- Que hacéis? – pregunta Ian divertido. Lucas y yo nos miramos sin saber que decirle. Max estaba callado mirándonos. Se ha hecho algo en el pelo, tiene cuatro trenzas hechas en el tupé que lo hacen ver demasiado sexy. La verdad es que le quedan muy bien.
- Lucas me tiro a la piscina – digo acusándolo y él me mira sorprendido.
- Pero si empezaste tú – se queja señalándome con el dedo.
- Sí, pero tú tenías el bañador puesto. A mi me has tirado con la ropa incluida.
Lucas intenta decir algo, pero se calla. Yo sonrío victoriosa y le saco la lengua. Él niega con la cabeza divertido.
- Parecéis niños pequeños – se ríe Ian. Max sigue sin hablar.Lucas y yo subimos a cambiarnos. Llego a mi habitación, cojo ropa interior en el cajón y entro al baño. Me ducho rápidamente y salgo del baño con la ropa interior puesta. Me quedo quieta al ver a Max sentado en mi cama. Al verme, sonríe recorriendo todo mi cuerpo con su mirada. Puedo notar como sus ojos se oscurecen al mirarme. Cuando me doy cuenta que estoy en ropa interior reacciono.
- Que haces aquí!? Sal ahora mismo!! – grito tapándome el cuerpo con las manos. Max levanta los brazos en señal de paz y dice:
- Tranquila, solo quiero hablar contigo.
- No ves que estoy en ropa interior, date la vuelta!!
Él se gira sin decir nada y yo me pongo lo primero que encuentro, que es mi pijama. Una vez vestida, digo:
- Ya te puedes girar.
- Lo siento, no sabía que ibas a salir del baño en ropa interior – me dice encogiéndose de hombros.
- Bueno, de que querías hablar?
- De lo que pasó el último día en la casa de la playa - dice volviéndose a sentar en mi cama. Creo que es hora de aclarar las cosas. Me siento a su lado – siento haber intentado besarte, Ever.
- No debiste haberlo hecho, Max. Me caes muy bien y eres un buen amigo, pero solo podemos ser eso, amigos.
- Me gustas de verdad, Ever. No puedo evitarlo, eres la chica que todo el mundo querría. Eres guapa, divertida y lo más importante, no te fijas en cualquier chico que pasa. Eres la chica perfecta.Me quedo callada ante sus palabras, no sé que decirle. Me siento alagada por lo que han dicho, pero no siento que sea una chica perfecta. Solo soy yo, una chica huérfana que tiene una vida aburrida y triste desde hace cuatro años, a pesar de tener unos amigos maravillosos. El silencio nos invade por unos minutos, hasta que Max lo rompe diciendo:
- Lucas tiene mucha suerte.
- A que te refieres?
- Me refiero a que es correspondido. Tú le gustas y él te gusta a ti.
- Por qué piensas eso?
- Porque se nota de lejos, Ever. Se nota cuando te mira, sus ojos brillan igual que los tuyos cuando lo miran a él - dice mirando sus manos.
- Max - llamo su atención y mira - algún día encontraras a tu chica perfecta, pero esa no soy yo. Yo te quiero mucho - lo abrazo fuerte. Él me devuelve el abrazo - pero como amigo - digo con una dulce sonrisa. Max asiente un poco triste.
- Lucas y tú hacéis buena pareja, por cierto - dice levantándose y guiñándome un ojo - espero que pronto lo seáis. Lucas se merece lo mejor.
- Eres una gran persona, Max.Lo vuelvo a abrazar y después se va. Me siento mal por tener que rechazarlo, pero a mi ya me gusta Lucas. A pesar de estar peleado con su hermano, se sigue preocupando por él. Max se merece lo mejor porque es un gran chico y estoy segura que muy pronto encontrará a alguien que lo haga muy feliz. Bajo las escaleras y me dirijo a la cocina, pues tengo hambre. Abro la nevera y casi no hay nada de comer. Se me olvidó hacer la compra.
- Tienes hambre? - pregunta Lucas apareciendo detrás de mi. Yo pego un salto y me llevo una mano al pecho debido al susto.
- Lucas!! Me has asustado!! - grito dándome la vuelta.
- Esa era la intención - dice soltando una carcajada y yo le pego en el hombro.
- Eres idiota - digo negando con la cabeza - voy a pedir una pizza porque no hay nada en la nevera.
Lucas asiente y se va al salón, donde Max e Ian juegan a la play. Yo lo sigo.
- Ever pedirá pizza - dice Lucas sentándose en un sillón.
- De que la queréis? - pregunto llegando hasta ellos.
