí. Está bien. Se ha ido y tú sigues aquí. Se ha ido".

Dejó que Tony pusiera su cara contra la curva de su cuello,  posición automática mientras pasaba sus dedos por su cabello. Lo habían hecho muchas veces en los últimos siete meses. A veces no había un desencadenante, o al menos ninguno que Tony admitiría.

"¿Él quiere un poco de mi ... hielo?" Phil dijo, tratando de ofrecer ayuda.

El Alfa se acurrucó en el cuello de Steve con un gemido silencioso; Su mano se hundió en los pantalones cortos del rubio.

Pepper se sorprendió; se levantó apresuradamente, agarró el brazo de Sitwell y lo alejo de ahí.

El cuerpo de Tony todavía temblaba, sudaba; se sentía enfermo de miedo y su respiración aún estaba alterada, pero el olor y el sabor de Steve eran abrumadores y la compulsión de aparearlo era abrumadora.

"Steve"

"Por favor, deja una toalla", dijo Pepper apresuradamente mientras salían de la habitación.

"Se supone que debemos vigilarlos", protestó Sitwell.

"Phil está allí", dijo Pepper, empujándolo fuera de la habitación. (Phil estaba en su nido; Steve apenas podía distinguir gemidos de dolor reprimidos).

Tony articuló el cuello de Steve con los dientes rozando la piel. "Fuera", ordenó, tirando de la ropa de Steve. Su corazón aún palpitaba y sintió una especie de ... desesperación. No había pasión ni amor. Solo un impulso primordial de que no pudiera controlarse, mezclado con una urgencia que venía del miedo, porque su garganta todavía estaba hinchada por el terror y sus tripas aún retorcidas, pero el olor de Steve era hipnótico. Y no ayudó que él también pudiera oler a Phil .Ambos omegas estaban mojados y Tony estaba parcialmente duro, molesto contra Steve incluso mientras se aferraba a él.

"Esto no es divertido", se las arregló para hablar. "Odio esto, esto no es divertido, ya quiero que se acabe ..." beso la piel del Omega, gimiendo, la mano en los pantalones de Steve recorriendo su agujero mojado y acogedor.

"¡Tony! Joder ..." Steve fue a apartar la mano de Tony de él, pero descubrió que no podía. Se retorció cuando sintió que los dedos se frotaban sobre los muslos resbaladizos.

Se estremeció cuando los dientes de Tony se arrastraron sobre su punto de pulso y gimió ante la orden. Ya ni siquiera era consciente de Phil hasta que escucha un gemido de dolor. "Tony ... Tony ... no  aquí. No. No podemos ... Terminará pronto. Lo prometo", susurró, acariciando su mejilla. "Te lo prometo Tony, por favor solo ..."

Pasó sus manos por el pecho de Tony y las apoyó allí. No dejándolo presionar lo suficientemente cerca como para colocarse entre sus piernas. Steve estaba lleno de hormonas pero estaba consciente como para no querer hacer esto frente a Phil.

Omega Rising: Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora