10- Amigos

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Todo estaba oscuro, se escuchaban susurros para nada coherentes. Entonces una gran pantalla se encendió estaba en un cine en los asientos de atrás, había gente a mi lado pero no podía verles la cara ellos solo reían y me hablaban, era como si estuviéramos pasando un buen rato, lanzando palomitas y hablando entre nosotros llegó alguien de seguridad a echarnos hubo un forcejeó y después escapamos. Era tan divertido, pero me desperté.

Lunes por la mañana y la tonta alarma estaba sonando, muy a mi pesar tuve que levantarme, seguía siendo muy temprano para salir a la universidad pero por alguna razón ya no tenía sueño «a pesar de que solo dormí como 5 horas» me levanté, bañé y arreglé.

Mientras me dirigía a la universidad note que solo había maestro y algunos alumnos que se dirigen a la biblioteca faltaban 2 horas para entrar a clases así que decidí ir a la cafetería a por algo de beber.
Era tan silencioso que mis pasos retumbaban tan claramente que espantaba un poco. Me preparé un café en la máquina que había en un extremo de la cafetería y me dirigí a mi salón de clases tal vez faltará mucho pero podría aprovechar el tiempo en otras cosas como terminar tarea atrasada «algo que probablemente no haga».

Me quedé ahí en el salón esperando con unos audífonos y dibujando cualquier cosa en una hoja de mi cuaderno. El tiempo pasó y unos minutos se volvieron unas horas y nadie llegaba «lo cuál era raro».

-¿hola?- decidí llamar a Caitlin para investigar

-Sandra sigues viva qué alivio-

-si, oye ¿estás en la universidad?- no quería sonar como una tonta

-claro que no, hoy suspendieron las clases, para preparar todo para los chicos de nuevo ingreso, solo irían los que pertenecen a clubes deportivos y alguno que otro nerd, ¿Porque lo preguntas?- okey en definitiva tengo una mala suerte

-pues estaba en la biblioteca entregando un libro y pensé que con suerte estarías también aquí- soy la mejor inventando excusas -pero como no estás mejor vuelvo a casa- nos despedimos y colgué.

Guarde todas las cosas que de antemano había sacado y salí del edificio y no me ubiera detenido de no ser por qué ví un cúmulo de personas cerca de las canchas de la universidad así que decidí acercarme. Cuando estuve lo suficientemente cercas para ver quién o que causaba tanto alboroto los ví, ellos estaban en el centro «Ahinoa y sus amigos». Estaban discutiendo con unos chicos del equipo de soccer.

Y aún que no me agradarán y no quería nada que ver con ellos estoy en contra de la violencia y se notaba a kilómetros que si alguien no intervenía se comenzaría una pelea.

-¡Ya es suficiente!- me puse en medio de los dos grupos y ambos me miraban asombrados «uno más que otro» -no pueden estar armando un alboroto de la nada

-no es de la nada, ese imbécil estaba molestando a mi novia- uno del equipo señaló a Scott entonces note que las porristas estaban detrás te ellos

-no importa, saben que si causan una pelea serán expulsados- no sabía que decir para detenerlos

-pero Sandra no puedo permitir que cualquiera venga a esta universidad como si nada, ellos deberían de saber cuál es su lugar- a pesar de que sonara tan ofensivo lo deje pasar

-¿y cual se supone que es ése?- entonces entro Caleb a la discusión colocándose en medio de ambos grupos junto conmigo -porque recuerda que soy tu capitán y vengo de dónde mismo que ellos- a pesar de las buenas intensión es de Caleb solo estaba armando más alboroto

-tranquilízate un poco si, ellos vienen conmigo, así que yo me encargaré de ellos- intenté empujarlo lejos para que todo se calmara

-esta bien lo dejaré pasar por ti Sandra, después de todo te debo un favor por lo de mi tobillo- el chico cedió a mis empujones y se alejó -pero deberías juntarte con personas más decentes- dicho eso se fue con todo su grupo y el círculo que se había formado antes se separó.

¿Quien Carajos Es Sandra?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora