Narra Daisy...
Habían pasado unos cuantos días respectivamente a mi relación, era un viernes y mis recesos salidas y tiempos libres se habían convertido exclusivamente para Beto; hablábamos de muchas cosas algunas sin sentido y sentía que mi tiempo con él se iba volando, empezaba a tomarle cariño ya que me la pasaba muy bien cuando estaba a su lado, era gracioso y créanme que se ponía a hacer malabares con tal de verme feliz, también de repente se ponía a cantarme aunque la letra y su voz no era la mejor lo que contaba era la intención, su manera pervertida de hacer las cosas me causaba gracia, en estos momentos me encuentro sentada a su lado, me está contando sobre sus amigos del Tocho, para ser exactos estamos sentados en el piso junto a la puerta de su salón -siempre he sido de la idea de pensar que los buenos momentos no los hace el lugar donde te encuentres sino la persona con quien estás y estoy segura que no me arrepiento en lo absoluto de haber aceptado una relación con Beto-, en este momento está cantando...
—Te Amo Day, my dick in your pussy, my dick in yours boobs, my dick in your pussy, my dick in yours boobs... —Cantaba en sentido arrastrando algunas palabras mientras enlazaba sus dedos con los míos y se acostaba en mi regazo.
—¿Estas consciente de que entiendo perfectamente aunque lo digas en inglés verdad?.
—Shhh, tú cállate, fingiré que no dijiste nada —respondió mientras ponía su dedo índice entre mis labios para evitar que protestara de nuevo.
Olvide mencionarles que su cabello es muy sedoso -hasta creo que más que el mío- es dos tonos más claro que el mío; por lo que he notado le gusta mucho abrazarme, es cariñoso aveces en exceso y lo cursi le sale cuando estamos a solas ya que en público no demuestra tanto sus sentimientos; hace tanto tiempo que no me había sentido tan bien con alguien, la última vez fue hace casi 2 años, siento que estoy cayendo en el pendejismo que me provoca estar en una relación con alguien de este tipo, ¿que carajo me está pasando con él? Van tan solo 3 días y me llena de alegría así tan fácil, creo que las cosas entre nosotros se dieron en el tiempo que se tenían que dar, debo admitir que yo no le tenía mucha fe y esperanza a nuestra relación eso no es ningún secreto se lo dije a él desde antes que existiera un algo entre nosotros.
(...)
Feliz Sábado, justamente hoy empezaba mi curso de preparación, estaba muy contenta y entusiasmada en ir, quedaba a una hora de mi casa así que me tenía que salir con tiempo. Al levantarme me dispuse a desayunar y en consiguiente me metí a bañar; estábamos en temporada de calores infernales y como al curso asistiría en el turno de la tarde decidí ponerme ropa fresca y holgada, sujete mi cabello en una coleta alta, rice un poco mis pestañas, metí a mi mochila lo necesario: libreta, lapicera, guía, sombrilla, gafete, mi lunch y un suéter por si me daba frió; baje a la camioneta y durante el camino noté el infernal tráfico que abrumaba camino al curso así que de un momento a otro me quede dormida sin más, me despertaron cuando ya habíamos llegado me miré en el espejo y me encontraba un poco despeinada -acto que ignoré- me baje del carro corriendo hasta que veo qué hay una larga fila para entrar y me formo en ella, avanzó rápido y ya dentro de las instalaciones nos empezaron a ordenar, traté de buscar con la mirada alguien que se me hiciera familiar o por lo menos a alguien con quien socializar no tarde mucho en encontrar a una niña de nombre Xime -fuimos a un curso de verano juntas hace algunos años- comenzamos a charlar hasta que desvió mi mirada para ver quienes y cuantos más habían ingresado, me encontraba en el patio de la institución cuando veo una mochila bastante peculiar -Esa mochila solo la he visto en una sola parte y a una persona en específico- ¿Por que su mochila es tan peculiar? Fácil, es personalizada por lo tanto es en color negro de tamaño más o menos grande y con sus iniciales "BSG", confirmó que es la persona que pienso al ver a Francisco a un lado y al otro a Damián, camino hacia él con sigilosidad me paro de puntillas y le tapo los ojos debido a que él estaba de espaldas hacia mi, enseguida le hago señas a Francisco para que hable por mí...
—¿Quién es? —Pregunta Francisco.
—No se quien sea pero sus manos están muy frías y no se sintió nada bien —refunfuña Beto.
—Te daré una pista, es alguien cachetona —añade Damián y luego suelta una risa a lo cual lo fulmino con la mirada y le suelto un intento de patada.
En eso lo suelto y se gira hacia mí y pude notar su mirada de sorpresa, al parecer no esperaba encontrarme ahí pero siendo sinceros yo tampoco, me limito a depositar un casto beso en sus labios, punto a mi favor ahora no sólo lo veré de lunes a viernes en la escuela sino que también los sábados en curso, nos dirigieron a nuestro respectivo salón él en el 9 y yo en él 42 -mucha diferencia-.
Entrando al salón veo muchos lugares vacíos y trato de escoger el mejor y analizo en donde sentarme para ver con quien demonios voy a socializar -No pienso quedarme callada todo el tiempo- fijo mi mirada en una chica de estatura promedio, tez muy blanca, cabello quebrado y larga melena, trae puesto un pantalón con una camisa a cuadros, parece sociable me dije a mi misma, hay justamente un asiento a su lado, camino hacia el lugar libre y me siento; espero unos minutos y como no sucede nada empiezo a hablar yo...
—Hola soy Daisy, mucho gusto, me gusta mucho la comida, amo los perros y me encanta leer ¿y tu? —Extiendo mi mano en forma de saludo.
—Hola, el gusto es mío, mi nombre es Marina, me fascina la comida, igual amo a los perros y soy adicta a leer —suelta una risilla y estrecha mi mano con la suya en forma de saludo.
Empezamos a hablar mientras se llenaban los puestos vacíos, al parecer no me equivoqué resultó ser muy social y con muchas cosas en común, inmediatamente intercambiamos numero celular y Facebook, me mostró su música y le indicaba que canciones conocía -eran la mayoría-, hablamos de comida, libros, raza de perros, bandas musicales, series y gustos de moda y cosas tribales; unos minutos después llegó el profesor explicó su didáctica de trabajar y empezó con los temas -y así cada profesor hasta contar 3- llegó la hora más deseada -el receso- era como ir a la escuela era casi lo mismo: había diferentes profesores, hora de descanso, lugares asignados, libro para trabajar, etc; baje con Marina por ahora era mi única amiga y entre tanto que hablamos al principio le mencioné que tenía novio y me dirigía a presentárselo, no fue difícil encontrarlo -había adquirido una especie de "don" y era capaz de encontrarlo rápidamente entre tantas personas-; me di cuenta que en mi curso literalmente estaba media escuela, entre ellos: Damián, Soliver, Luis, Jhonatan, Andros y Oldair, Manzana, Francisco, Fidel y obviamente Beto; le presente a Marina a mi novio y viceversa, ambos se agradaron y Beto me dijo " si a ti te agrada a mi igual, se ve que es una buena persona", estábamos conversando los tres hasta que de la nada salió el tema de "Fidel" alias el pene chico, sin dudar le pregunte el porque del apodo en un momento pensé que era mame entre amigos pero después vi que no era así, Beto me dijo que estaban comparando tamaños de sus miembros -ya saben lo normal entre amigos- y Fidel dijo que "8 centímetros" erecta, en ese momento estallé en risa igual que Marina a lo que Beto se unió después de segundos, acabó el descanso y nos dirigimos a nuestra respectiva aula, siguieron las clases y a la salida me fui a mi casa; quien iba a imaginarse que Beto terminaría yendo al mismo curso que yo, ya ven, jugadas que nos hace el destino, tal vez estaba prescrito...
Dato Globito: Respectivo a lo de Fidel, el tamaño promedio entre jóvenes de nuestra edad es de 14-15 centímetros depende de la genética es que varía el tamaño.
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Canción recomendada:
Thank u Next - Ariana Grande
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Rompiéndonos
Novela JuvenilSi el drama, las emociones fuertes y la picardía son de tu agrado, entonces esta historia es para ti. -Sinopsis:- Daisy una chica con una vida bastante interesante se da cuenta como es que algunas decisiones te pueden llevar a ser una fuckgirl. Bast...