Quince

3.7K 585 278
                                    

Cuando llegaron al restaurante conversaron sobre varias cosas triviales, dándose cuenta de que tienen bastante en común, en especial sobre la música

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando llegaron al restaurante conversaron sobre varias cosas triviales, dándose cuenta de que tienen bastante en común, en especial sobre la música.

Hoseok le habló sobre su pasado, su niñez cómo había se había esforzado por tener todo el éxito que tenía en ese momento. Yoongi le habló de algunos temas de sus padres en especial de su separación.

—No creí que las cosas serían tan difíciles —admitió Hoseok mordiendo sus labios —, ahora entiendo un poco sobre tu personalidad.

— ¿Lo dices enserio? —Yoongi puso una mano en su mentón soltando un suspiro.

—Por supuesto, me imagino que cuando eras pequeño e inocente había felicidad y una verdadera sonrisa en tu cara —Hoseok le tomó su mano disponible para acercarla a su propio rostro haciendo que Yoongi acaricie sus mejillas, soltando un suspiro ansioso y sonriente —. Me gustaría ver tu sonrisa.

Las mejillas de Yoongi se ponen rojas, toma su copa con vino para carraspear nervioso.

—No digas esas cosas —murmura cubriendo un poco su rostro.

—Cielos, no sabes las ganas tengo de besarte —el mayor se relamio los labios viéndolo —, ¿quieres comenzar? —Yoongi ladea la cabeza confundido.

La sonrisa traviesa de Hoseok no se va y menos cuando el camarero pasa a dejar los últimos platillos. El mayor aprovecha la distracción de Yoongi para meterse bajo la tela de la mesa color verde y adentrarse hasta quedar entre las piernas del menor.

Yoongi salta sorprendido de su lugar al sentir unas manos tocando sus piernas, alza un poco la tela al no ver a Hoseok, encontrandolo muy entretenido acariciando sus glúteos. El mayor le observa y sonríe guiñando un ojo divertido.

La mano de Hoseok pasó por en medio de las piernas de Yoongi quien las abrió para que éste se acomode mejor. El mayor se acercó a su entrepierna y puso su cabeza ahí sonriendo repartiendo algunos besos en los glúteos interiores sus manos acariciaban desde las rodilla hasta su cintura.

—Maldición —Yoongi muerde sus labios avergonzado, mirando a todos lados —. ¿Qué haces?

—Veo que ya has tomado bastante confianza como para no tratarme de usted —Hoseok le guiña un ojo dejando ver un brillo traviesos en sus oberdes cafés —. Solo intenta no gritar lindo —Yoongi todo los ojos.

Dejó caer aquella suave tela para concentrarse en la comida, ignorando como la cremallera era abierta. Tuvo que apretar el tenedor para ahogar un jadeo al sentir como los dedos de su mayor acariciaban el bulto con delicadeza.

Tuvo que abrir un poco más las piernas, jadeando. La palma abierta de Hoseok acariaba toda la extensión con los labios, su lengua palpaba la tela negra y delgada hasta la punta donde dejó salir su aliento caliente.

Los colores subieron en el rostro de Yoongi quien solo pudo tomar un poco de agua, intentando calmarse. Los labios de Hoseok hicieron un poco de presión solo para dejar un beso casto, sus manos levantaron el final de aquel bóxer negro para dejar ver la cabeza roja y con presemen en ella.

—Hmmm —paseo de nuevo su lengua por sus labios con una sonrisa para que sonreír.

Se acercó lo suficiente para dar pequeñas lamidas a aquel músculo duro, probando también la semilla de su estudiante.

Yoongi cerró los ojos mordiendo sus labios para hacerse un poco más hacia enfrente y poder obtener más de aquello. Hoseok comprendió el mensaje, con sus manos retiró lo que podía de aquella tele, dejando escapar finalmente todo el miembro de Yoongi.

Con el pulgar acarició la cabeza de su pene para tomarlo con la palma abierta y acercarlo a sus labios, comenzando a sólo dar pequeñas lamidas superficiales a la cabeza, intentando introducir un poco más y que sus mejillas se acostumbraran a la nueva gran intromisión.

