Badabun 국민 Kookmin

아홉

Taehyung y Jungkook bajaban todas las pertenencias del último mencionado, listas para ser subidas al taxi el cual esperaba al castaño en la puerta.

El señor ponía todas las cosas en el maletero del auto.

-Bueno, te veo el Jueves, Taehyung- Habló Jungkook para acercarse y dejar un beso en su mejilla.

-¿Podemos hacer videollamadas?- Pidió el rubio en son de ruego, su novio se iría una semana, y lo iba a extrañar en exceso.

Jungkook dudó, pero recordó que en las noches Jimin veía una serie, la cual a él le aburría, tal vez en esos momentos podría hablar con él, primero, para no levantar sospechas, segundo, para no preocupar al pelirrojo, y último, saber como está el pelirrojo.

Sonrió. -Claro que sí, bueno, se me hace tarde.- Agarró su laptop y un bolso de mano.- Nos vemos.-

Taehyung se acercó y dio un leve beso en su cuello, luego, en sus labios. -Te amo.-

-Yo igual.- Jungkook sonrió por última vez, antes de cerrar la puerta e irse del hogar, nuevamente.

Pero en el mismísimo minuto que se cerró, Taehyung corrió como loco a su habitación, buscando su celular con urgencia.

Primera llamada, Seokjin.

Marcó su número al instante.

-¿Tae?- Respondió por la otra línea.

-Jin, Jungkook, él se acaba de ir.- Habló un poco nervioso.

-¿Dónde pusiste el gps?-

-Es imposible que lo encuentre, solo eso te puedo explicar.- Habló con un poco de orgullo por su misión cumplida.

-Esta bien, mañana vamos a encender el GPS a primera hora, y te diremos si realmente esta en Seul, hasta te podemos decir la exacta dirección donde se encuentra.- Habló Seokjin.

-Gracias nuevamente, hasta luego.- Se despidió, acto seguido, colgó la llamada.

Segunda llamada, Hoseok.

Volvió a marcar, pero esta vez a su mejor amigo. El cual al instante contestó.

-¿TaeTae? ¿Estas bien? ¿Ese marrano te hizo algo? ¿Tus pastillas? ¿Hospital? ¿Qué pasó lindo? ¡¿Qué?!- Taehyung rió mientras escuchaba todas las ocurrencias de su amigo.

-No Hobi, pero... "el marrano"- Taehyung rió. -Volvió a viajar.-

-Verdad que iba a viajar, deja que alistó una mochila con mis cosas y voy para tu casa TaeTae.- Tae hizo un sonido en afirmación, colgando la llamada.

Pero de la nada empezó a sentir un leve dolor en la sien, indicando que era hora de sus medicamentos.

.  .  .

Siete horas después

Jimin se volvió a sentar en su
escritorio, pero esta vez con una taza de café.

El siempre escribía cartas, le gustaba desahogarse mediante a estas, pero al lado, también tenía un papel en el cual se encontraba preparando su discurso para el día sábado.

Jimin por su casa andaba en boxers, el calor le hacía sentirse sofocado, demasiado por decirlo así.

Estaba con audífonos, sin embargo pudo percibir un sonido de alguien abriendo la puerta, no fue tan fuerte, por lo tanto Jimin pensó que era parte de la canción.