Yoongi quiere entrar a la mejor universidad de Corea del Sur, donde estará enseñando uno de los mejores profesores de música del mundo. El problema... Es que la universidad es para chicas.
Pero eso no sería un obstáculo para Yoongi. Vestirse de chic...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Yoongi se sentía extrañado. Pareciera que las horas habían pasado demasiado rápido para su gusto. Despertó en una habitación que no reconocía en lo absoluto pero le llamó la atención la decoración... De chica.
Miró su vestimenta asustado. Estaba en paños menores, literalmente, con otra ropa y no su uniforme.
— ¿Estás mejor? —Hwasa entró a la habitación con algunos medicamentos —. Creo, que debes alguna explicación —alzó las cejas curiosa.
— ¿Por qué...? Oh maldición —mordió sus labios nervioso, sintiendo la ansiedad comiendolo lentamente.
—Bueno, digamos que cuando caíste inconsciente mi primo me recomendó que te llevara a mi habitación y te vistiera con algo más cómodo —se encogió de hombros —. Y vaya sorpresa me encontré —se ríe por lo bajo —. Tienes suerte de que Hoseok haya salido y no hubiera escuchado mi grito de sorpresa, claro, no te vi bien, solo te vestí lo más... Decente a una mujer para que no levantara sospechas.
—Yo... Gracias —soltó un suspiro aliviado mientras se deja caer en la suave almohada —. Es una larga historia —admitió mordiendo sus labios —, yo... Siempre quise entrar a esa universidad, pero solo era para chicas, así que...
—Te hiciste pasar por una. Interesante, se nota que... Te encanta esta carrera —le sonrió un poco para rápidamente salir de la habitación. Regresó unos minutos después para dejar lo que traía anteriormente —. Entonces, si quieres seguir con esto, debes dar lo mejor de ti —puso el violín en la cama —. Tranquilo, puedes confiar en mí.
—Bien... —asintió conforme para ponerse a componer la canción junto con ella.
Ya no necesitaba fingir una voz aguda, podía hablar y reír con ella, sintiéndose libre de aquella apariencia.
— ¡Hwasa! —la voz de su profesor le hizo tensarse de inmediato.
La chica le sonrió para poner un dedo en sus labios, haciendo una promesa en silencio sobre lo sucedido. Hoseok tocó la puerta para ser recibido por Yoongi y Hwasa quienes ya tenían algo adelantado.
—Me alegro de que estés mejor Yoonji, traje algunos medicamentos; al parecer necesitas comer y descansar un poco más —Hoseok dejó la bolsa a un lado de Yoongi quien asintió avergonzado —. Además, deberías ir a un hospital, estoy seguro que tienes anemia, deberías cuidar un poco más de ti —el mayor le observó preocupado —. ¿Me puedes prometer que vas a cuidar de ti?
Yoongi asintió mirando a otro lado, moviendo sus dedos nervioso, una extraña costumbre que tenía.
—Ya Hoseok déjale en paz —Hwasa le golpeó el hombro —. Queremos estar solas, necesitamos terminar tu proyecto.
—Es un trabajo sencillo, lo pueden terminar en tres días —frunció el ceño al ver las hojas —. ¿Estas son las notas? —su prima asintió restándole importancia —. Vaya, es increíble, ¿lo has hecho tu Hwasa? Es imposible, tú no eres tan buena.
