Rompiéndonos

Capítulo 8: Rompiendo Fantasías

Narra Daisy...

Leí la carta llegando de descanso, ¿Acaso creían que iba a esperar hasta mi casa? Decía Muchas cosas cursis y sin sentido... Se las enseñe a mis amigas y amigos ya que me preguntaban por ella y pues yo sin pena alguna se las mostraba... Todos se reían de todo lo ridículo que había escrito Antonio eso si les hice jurar que no le dirían nada sino Antonio me mataría, todos le hacían burla y remedo respecto a lo que decia la carta en ellos estaba Max...

Llegue a mi casa botando la carta por ahi, estaba llegando a mi límite Antonio, demasiado cursi para mi gusto, o sea ¿preocuparse por mi por haber ido al baño? No juegues...

Ya tenía preparado como lo iba a terminar -a través de cartas-, muy inteligente ¿cierto? Y ya tenia preparadas las palabras que iba a usar, lo iba a dirigir a las jardineras de la escuela y le iba a dar el sobre de las cartas.. pfff pan comido... oh a quien engaño, en el momento me arrepentiré de seguro... Iré a meter todas las cartas al sobre, al final salieron como 5 cartas si no mal conté... Uff preparada para mañana sin duda será un largo día...

~Al dia siguiente~

Hoy era día para entregar el sobre, solo tenia que saludarlo, llevarlo a las jardineras y darle el sobre y dejarlo sólo, súper fácil...

Ha llegado el momento La hora del descanso, okey llevo el sobre, todo listo... ¿Qué podría salir mal? Nada, estaba todo perfectamente calculado...

Oh ahí está, primero sacaré el tema de la ruptura y luego el plan, si eso haré..

—Oh ahí estas, te estaba buscando— digo alegre como de costumbre.

—¿Ah si? Pues ya me encontraste mi amor— me abraza —ven vamos por comida— note como escondía algo en su otra mano debajo su sudadera, de seguro su celular o cualquier tontería.

—¿Y qué tal tu día de hoy?— Sacando tema normal para suavizar las cosas.

—Bien, Es mejor porque estoy contigo, tu eres mi mayor esperanza, mi mayor motivación, tu eres mi..¡todo!— Lord Empalagoso hizo presencia.

—Ah que bien, pero tampoco es bueno que yo sea tu todo en el mundo, ya que... ¿Qué harás el día que terminemos? ¿Me olvidarás?

—Ese día de seguro esta muy lejos, pero estarás en mi corazón Cómo un gran recuerdo, estarás viva siempre en todo mi ser, eres inolvidable, NUNCA TE OLVIDARÉ...

Ese día estaba muy cerca y no te lo esperabas.

—Está bien, ven vamos a las jardineras, tengo algo importante que decirte...

—Ja, que casualidad yo igual tengo algo que decirte...

Llegamos a las jardineras, meto la mano a uno de mis bolsillos de mi sudadera lista para sacar el gran sobre de cartas... En eso noto como de su otra mano bajo su sueter saca una bolsa verde de regalo... ¡Oh no!... Maldición!

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Canción recomendada:
Mira Mujer - Beret