Con su mano disponible tomó los testículos dando masajes, esta vez Yoongi dejó escapar un pequeño gemido llamando la atención del mesero.

— ¿Ocurre algo? —él negó avergonzado para meter un poco de comida, soltando otro gemido.

Está vez tuvo que fingir que era la comida, cerrando los ojos. Las mejillas de Hoseok se habían huecado para poder meter la extenso pene de Yoongi, esta vez, llegando a su garganta.

La saliva se escapada de sus mejillas, la textura de aquello solo lo podía hacer sentir bien, lo que más le gusta hacer a Hoseok es una felación.

El menor tuvo que meter una mano debajo para detenerlo, pues su atragamientos y el sonido de la saliva se estaban escuchando ya bastante.

—Ho-Hoseok por favor —Yoongi le miró con los ojos dilatados —. Vamos a otro lugar, por favor —el mayor sonrió para subir y bajar aquel miembro con su mano.

— ¿Eso quieres? —el menor asintió mordiendo sus labios, incluso tuvo que poner una de sus manos para no soltar algún gemido —. Claro, puedo terminar esto en el baño.

—No —jadea apretando los dedos de sus pies —. Vamos a mi casa.

—Pequeño aún no —Hoseok sonríe.

—Mierda Hoseok. Sólo déjame follarte —Yoongi tuvo que ignorar las miradas indignadas de algunas personas a su alrededor.

—Moo~. Eres tan aburrido —los dedos del menor se pasearon por su rostro, quitando el resto de saliva de su mentón —. Bien, vamos.

—Gracias —soltó un suspiro para esconder su dolorosa erección y subir la cremallera —. La cuenta por favor —el mesero asintió.

Finalmente cuando Hoseok pagó la cuenta, ambos se fueron de ahí bajo la mirada de todos los presentes. Ignoraron aquello hasta que subieron al auto del mayor.

— ¿No quieres ir a otro lugar antes? —Yoongi negó para sacar su celular y ver la hora —. Oh, ya es bastante tarde.

—Le dije a tu hermano que te llevaría antes de las doce. Faltan diez minutos —quitó el freno de mano —. Bien, vamos.

—Me digas que... —tuvo que ahogar un grito de miedo cuando el rugido del auto le alertó.

Hoseok no estaba bromeando, lo llevaría antes de las doce a pesar de que llegar a su casa se tardarían unos veinte minutos.

— ¡Hoseok baja la velocidad! —Yoongi se aferraba con fuerza al cinturón de seguridad, incluso su erección se había bajado del susto —. Vamos a morir.

—No seas dramático nene, no vamos tan rápido —Yoongi dio una rápida mirada al velocímetro, éste indicaba a los 250K/H —. Bueno solo un poco.

—Estás loco —Yoongi cerró los ojos casi temblando.

—Por ti bebé —Hoseok se detuvo entonces enfrente de la casa de Yoongi —. Listo~.

Yoongi abrió los ojos asustado, soltando un suspiro de alivio. Bajó del Lamborghini cuando estuvo más tranquilo.

—Eres un idiota Jung Hoseok —se cruzó de brazos caminando hacia la reja de su mansión y abrirla.

—Lo siento cariño~, es solo que tengo que traerte antes de que sean las doce —miró su reloj de mano —, aún faltan dos minutos, lo hice —paseo su mano en la cintura de su estudiante con una sonrisa —. Listo.

—Está me las vas a pagar —se quejó mientras pone su huella en la puerta y abrir viendo a un muy preocupado SeokJin.

—Creí que llegarías más tarde —habló su hermano confuso, tomando de su té nervioso.

—Sí yo también —bufa haciendo reír un poco a su profesor —. ¿Te quedarás a dormir? —pregunta Yoongi sonriendo ahora.

Hoseok miró a SeokJin quien se encontraba mirando algo en su celular con una pequeña sonrisa, desvió su mirada ahora a Yoongi.

—Claro.

Fingiendo Ser Una Chica /Yoonseok Y HopeGa/ TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora