Enamorado de un millonario sukook lemon

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-quiero disculparme contigo- expreso min con remordimiento

-pero yoongi usted n-no...- el menor fue interrumpido

-no debí tratarte de esa manera, me apena que hayas visto ese lado amargo de mi...no debí lastimarte y tampoco gritarte no tenías la culpa de lo que pasó-

-aunque no sepa que es lo que ocurrió, puedo ver que eso le causa mucho dolor yoongi-

-más que eso es algo que me causa miedo y tristeza-

-se que apenas nos estemos conociendo nuevamente pero quiero que sepa que puede confiar en mi siempre estaré para escucharlo y sus problemas serán los míos ahora-

El corazón del mayor empezó a latir con fuerza, cada palabra dicha por el menor lo llenaba de alegría una alegría que no había sentido en años, porfin sentía que era libre nuevamente libre de amar y ser amado por un corazón noble.

Terminaron de comer y empezaron con su trabajo, yoongi terminaría los papeles para el restaurante mientras que jungkook quiso remodelar un poco el lugar.

-señor min...quiero decir yoongi-

-que sucede jungkook ¿Te paso algo?- hablo el mayor sentado en su escritorio

-bueno en realidad yo quería pedirle permiso para...-

-pasa no seas tímido- hablo min algo suave para darle confianza al azabache y es que pasear de todo jungkook aún seguía siendo algo tímido

El menor se adentró a la oficina parandose frente al mayor el cual dejo de lado su trabajo para prestarle atención, algo que nunca aria con ningún empleado o mejor cliente, pero para el menor siempre tendría el tiempo por muy ocupado que estuviera
-dime que es lo que se te ofrece-

-bueno vera...desde que llegué note que la mancion es algo oscura al menos por las noches y que las cortinas están llenas de polvo- señalo jungkook una de las ventanas del despacho la cual era cubierta por una gran contina roja con encajes dorados

-esas cortinas han estádo ahí desde que mi dífunta abuela dejó esta casa-
Recalco min lo que hizo sentir mal al azabache pues aunque no conocía mucho de la historia se notaba que esa mujer era especial para el

-disculpe no era mi intencion no quiero decir que debería deshacerse de ellas pero al menos me gustaría lavarlas y regresarles ese brillo-  pregunto jungkook jugando con sus dedos...hubo un silencio por un momento

-creo que tienes razón al menos debería a ver un pocos de luz en ese lugar, adelante mi pequeño azabache puedes regresarle la vida a esta aburrida Mancion-  expreso min algo feliz pues aunque era un vivo recuerdo de su abuela las intenciones del menor eran nobles

El menor le dedicó una cálida sonrisa y salió de la oficina, con ayuda de algunos de los trabajadores retiró las cortinas con cuidado y las mando a la lavandería, fue a la cocina en busca de algunas cosas estuvo buscando en muchos cajones hasta encontrar lo que buscaba.

-por fin un jarrón-  jungkook saco aquel objeto dándose cuenta que estaba roto -rayos, creo que por eso estaba aqui guardado- expreso con tristeza el azabache pero alguien se percató de sus intenciones y llego en su ayuda

-disculpe joven jeon ¿Puedo ayudarlo en algo?- jungkook reconoció esa voz u se dio vuelta

-u-usted es el señor de la otra vez- el comentario del menor hizo reír al hombre

-aun no nos hemos presentado cierto, mi nombre es kan sujan tengo 25 años trabajando para la familia del señor jung min-

-hoo mucho gusto yo soy-

-jeon jungkook el novio del joven min- expresó el hombre lo que sonrojo al menor, no sabía que ya todos sabían de la relación que tenía con el señor min

-y-yo-

-tranquilo no tienes de que asustarte, dime que es lo que buscas-

-hoo eso quería buscar algun jarrón para poner algunas flores, el joven min me dio permiso de decorar el lugar pero...no encuentro ningún jarrón-  expreso algo triste el menor

-claro que hay péqueño, la Mancion solía estar lleno de ellos eran los preferidos de la señora, pero una vez que falleció el joven min guardo todo aquello que había tocado para que nadie los rompiera-  explico el mayor lo que dejó perplejo al azabache

-entonces creo que tendré que dejar los jarrones de lado-  contestó el más bajo dejando el jarron en su lugar

-aunque si el te dio permiso no estaría mal sacar algunos-

-de verdad lo dice enserio-  expreso el azabache feliz lo que alegro al mayor

-aconpañeme joven jeon-  El menor asintió y siguio a aquel hombre fuera de la casa aún pequeño invernadero si que esa emanación era grande

Unas horas más tarde min había terminado el papeleo, decidió salir a buscar al azabache desde que entró a preguntarle sobre las cortinas no había regresado al salir se encontró con una pequeña mesita al igual que las cortinas de su difunta abuela limpias y arregladas, al parecer las habían planchado lo que le regreso el color a la ceda con la que estaban tejidas, sobre la mesita ya hacia uno de los mártires que solía poner su abuela por todo el lugar

-que hacen estos jarrones aquí...- cuestionó min observando las flores de colores azules en el.  -ese pequeño azabache si que tienes el don de hacerme sonreir-

Bajo hasta la primera planta y ahí lo vio tenia un jarron en sus manos y estaba frente....

-es mejor que no entres ahí- hablo min serio lo que asustó al azabache

-haa y-yo disculpe señor min-  jungkook solía ser un niño curioso y al ver esa puerta parecida a la de su sueño no pudo evitarlo

-tranquilo debes dejar de llamarme así ¿Que fue lo que te trajo hasta aquí-

-haa yo estaba limpiando el lugar y senti que ya había pasado por aquí-

Los último dicho causó en el mayor algo de curiosidad se hacerco a el y miro la puerta

-hay una historia detrás de estar puerta...es la historia de como mi vida cambio de un momento para otro-