¡Ya estamos en Londres! El aeropuerto es espectacular. Me muero por ver fuera. Las personas que también esperaban a sus familiares nos miraban graciosos de nuestras caras de sorpresa, bueno, yo no sabía disimular. Raisa solo reía y Ana se ponía a guiñarle el ojo a uno que otro inglés que se le quedaba mirando. No dudo que consiga una cita en estos instantes. Es tan buena en esas cosas. Yo no tengo una cita desde el año pasado, y si se le podría llamar cita a la que tuve con un amigo de mi escuela. Estaba más nervioso que yo, y derramó su helado en mi cabello, desde ahí, adiós citas. Capaz ese helado tenía alguna maldición.
En realidad no es que me faltase "citas". Simplemente no estaba muy interesada en ellas, o también sería porque no quería salir con alguien que no me gustase por completo. Cosas mías de las novelas que leo, chico perfecto para la chica imperfecta. Eso nunca pasa en la vida real.
Mi nombre dicho en un grito me hizo volver a la realidad. Era mí adorada tía a la que veía alzando la mano y gritando a más no poder. Sigue tan hermosa como la última vez que la vi, los años no pasaban por ella. Corrí hacia ella sin importarme las personas que capaz habré empujado. Llegué a ella y nos recibimos ambas con un fuerte abrazo, reíamos a carcajadas y uno que otro sollozo alegre nos salía. En ese instante de nuestro profundo abrazo. Sentí que alguien nos abrazo a ambas. Alcé mi rostro. Era Brendan, mi primo. Está tan alto y apuesto. La última vez que lo vi era un niño adorable, ahora está todo un joven muy guapo. Me sonrió con esos dientes perfectos y los abracé a ambos, uno con cada brazo. Que momento tan perfecto.
Raisa y Ana fueron presentadas cordialmente. Tendría que ser así ya que viviremos dos meses con ellos. Será espectacular, lo presiento.
Siento unos gritos detrás de mí.
¿Qué rayos?
Hombres altos y robustos, hacían espacio en el camino, haciendo que las personas salgan algo deprisa o las que esperaban a sus familiares, no se entrometieran. Al parecer alguien "importante" saldría por la puerta en que Raisa, Ana y yo lo habíamos hecho.
Me quedé realmente con el corazón en la boca cuando no vi a una sola persona salir por ahí. Sino a cinco. Eran ellos... Niall, Louis, Harry, Liam y Zayn.
Oh Dios. One Direction.
Miles de flashes y hombres de seguridad aparcaban todo, yo seguía sin articular ni una sola palabra, Raisa y Ana gritaban a mi espalda. Mi tía se les unía, pero también se unía con Brendan cuando daban una que otra carcajada.
Pasarían por delante de mí. Estaban acercándose para dirigirse a la salida... Reacciono y saco mi móvil del bolsillo de mi abrigo. Cuando siento un empujón que me hace retroceder y golpear a la gente que estaba en mi detrás. Me quejo y veo a unos de seguridad supuestamente "hacer su trabajo". Vaya forma de hacer su trabajo. Amo a One Direction, pero tampoco sería mal educada de tirarme encima de ellos.
¿O sí?
Me da otro pequeño empujón con su espalda cuando la multitud que estaba detrás de mí comienza a poner fuerza para dar un intento de acercarse a ellos. Estaba sufriendo ahí adelante. Recibo otro empujón más fuerte departe de este hombre, la magnitud era porque los chicos estaban pasando ya delante mío, intento alzar mi móvil con la opción de la cámara, cuando este se cae por el movimiento inevitable de la multitud y da unos pequeños rebotes en el piso.
¡No! ¡Mi móvil!
Traspase como pude de la barrera humana que habían hecho los de seguridad. Me arrastré en el piso para obtener mi móvil, me quedé adolorida ahí, recostada en el suelo. Sentí algunos gritos de Raisa, Ana y mi tía al ver esto.
Por si fuera poco, sentí como alguien tropieza por la culpa de mi cuerpo y cae encima de mí.
¡Au! ¡Rayos!
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Ahora estoy aquí (Zayn Malik)
FanfictionElla: No sé como lo intente. No sé como me atreví. No sé como funcionó. No sé como lo cumplí. No sé como lo eh hechizado en cuerpo y alma. No sé como eh logrado robarme su corazón. No sé como me ama hasta doler. No sé...