Eres Mi Refugio Seguro| Snape x Harry

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Al día siguiente. Me encontraba muy temprano yendo a clases de pociones ansioso por volver a ver a snape, había estado esperando perder tener un momento en la clase para hablar con él. Ron y hermione que caminaban al lado mío no paran de discutir  sin embargo no preste atención. Había algo que me escosía en el pecho, las heridas no habían cicatrizado aún e inconscientemente había estado rascándome provocando que me sangraran de vez en cuando.

Al llegar a la mazmorras al grupo de alumnos frente a la puerta cerrada. 

por primera vez, el profesor snape suspendió su clase, la profesora mcgonagall nos dio la noticia,  excusándose de no estar bien de salud.
Pero sabia que no era eso, por lo tanto me dirigí a su despacho para afrontarlo, también para tener la oportunidad de estar a solas con el en mi hora libre.

lo encontré  en su despacho sentado en una esquina  en el sofá con un libro en la mano.

Al verme frunció el ceño.

-Potter... he suspendido la clase para no toparme contigo y tienes el descaro de venir a buscarme. -dijo tranquilamente sin levantar la vista de su libro.-Sin embargo,  dejando de lado la verdadera razone por la que has venido hoy a buscarme, supongo que es justo que estes aqui en este prciso momento.

al escuchar esto enarque una ceja, no tenia idea de que estaba hablando ahora.

Levanto la vista del libro al verme sin dar señales de comprender a lo que se refería.

Suspiro perdiendo la paciencia. Dejo a un lado el libro y busco algo dentro de su túnica.

-Tengo que explicarlo todo no, la poción, Potter.

Snape extrajo un pequeño frasco de cristal con una sustancia color vino.

-oh claro, la poción. -de pronto mi corazon dio un vuelco de felicidad. Pase rapidamente de tratar de reunir el valor suficiente  para enfrentarme a Snape, a sentirme completamete feliz por haber creado al fin mi pocion.

Snape me entrego el frasco de cristal, y lo observe fijamente, lucia hermoso, su color vino transparente.

-Es hermosa. -dije en tono de ensoñacion, incapaz de creer que ya estaba terminada. -y pensar que ese pequeño frasco contiene una vital sustancia capaz de resusitar a las personas que hayan sido victimas del arrebato brusco e injusto de sus vida.

-y mejor aun. -comento Snape. -pensar en que ha sido tu  ingenio el que ahora nos permite poder apreciar la pocion realizada.

Esas palabras me hicieron salir de mi trance de contemplación.

-No, no. sin su ayuda no hubiera sido posible realizarla, Profesor Snape, fue usted quien que ordeno todas mis ideas y gracias a su amplia experiencia que ha sido impresindible para poder crear esta pocion.

Snape asintio.

-Bueno, Potter ya tendras oportunidad de expresarte como gustes cuando tengas que dar un discurso.  por el momento deja esas palabras enternecedoras. -comento en un muy mal actuado tono de frialdad.

-y bien, ya la ha probado?...profesor.-añadi

-No, estaba esperando a que lo hicieramos juntos. -Mis ojos debieron de iluminarse con esas palabras que me daban esperanzas, pues Snape se apresuro a añadir. -como dije al principio,  sea cual fuere el impulso  que te haya arrastrado a venir a mi despacho, fue muy conveiente pues ahora podremos comprobar la pocion juntos, es lo justo.

Asenti, pero inmediatamente mi cuerpo se tenso al ver a Snape acercarse a mi, demaciado cerca, y sus ojos negros fijos en mi. Snape busco mi pecho, y desabotono mi tunica, mi respiracion se habia convertido en jadeos, y mi corazon saltaba  muy confundido. Deje que Snape dejara al descubierto mi pecho, sin objeciones, sin explicaciones, y con cada movimiento que efectuaba nunca aparto sus ojos fijos de los mios.