Capitulo 2

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- La tienes, no puedo negarlo. Ahora dime una cosa ¿Que haces sola en casa hoy?

Suelto un suspiro y me pilla al instante, temas familiares.

- Mis padres han decidido hacer 200km en coche para ir a casa de Gabi a comer porque hoy es su primer aniversario de boda, supongo que se han ido con la conciencia tranquila dejandome un sobre en la mesilla con 100€ y una nota que resumidamente es algo como "cariño te prometemos que el fin de semana que viene celebraremos tu cumpleaños comiendo los tres fuera de casa bla bla bla. Papa y yo te dejamos dinero para que hagas algun plan divertido para hoy. Te queremos pero tu hermana nos importa mas"

Bueno vale, puede que la ultima frase sea de cosecha propia pero es la realidad.

Kyle no puede evitar sonreir.

- Echaba de menos tu ironia.

Le abrazo fuerte y cierro los ojos. Joder, como echaba de menos su colonia.  Me acaricia suavemente la cara y me besa. Hacia demasiados meses que no pasaba y creia que el fin de mis dias seria muerta de asco aqui sin volver a verle.

Soplo y apago las velas, odio esta casa pero tampoco quiero provocar un incendio.

-Me ducho y nos vamos. Como comprenderas no puedo salir con estas pintas a la calle a no ser que quieras que me llamen loca.

No me molesto en cerrar la puerta, ya me ha visto desnuda muchas veces. No penseis que soy de esas chicas que no tienen reparo a la hora de que alguien las vea desnudas pero ¿A quien quiero engañar? Es Kyle.El conoce mi cuerpo a la perfeccion, aunque cuando me fui pesaba dos o tres kilos mas que ahora y  se que se ha dado cuenta de que los he perdido. Me quito la ropa y me meto a la ducha. El agua esta a la temperatura perfecta. Ni muy caliente ni muy fria pero mas tirando a caliente.

Me enrollo la toalla y me desenrredo el pelo rapidamente. Tengo la mente en blanco. Entro en la habitacion y de repente parece otro lugar. Él esta tumbado en mi cama y yo me quitaria la toalla y me echaria encima suyo pero no es momento.

-Aun no he estrenado este vestido -digo mientras me subo los tirantes.

-Recuerdo perfectamente el dia que te lo compraste ¡Te di un susto de muerte!  - le cuesta decir esto ultimo porque la risa se lo impide.

- ¡No te rias idiota! casi te mato. A nadie mas en el mundo se le hubiera ocurrido entrar asi al.probador.

Era primavera y yo llevaba toda tarde buscando un vestido de flores, pero no uno cualquiera si no uno que fuera "el vestido". Despues de tropecientas tiendas, un nestea, un gofre y medio paquete de tabaco... ¡Lo encontré! Entre al probador y cuando me estaba quitando las comverses él entro y me mordio el cuello. Yo del susto grite y se entero media tienda.

- Ya estoy lista. -Digo mientras me pinto los labios, cosa que habia olvidado hacer.

Me agarra la cintura por detras y me besa el cuello.

- Preciosa, como siempre.

La distancia no existe, son los padresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora