Narra Daisy...
Hoy era un Sábado, lo cual significaba ir a curso, la verdad es que no me disgustaba pero si era algo cansado y pesado.
Me levanté de costumbre, me puse una playera holgada y unos jeans que hice juego con unas sandalias en tono beige.
(...)
Llegando a la escuela, como ya era tarde corri directo a mi salón ya que quedaba en el cuarto piso. Llegando acomode mis cosas en mi banca que estaba ubicada junto a la de Marina, comenzamos a hablar de temas tribales y comenzaron las clases de rutina.
Tocaron el timbre que indicaba la hora de descanso y salimos disparadas ya que estábamos que moriamos de hambre, nos formamos en el puesto de hamburguesas pero entre tanta multitud perdí a Marina, le grite desde mi lugar que la esperaba en el mismo lugar de siempre, me sirvieron mi hamburguesa, me dirigía hasta mi lugar e iba todo bien hasta que algo o más bien alguien interrumpió mi camino, al levantar la vista me encontré con sus ojos, esa mirada calida que no me invadia hace tiempo, revivieron muchas cosas, mi mente se inundó de recuerdos, mi nariz fue invadida por su aroma ya que la sustancia se había acabado.
—Fíjate por donde caminas —Reprocho molesta intentando no desmostrar que su presencia me desequilibro.
—Tranquila Mooncake ¿Hasta visto a Fidel? —Me pregunta Beto mientras me abraza; me sujeta de las mejillas y las frota con ternura.
Mi cara en este momento ha de ser digna de una fotografía ya que tengo una cara de estúpida que estas que te cagas.
—¿El pito chico? Si lo vi, se fue hacia allá —señaló con mi dedo pulgar mi lado izquierdo —Y no me llames así, y sobre todo no me toques ¿Okey? —Recalco a lo cual él solo asiente y se va.
Volteo y dirijo mi mirada en Marina que fue espectadora de todo lo ocurrido en igual le pareció raro.
(...)
Al salir, me voy sola así que tome mis cosas y durante el camino comencé a cantar una canción que se vino a mi mente, me dirigía a la parada del camión...
—Miro Los días de lluvia con melancolía pura,
recuerdos de aquel día
en mi mente aún perduran,
Mi corazón no te puede olvidar...
Aquella mirada profunda
me hace soñar...
¿Tú piensas en mí?
¿que soy para ti?
Acercate a mi, ¿pues que no ves que estoy aquí?
Te veo marchar, me quedo atrás,
Reúno mis fuerzas
para sonreír sin más
No me ves,
y no sé qué he de hacer
Pero aún así...
no me voy a rendir...
Quiero... mostrarte mi yo de verdad
y esta máscara algún día poder retirar...
Y al fin lo sabrás...Escucho un carraspeo e inmediatamente me pongo tensa y me volteo bruscamente a ver quien era; la vida neta estaba de coña, me estaba castigando realmente...
—No pensé que cantaras tan bien, esa canción te queda bien, pero mejor la letra —dice mientras se acerca más a mi, ya me tenia fastidiada con todo esto.
Beto ya parale esto me Está agotando.
—¿Me estas siguiendo o que? —Discuto molesta.
—No, si fuera así no te hubiera dicho nada y hubiera seguido espiandote, pero no te sigo, tan poco estoy tan mal de la cabeza para hacer eso, neta te respeto —Defiende él.
—Mira, por mi te puedes ir y meter tu respeto por el culo igual que tus palabras ¿Okey? No tenemos nada de que hablar y ya deja de joderme el día, con tu permiso —Intento avanzar pero siento como detiene mi mochila haciéndome parar en seco.
ESTÁS LEYENDO
Rompiéndonos
Teen FictionSi el drama, las emociones fuertes y la picardía son de tu agrado, entonces esta historia es para ti. -Sinopsis:- Daisy una chica con una vida bastante interesante se da cuenta como es que algunas decisiones te pueden llevar a ser una fuckgirl. Bast...