Melany
Después de su ultima pregunta me quede callada por un par de minutos y tanto el como yo no fuimos capaces de decir nada hasta que tome un suspiro, las cosas no tenían porque ponerse tensas, solo era un juego. ¿Verdad?
—¿De verdad preguntas...?
—¿Por qué no?—Se encogió de hombros pero aún seguía sin verme directamente a la cara—Ahora tienes que responder.
—Oh no—Me puse de pie mientras negaba con la cabeza.
Y es que la verdad, no recordaba el nombre del chico, había sido en un momento en el que estaba desesperada, Mine y yo habíamos ido a una fiesta, bebimos mucho, a pesar de que teníamos solo trece años y bese a un chico en el juego de la botella, ese era el gran secreto que guardaba mi primer beso y no quería decirlo en voz alta porque me daba un poco de vergüenza.
Todas las chicas querían tener ese momento especial, con el chico correcto dando el primer beso, también la primera vez y todas esas cosas. Mientras que yo estaba desesperada por deshacerme de mi primer beso, porque quería creer quería ser otra persona y crei que dar mi primer beso cambiaria algo en mi.
Era tan tonta a esa edad.
—Oh vamos Mel es solo un juego—Se puso de pie igual que yo mientras hablaba—Además recordemos que tú fuiste la de la idea.
Si yo había sido la de la idea de jugar a preguntas y respuestas, pero aun así sentía que le debía la sinceridad de mi respuesta y no podía hacerlo.
Me daba vergüenza.
—Claro es un juego y por ello no responderé nada por dios que cosas preguntas—Intente hacer mi salida triunfal, pero de algún modo u otro termine encima de Dylan y ni siquiera sabía con qué me había tropezado. Quedamos tumbados, viéndonos uno al otro. Sus manos estaban a mis costados, un pequeño escalofrió me recorrió de pies a cabeza cuando el comenzó a acariciar mi cintura.
Era torpe, cuando estaba en su presencia era torpe y quedaba totalmente demostrado ahora.
—¿Qu...que estás haciendo?
Estaba tartamudeando, creo que si podía ponerme más en vergüenza y lo demostraba ahora. Estaba tartamudeando como una tonta.
—Nada—Sus manos aun seguían acariciando mi cintura.
Eso no era nada, absolutamente Dylan estaba mal de la cabeza si creía que acariciar mi cintura no era nada.
—¿Entonces?—Intente ponerme de pie, pero al segundo siguiente sus labios estaban sobre los míos otra vez.
Al principio intente alejarme, pero el coloco una mano en mi nuca y me beso aún más profundo. Y por un segundo de mi vida me olvide quien era el chico que me besaba.
Había fantaseado con esto durante todo el día y no debía ser tonta no debía dejarlo pasar.
Me deje llevar
El beso se hizo más profundo e intenso sus manos se movían sobre mi espalda hasta mi culo y de ahí volvían a subir hasta mi nuca, el movió todo mi cabello a un lado mientras sus besos viajaban a mi cuello, fueron lentos y llenos de erotismo, un pequeño jadeo salió de mis labios cuando el enterró sus dientes en mi clavícula.
Esto era mucho mejor de lo que había soñado, sus caricias, sus besos, su aroma era un maldito afrodisiaco que me estaba haciendo perder la cabeza.
Giramos en el suelo haciéndome quedar en el suelo y nuestro pequeño enredo siguió mientras el besaba y mordía mi cuello.
—¿Quién te crees?¿Edward Cullen?¿Damon Salvatore?—Las preguntas habían salido entre jadeos mientras mis dedos se enterraban en su cabello sin oponer resistencia.
—Tal vez—Simplemente dijo antes de regresar a mi boca y besarme tan desesperadamente que mis jadeos quedaban ahogados en nuestros besos.
Esta vez el beso nos llevó a algo más, sus manos viajaron debajo de mi blusa, hasta acariciar el perfil de mis pechos... justo en ese momento un destello de cordura paso por mi mente.
Una cosa era besarnos y otra muy diferente era meternos en algo mas serio, me gustaba besarlo, pero definitivamente no podía meterme a la cama con el. No había forma de que perdiera mi virginidad con él, por más que lo deseara no podía perderla con él.
—Dylan no—Saque sus manos de debajo de mi blusa y el parecía entender, volvió al ataque besándome esta vez mas desesperadamente llevando una de sus manos a mi pierna y flexionándola para que quedara enganchada en su cadera mientras nos seguíamos besando cada vez con más pasión y deseo que me llegue a plantear mandar todo por la borda.
—Mel... cariño... déjate llevar—Dijo mientras dejaba besos por mi cuello.
Dude.
De nuevo tenía una pelea interna de lo que quería y lo que debía hacer.
Realmente deseaba experimentar con el mi primera vez, pero sabía que no debía hacerlo. Ya estaba mal que nos estuviéramos devorando en la sala de mi casa ahora sería mucho peor que nos permitiéramos ir mas haya de solo los besos.
No pude.
—No... no puedo—Como pude me escape de debajo de el.
Escape de nuevo a mi habitación porque al parecer era el único lugar seguro en toda la casa. Pero que mierda había hecho me había besado con el novio de mi hermana, que estaba mal en mi por dios esto no podía ser real no podía.
Por más que intentara pensar en Dylan como un hombre cualquiera al final del día siempre me atormentaba el hecho de que era el novio de mi hermana.
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La Chica Problema. (La Chica Duet #1) *Borrador*
Teen FictionLa vida no es perfecta y Melany lo sabe. Decepción tras decepción, dolor tras dolor es como ha tenido que aprender a vivir, sin esperar nada de nadie. ¿Cómo logras sobrevivir? El nombre de Melany es sinónimo de imperfección para su madre, ella es...