Capítulo 6. Corazones rotos y una despedida

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Con este pensamiento en mente, dejó que sus lágrimas rodasen por sus mejillas llegando a las manos del agresor cuando…

-Winel~ ¿Por qué lloras~? – esa voz que tanto conocía escapó de los labios de su acosador sintiendo como le destapaban la boca.

-Belze… - su miedo y asombro desaparecieron intercambiándose por ira, se dio la vuelta y pateó… entre las piernas con todas sus fuerzas a su “supuesto novio” arrancándole un grito de dolor- ¡IMB*ECIL, C*BRÓN, VETE A LA M*ERDA! ¡QUE TE JOD*N! – no pudo seguir gritando ya que los labios de Belzebu el cual fue apartado de un fuerte empujón cayendo al suelo.

-Winel… los ángeles no deberían usar ese tipo de palabras – dijo asombrado por lo que el menor gritó.

-¡¡¡Tampoco debería estar saliendo contigo estúpido!!! – replicó subiéndose el cierre de su uniforme.

-¿Qué quieres decir? – el rubio iba a responder pero unas voces cercanas alertaron al menor – m*erda…

-Cállate bastardo – ordenó el centrocampista pateándole el tracero hacia un arbusto cercano – ale inútil, ahora no hagas ruido estúpido baka insensible.

-¡WINEL! – se oyó la voz de Ekadel llamándolo y al rato divisó la figura del peli-azul acompañado de su nee-san Aiel-

-¡Nii-san! ¿estás bien? Te oímos gritar – explicó la rubia.

-Estoy perfectamente, solo un animal que me asustó, ya se marchó volando, supongo que era un pájaro nocturno.

-Uf, no me pegues esos sustos ¿quieres?

-Winel, siento si te ofendo pero… estás un poco raro ¿seguro que te sientes bien? – el defensa le tocó la frente.

-Sí, estoy bien, solo quiero… estar solo un poco, me voy a mi habitación, que descansen – susurró marchándose a paso firme del lugar.

-Está enojado – aseguraron los dos al unísono.

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-Te odio… - refunfuñaba cierto peli-rojo tumbado en la cama boca abajo.

-No sé por qué será que no te creo – ambos estaban semidesnudos, Deasta sobre Sein… dándole un masaje… - Venga, admite que adoras cuando te pe…

-¡Deasta, ya! ¡No necesito saber tanto! Y para tu información, no me gusta, tú me obligas.

-Pues bien que gritabas por más – recordó dándole una nalgada.

-¡No hagas eso!

-¿Acaso no sabes decir otra cosa que no sea “no”?

-¿Y qué quieres que diga? Ni siquiera puedo creer que haya roto las normas que me han impuesto desde siempre, soy un ángel, se supone que debo cumplirlas ante todo, soy una decepción…

Esas palabras sorprendieron al mayor, se bajó de la espalda de Sein sentándose a su lado dolido dejando que el pelo le tapase los ojos.

-¿Te… arrepientes de ello? – preguntó con un deje de tristeza en su voz.

-Deasta… - el ángel se sentó con cuidado en su regazo mientras lo abrazaba del cuello – nunca me arrepentiría de esto – aseguró juntando sus labios con los contrarios sorprendiendo al castaño, quien rápidamente dominó el beso abriéndose paso en la cavidad del menor y explorando cada centímetro de su boca hasta que el aire se hizo presente obligándoos a separarse de mala gana.

-Más te vale, me costó mucho llegar hasta aquí – confesó sacándole una sonrisa al menor - ¿Sabes? Te ves mil veces mejor sonriendo que amargado.

Rompiendo las reglas (DestraxSein BelzebuxWinel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora