Capitulo 20

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Tres horas y algunos minutos mas tarde en la otra punta de la ciudad.

- Nadia pasame los informes, guapa.

- Aqui los tienes Antonio, ¿Comemos juntos?

- Iba a comer con mi hija pero no quiere comer conmigo asi que estoy libre.-  dice sonriendole a esa preciosa chica con falda negra de tubo, camisa roja y tacones negros.

- Perfecto, eres mio durante unas horas.

Nadia sale del despacho y se sienta en su mesa, organiza la agenda de esta semana y atiende dos llamadas, recibe un fax, discute con un comercial al que finalmente le dice "quiero una mejor oferta para el mes que viene" y cuelga mientras sonrie. Sabe que lo conseguira, suele hacer bien su trabajo. Apaga el ordenador. Coge su bolso y va al baño.

Se peina un poco el pelo con las yemas de los dedos y se retoca los labios con su precioso labial rojo de Nars. Se lava las manos y le sonrie al espejo, guarda el pintalabios y sale. Entra en el despacho y mira a Antonio que se esta poniendo la america azul oscura.

- ¿Vamos?-sonrie.

- Si, querida.

Antonio conduce su coche durante unos diez minutos y para. Le abre la puerta a Nadia y le da las llaves a un chico de unos veinte años.

Hay una chica rubia y alta en recepcion.

- La 205 por favor.

- Ahora mismo señor.- le dice con una enorme sonrisa.

Recoge la tarjeta del mostrador y le da la mano a Nadia. Suben juntos al ascensor y presionan el boton de la segunda planta.

Introduce la tarjeta y abre.

Nadia no da ni un paso. Se queda de piedra cuando ve la enorme habitacion y un camino de velas y petalos de rosa que va desde la puerta hasta la cama. Se gira y le besa apasionadamente.

Entran juntos y se cierra la puerta de la habitacion. Igual que se cerro un matrimonio tal dia como hoy cinco años atras.

La distancia no existe, son los padresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora