Badabun 국민 Kookmin

둘

Mordía sus uñas desesperada mente, caminaba de un extremo al otro mientras se apretaba el estomago. La había cagado, extremadamente.

¿Cómo fue tan idiota de llamar a la casa de Jungkook? No quería ni ver el rostro del castaño al llegar, será su fin...

-No puede ser... No puede ser... No puede ser... ¿Y si Taehyung sospecha? Kookie me va matar...- Se repetía una y mil veces el rubio.

Sus nervios seguían a flor de piel hasta que sintió la puerta de su casa ser abierta causando un fuerte salto en él.

-¡Amor! ¡Ya llegue! ¿Dónde estas?- Habló Jungkook mientras que Jimin logro escuchar el sonido de las maletas ser lanzadas al suelo, a la par que lágrimas empezaban a salir.

Jimin siempre fue una persona extremadamente nerviosa, más si se trataba de ocultar su relación con Jungkook.

-E-en el segundo piso.- Contesto lo más audible que pudo, cada escalón que subía Jungkook causaba terribles escalofrios, y más cuando la puerta de su cuarto fue abierta.

-Bebé..- Susurro el castaño y abrazo con mucha fuerza la cintura de Jimin, dando suaves besos en su cuello, a consecuencia de eso, pudo sentir una gota salada recorrer su mejilla, inmediatamente volteo al rubio, este bajo su cabeza al instante, pero Jungkook la levantó con dos de sus dedos.

-¿Por qué estas llorando precioso?- Pregunto Jungkook mientras daba besos en cada una de sus mejillas.

-K-kookie...

-Dime.- Se sentó en el sillón de la habitación.

-Perdóname.- Jimin sostuvo su rostro con ambas manos amparándolo por completo.

-¿Que pasa?- El rubio lo miro con ojos muy apenados, muy preocupados, y Jungkook sospecho lo peor.

-¿Que hiciste Park?- Se levantó de su asiento.

-Y-yo... estaba muy preocupado, porque no contestabas tu celular y...

-¿Y qué?- Jungkook empezaba a abrir sus ojos como platos esperando la respuesta.

-Llame a tu casa y contesto Taehyung, y sonó muy molesto porque... dije Jungkookie.- Tapo su cara nuevamente.

-Por la puta madre.- Jungkook se levantó y bajo rápidamente las escaleras, siendo seguido por Jimin.

-Jungkook entiéndeme, yo estaba...

-Estabas preocupado...- El castaño se sirvió un vaso con agua, lo tomo a fondo y lo estrello contra la mesa haciendo a Jimin saltar. -¡Cuantas veces te tengo que repetir que no hagas eso joder!

-Perdón..- Jimin se dirigió la mueble, escondió su rostro y empezó a llorar con mas fuerza, hipos que fueron percibidos por Jungkook, el cual al instante corrió y se sentó al lado de su amante, abrazándolo. 

-Amor... Perdón por hacer eso.. d-deja de llorar por favor.- Y a Jungkook le invadió la culpa por completo.

¿Qué razones tenia que asustar a Jimin así? El se arriesga, solo por él, y nunca lo sabe agradecer..

-I-igual Tae no se dio cuenta, lo llamé y me contestó como siempre, no te preocupes bebé ya no llores, perdóname.- El castaño empezó a dar besos tiernos en su cabeza, se levantó del asiento levantó a Jimin girando su cuerpo por completo, se sentó en el mueble, de tal manera que la cabeza de Jimin estaba sobre sus piernas y el lo abrazaba de su pequeña cintura.

-¿Por qué tenemos que vivir así Jungkook?- Jimin escondió su rostro en el torso de su novio mientras limpiaba sus lágrimas.

-Acabará... haré que acabe, aunque tenga que perder todo amor, pero lo haré...- Y así lo beso, iniciando un beso muy tierno hasta que Jimin enrollo sus brazos al rededor de sus hombros, estrujándolo más hacia el, a la par que abría más su boca dando entrada a la lengua de su amante, para crear rápida guerra entre sus leguas.