La Parte Excitante De Mi Vida

La Charla (Parte 1)

La ciudad donde vivía antes era muy grande, había mucha gente, mucho ruido, el tráfico era un caos, en fin nada que ver con el nuevo lugar donde viviría. No era un pueblo, pero tampoco una ciudad, era mas un punto medio entre ambas. Mientras íbamos en el auto mi padre me enseñó donde sería mi nueva escuela y claramente podría ir caminando desde mi nuevo hogar.

El lugar no era muy bonito, era un pequeño edificio de cuatro pisos color gris, mi departamento estaba en el tercer piso, al llegar logré ver que alguien se asomaba en la puerta de junto, una vecina chismosa supuse, entramos y aunque el espacio era pequeño era suficiente para papá y para mí, comenzamos a pensar como acomodaríamos nuestras cosas cuando llegaran y en los muebles y electrodomésticos que nos harían falta comprar. Pedimos una pizza para cenar y comimos en el mismo cartón pues los platos y demás llegarían hasta el día siguiente. En mi maleta solo llevaba dos mudas de ropa lo suficiente para esperar el fin de semana mientras la mudanza llegará, y cosas realmente especiales para mí. Entre ellos una carta que Jorge me dió al verme por tal vez la última vez.

Me metí a bañar esperando que funcionará el agua caliente, tardó unos minutos pero al fin pude darme la ducha que estuve esperando durante el camino, estábamos en una temporada de calor y un viaje en auto por dos horas me había matado completamente. Al salir me quedé en ropa interior, mi padre siempre estaba así cuando llegaba de trabajar y pues sin una mujer en casa (mi madre) me sentí libre de poder estar como yo quisiera.

-Ya puedes ocupar el baño - le dije a mi padre al salir

-Gracias, si ya quieres dormir puedes poner las cobijas que trajimos en el cuarto. Espero las camas no tarde en llegar- Mientras el se bañaba acomode todo para poder ir a dormir, no me importaba tener que dormir en el suelo, pero los insectos si, así que use las sábanas para hacer una barrera que los detuviera, además como estaba haciendo calor no los íbamos a necesitar.

Cuando papá salió del baño me encontró ya acostado, se puso junto a mí y puso su alarma para el trabajo.

-Ahora si tenías mucho calor- dijo, supongo por el hecho de que yo no acostumbraba estar solo en ropa interior.

-Si, la verdad ya me venía cociendo en el auto, y aquí también está haciendo calor- sabía que era mi padre pero me comencé a sentir un poco incómodo por estar ambos solos frente a frente sin nada más que unos calzoncillos.

-Sabes ahora que solo somos tu y yo hay algo de lo que quiero hablarte y tu madre nunca me dejó.

-Si claro, dime- la verdad no sabía de qué querría hablarme pero cualquier tema de conversación sería bueno para romper la tensión del momento, al menos eso creía.

-Alan, estás en una edad en la que tu cuerpo está experimentando grandes cambios - verga realmente no esperaba esto - sabes comenzarás a necesitar desodorantes cada vez más fuertes, tu voz será tu peor enemiga ya que los gallos no te dejarán en paz, te saldrá vello en todo el cuerpo, ya tienes vello púbico hijo?

-Papá sabes que no es necesario que hablemos, ya estoy creciendo y en la escuela lo hemos visto, se de los cambios y creo que se lo suficiente por ahora.

-Estamos en un ambiente padre e hijo, no debes sentir pena por tu cuerpo, yo tengo vello por todos lados y eso es algo de familia - se levantó y comenzó a señalar sus axilas, su pecho y su abdomen, la verdad es que mi padre si era muy peludo aunque no estoy seguro que es un estilo que me gustaría tener a mí.

-En serio no es necesario que hablemos de estos temas, ya tengo vello, desde hace tiempo y me siento normal con ello, de qué es parte de mi crecimiento y no es necesario que hablemos de ello

-Mi hijo está creciendo, quiero ver hijo, sabes que para un padre ver a su hijo crecer y convertirse en un hombre es la satisfacción más grande que podría tener.

-Papá, es incómodo para mí, me ha crecido vello en ya sabes, esa área

-Que tiene de malo? Soy tu padre no? Te conozco desnudo desde que eras pequeño

-Papá eso fue hace años, ahora soy un adolescente

-No seas ridículo Alan y quítate los calzones, quiero enorgullecerme de que mi hijo es un hombre - se levantó y sin que pudiera pensarlo siquiera bajo su ropa interior - ves es algo normal, somos hombres, nuestros cuerpos no son tan distintos, así que sácate la trusa hijo, siéntete orgulloso de lo que tienes.

Sinceramente creo que la separación de mi padre le afecto un poco la cabeza, era raro incluso para él, no sabía qué hacer el simple hecho de estar en esta situación me hacía sentir toda la vergüenza del mundo. Después de su insistencia tenía que ponerle fin a esto así que lo hice, me desnudé frente a mi padre.

-Dios hijo, no creí que estuvieras tan desarrollado- dijo al ver mi miembro cubierto por una capa de vello- se nota que saliste a mi - y sin querer puse mi mirada en su verga, se veía gruesa, y larga, incluso podría decir que más que la de Jorge, pensar en esto hizo que mi pene diera un brinco - si que saliste a tu padre- dijo y sin esperarmelo agarró mi miembro con su mano, no me sentía del todo cómodo con esto, pero me daba un poco de morbo la situación, mi padre con mi verga en su mano era algo salido de una fantasía de la infancia- hijo hay algo que quiero enseñarte, sabes masturbarte? - Que clase de pregunta es esta no se ni siquiera a donde llevará esto, solo había una respuesta que le podía dar en este momento.

-No...