Serpientes y escaleras.

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La depresión ha sido mi compañera desde hace un par de años, durante ese tiempo he estado ausente y cayendo en ciclos autodestructivos, recientemente comencé a mejorar, forzándome a reintegrarme a la vida poco a poco y parece que lo voy logrando. Pero la enfermedad no desaparece mágicamente, permanece allí, sigilosa, a la espera de que recaigas, por eso los días en que las cosas resultan particularmente mal son tan difíciles para mi, pues a diferencia de otras personas no me es tan fácil dar vuelta a la pagina, el fallo aúlla con fuerza en mi cabeza y debo encontrar el modo de ignorarlo. Este solo es mi método de hoy, el modo en que hoy mantengo la depresión a raya.
Estúpida balanza de la vida, ¿por qué no puede irme bien siempre?                 -Jo Waters.

Continúo caminando, manteniéndome activa.
Después de tantos dias de estar dormida, es un cambio agradable pero tambien agotador.
Mi cuerpo cruje exhausto pues habia olvidado lo que era estar erguido.
Mis piernas duelen mientras recuerdan como sostenerme en pie.

Pero el aire en mi cara me fortalece, las escenas del dia me mantienen curiosa, despierta.
Mis mejillas suben con dificultad, ya no estaban acostumbradas a sonreír.
Mis dedos se mueven ansiosos, expectantes ante la ola de cosas por hacer.
Miles de ideas se apilan en mi cabeza y ordenarlas resulta maratónico.
La lista de actividades es al mismo tiempo insuficiente y arrolladora.

Recibo una descarga eléctrica que me impulsa cada vez que las fichas de ajedrez se acomodan a mi favor.
Los pasos de la estrategia perfecta surgen frente a mi y soy invencible.
Frente a mi se extiende el camino amarillo y en cada parada los ingredientes del éxito.
Estoy en una escalera hacia el cielo.

Pero la balanza de la vida te laza flores un dia y rocas al siguiente.
Y del mismo modo en que me eleve, caigo en picada.
Las voces dejan de reir y vuelven a gritar.
Resbalo por la serpiente hacia el infierno.

Me concentro en mantenerme estable, en permancer despierta hasta que termine el dia.
Todos mis esfuerzos concentrados en dar un paso mas.
Solo un paso mas y luego uno mas y luego solo uno mas, solo uno mas.
Tratando de ejercitar mi flacucha persistencia, sujetando mi escurridiza constancia.

Me siento una loca hablándome todo el tiempo, regañanadome, disculpándome, exigiéndome.
Voy tan perdida en la conversación que sin querer me respondo en voz alta, pero no importa.
No percibo las miradas, no distingo las voces, no registro a las personas.
He cerrado mis sentidos para aferrarme a mi "frase salvavidas", las únicas palabras que veo y escucho.
"Solo es un dia de serpientes, mañana serán escaleras. No pasa nada, solo debes esforzarte mas duro. Puedes lograrlo."

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Días de Lluvia [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora