El cantar de los pájaros que anunciaban la llegada del nuevo día que estaba empezando de buena manera para el par de tortolos que seguían enredados en las sabanas transmitiendo ese cálido sentimiento de despertar junto a la persona que amas. Lo primero que captaron aquellos ojos color café que seguían somnolientos fueron aquella perfecta piel de su amado, primera vez que veía el semblante del mayor tan tranquilo, definitivamente le encantaba ver esta imagen, ojalá pudiera verla cada día de su vida.
Sin ganas de terminar aquel momento recostó nuevamente su cabeza en el pecho pálido del contrario y dejó leves caricias en este para calmarse él también. Un pequeño quejido dio a entender que ya estaba despertando su amado, decidido a ayudarlo a despertar lentamente iba depositando besos en su mandíbula para que supiera que seguía ahí.
—Buenos Días Chinito— Habló el menor con un tenue tono de voz.—
—Mmmh, buenos días Morenito.- Dejó un beso en la cabeza del contrario mientras acariciaba la espalda del antes mencionado—¿Qué hora es?
—Son las Diez y media ¿Por qué preguntas? ¿Harás algo hoy?
—Yo no, ambos haremos algo hoy. Ve a bañarte y ponte algo muy lindo pero cómodo por que te llevaré de picnic a un hermoso lugar.
—Estoy listo en 15—Dijo mientras se paraba rápidamente de la cama y corría al baño.—
El par de chicos estaban listos, la gente diría que se veían simples pero a la vista de ellos que se veían como lo mas hermoso que pudiera existir en el mundo, era simplemente sublime aquel momento. Después una larga caminata llegaron a su destino aquella colina donde se podía ver parte del pueblo y daba una imagen tan perfecta a cualquier hora del día era su tan esperado destino. aquel lugar donde confesó amores pasados y donde su mejor amigo admitió sentir algo por él pero no iba a meter tales cosas a su almuerzo con su novio. Así que tomados de la mano se sentaron a mirar aquella preciosa vista, tan tranquilo ese momento que daba miedo, por estos rumbos siempre pasaban personas en sus caminatas y gente vendiendo cosa. no se quejaba en si pero se sentía raro pero romántico el momento.
—Miguel, ¿entonces que dices?
—Disculpa ¿decías algo? me perdí en la vista perdón.
_¿Nunca habías venido? encontré este sitio por Honey, me dijo que vino con Gogo y tomaron muy lindas fotos.
—Oh, no, nunca había venido. —Mintió, una cruel y vil mentira, no para Hiro, él no sabía nada, pero si Jackson lo hubiera escuchado Miguel ya no viviría para contarlo.—
—Me alegra saber eso, la verdad dudaba mucho si debía venir, ya sabes, el otro día te comenté que no me gusta que me dé el sol tan directo.
_Claro, lo recuerdo pero dime qué trajiste de almuerzo y como te dio tiempo de hacerlo—Comentó mientras miraba la canasta de comida a un lado de ellos.—
—Los chicos me ayudaron.
—Se ve que se quieren mucho ¿No?
—Si, ellos estuvieron conmigo cuando Tadashi se fue, no me dejaron solo en ningún momento; hemos tenido discusiones si, pero sabemos resolverlas y la mayoría son por los trabajos.
—Son cómo tu familia, que lindos. —Tomó delicadamente su mano y le dejó pequeñas caricias.—
—Si, aprecio mucho el hecho de que hayan llegado a mi vida en ese momento, aparte de mi tía Cass y Tadashi no tenía a nadie.
—Debió ser muy duro para ti ¿No? El hecho de perder a tu hermano.
—Si, el hecho de perder a una de las pocas personas que siempre te han apoyado es muy doloroso—Comentó tomando un bote de frutas y comerlas lentamente—Creo que por eso aunque no soy de demostrar tanto mi cariño hacía los demás siempre trato de darlo a mi manera a quienes creo se lo merecen.
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¿PUEDO TOMAR TU ORDEN ? [En edición]
FanfictionUn chico muy servicial de diescisiete años que trabaja en una cafetería cuando no se encuentra ocupado dando conciertos. Llevaba una vida tranquilo, sin problema alguno hasta la llegada de aquel grupo de chicos extranjeros que decidieron ir a la caf...