The Same House [Shirbert]

7° {actualizado}

Narra la autora :)

(Flashback antes de que gilbert se mudara)

Anne se encontraba en el lavadero de la cocina, tallando fuertemente su sabana blanca, misma manchada de sangre

"no, por favor, no" suplicaba Anne mientras lloraba desconsoladamente "marilla de seguro no me va a querer ya" decía la de trenzas mientras tallaba fuertemente

Por otro lado en el cuarto estaba la mayor descansando, hasta que unos ruidos provenientes de la cocina la despertaron, lo que la desconcertó.

"Esta niña me va a matar, dios mío" replicaba marilla entre dientes.

Anne, quien aun no lograba quitar la mancha, fue sorprendida por marilla, quien un poco sorprendida miro la escena.

"marilla, marilla lo siento, por favor no me regreses c..." suplico la menor rápida mente mientras lloraba, pero marilla la interrumpió.

"no te devolvería, no pasa nada niña" soltó marilla "es solo una etapa, no vas a morir" sonrió la mayor "ya es tu hora de convertirte en mujer"

"¡no quiero convertirme en una mujer! ¡No todavía!" alzaba la voz asustada mientras a marilla se le desvanecía la sonrisa.

"vamos anne, no es tan malo" decía marilla tratando de calmar "ten, te daré estos, coloca los en tu ropa interior, sirve para que no te manches" marilla le extendió unas telas algo gruesas "sugiero que faltes a clases hoy" Propuso marilla con una sonrisa de compasión.

"no puedo faltar, mi nivel académico puede bajar y si baja no podre ganarle a gil" anne miro a marilla rápidamente "a-a todos mis compañeros" siguió con un leve tartamudeo.

"esta bien, pero si te sientes mal..."

"no pasara nada marilla" replico anne "¿que haré con la sabana?" marilla agarro la esponja y empezó a tallar.

"yo me encargo anne, tu ve a dormir" anne se fue un poco dudosa, asustada, había tantas emociones revueltas, tantos pensamientos, la intriga de saber que mas pasaría después que la invadían completamente.

(Final del flashback)

Anne se despertó madrugada, sabía que hoy empezaba el período, las horas pasaron, la pelirroja se cambio y se peino tal como lo hacia diariamente, se quedo mirando a Gilbert.

Hoy se iba a ir al otro cuarto, estaba al lado de este, y anne lo sabia, por eso se quedo contemplando a aquel chico, quien había sido muy amable, y, al pasar el tiempo, despertó lindas emociones en ella.

—¿En verdad me gustas?— la pelirroja toco dudosa la mejilla de gilbert.

Con lo que no contaba era que el chico estaba escuchando algo adormilado.

—¿anne?— fingió apenas despertarse el chico, sobresaltando a la chica

—ho-hola— sonrió anne, quien se moría de vergüenza por dentro.

¿que tal si el escucho eso? ¡Era su fin!. Vaya que los pensamientos de Anne son muy dramáticos, ¿no creen?

—¿por que tan cariñosa?—cuestiona el pelinegro

—al fin te hago cariños me sales con esto— la pelirroja rueda los ojos.

—me gusta— el chico sonríe cómplice.

Anne también sonríe, y ambos se miran a los ojos, parecen horas para mi, pero a ellos les importa una mierda.

De repente Anne, sin dejar pasar el momento, pregunta;

—¿t-te puedo besar?— susurra la pelirroja.

El hijo menor de los blythe asintió y estaban acercándose mucho, pero la puerta ser abrió, y anne empujo a gilbert.

—gilbert, ¿enserio no viste mis cordones azules?— fingieron frente a Matthew.

—no, la verdad no— fingió aguantando la risa el de rulos.

—ah, hola Matthew— la pelirroja sonríe saludando ante la desconcertada mirada de Matthew y las tiernas miradas de Gilbert Blythe.

—buenos días, el desayuno está listo, chicos— dijo rápidamente, simulando no haber visto el casi beso de ambos.

—gracias, señor cuthbert— agradeció gilbert y Matthew cerró la puerta asintiendo, dejando otra vez solos a los chicos.

—¿tu listón? ¿neta?— preguntó riendo el ruloso

—eres insoportable— rodó los ojos divertida.