- Queso y pepperoni - dicen Ian y Max al unisono sin apartar la vista de la televisión. Lucas y yo nos reímos de ellos. Cojo mi móvil y pido la pizza. Quince minutos después llega el repartidor con ella. Abro la puerta y un chico moreno de unos 24 años me sonríe coqueto.
- Pizza de queso y pepperoni? - pregunta sonriente. Asiento y me entrega la pizza.
- Preciosa, estás sola en casa? - me vuelve a preguntar. Cuando estoy a punto de contestarle, aparece Lucas detrás de mi. Me da un beso en la mejilla y dice:
- No, está conmigo.
- Es tu hermano? - me pregunta otra vez. Debería ser un poco menos cotilla.
- Soy su novio - dice Lucas muy serio mirando al chico. Yo me sonrojo por lo que ha dicho - y creo que deberías irte de una vez.El chico asiente avergonzado, le entrego el dinero y se va.
- Vaya, Lucas está celoso. Esto es nuevo - dice Ian riéndose y choca el puño con Max, que también se ríe. Lucas los mira mal y yo dejo la pizza en la mesa de centro.Comemos entre risas y burlas por parte de Ian y Max. Las cosas ya no están tan tensas entre Lucas y Max. Tengo que hablar con Lucas para que él también arregle las cosas con su hermano.
Después de comer, Max e Ian se van a su habitación y yo recojo todo llevándolo a la cocina. Lucas me sigue.
- He hablado con Max - le digo mientras dejo algunas cosas en el fregadero. Abro el grifo y empiezo a lavar los vasos que usamos.
- De que? Te ha vuelto a molestar?
- No, hemos hablado del casi beso - digo y Lucas se pone tenso - tranquilo, solo hemos aclarado las cosas. Le he dicho que no debió hacerlo y que solo lo quería como amigo.
Lucas se relaja, se acerca a mi y empieza a secar los vasos que estoy lavando.
- También le he dicho que me gustas tú.
- Y que dijo con respecto a eso?
- Dijo que hacíamos buena pareja y que lo fuéramos pronto - digo con una sonrisa tímida y él sonríe, esa sonrisa que me encanta - Max es una gran persona, deberías hablar con él y arreglar las cosas también.
- Sí, creo que ya es hora se hacerlo.
- Bueno, creo que deberíamos irnos a la cama.
Asiente y salimos de la cocina. Subimos las escaleras y nos vamos cada uno a su habitación. Él antes de entrar en la suya, se acerca a mi y me da un beso casto en los labios. Sonríe y entra en su habitación. Yo entro a la mi con una sonrisa también y me tumbo en la cama. A los pocos minutos me quedo profundamente dormida pensando en Lucas.
(*)
Me despierto cuando escucho que tocan a la puerta de mi habitación. Intento levantarme de mi cama, pero me caigo de ella como casi siempre. La puerta se abre dejando ver a Sofía. Al verme en el suelo se empieza a reír de mi.- Te has vuelto a caer de la cama? - pregunta entre risas, pero es más que obvio. Yo me levanto, la miro mal y le pregunto:
- Que haces aquí? Son la once de la mañana.
- Ya lo sé, pero en casa nos aburrimos los dos solos y hemos venido a hacer algo todos juntos.
- Espera que me cambio.Entro al baño y me doy una ducha rápida. Salgo y me pongo un short azul, una camiseta negra y mis vans negras. Me seco el pelo y ya estoy lista. Bajamos al salón para planear qué hacer con los chicos. Están los cuatro en el salón, Max e Ian jugando a la play como siempre y Lucas y Alain charlando animadamente. Nos sentamos con ellos en el sofá.
- Buenos días - saludo - que hacemos hoy? - pregunto y todos me miran.
- Podemos ir a comer fuera - dice Max apagando la play.
- Sí, y después al parque de atracciones. Que os parece? - dice Ian emocionado. Me gusta la idea.
- Me parece guay - dice Lucas con una sonrisa.Nos quedamos hablando hasta que es hora de comer. Llegamos a un McDonald's, los chicos se ponen a la cola para pedir y Sofía y yo buscamos una mesa vacía.
Diez minutos después llegan con la comida. Los chicos pidieron hamburguesa con patatas y Sofi y yo ensalada con pollo. De beber pedimos todos coca cola.
- Habéis avisado a Zoe? - pregunto yo. No quiero que dejemos de lado a Zoe ahora que no vive con Sofía y Alain. Sigue siendo nuestra amiga a pesar de todo.
- Sí, ha dicho que nos vemos en el parque de atracciones.Después de comer, ponemos rumbo al parque de atracciones. Max como siempre se va con Sofía y Alain, Ian y yo vamos con Lucas. El viaje dura media hora.
- Tenemos que ir a la casa encantada - dice Ian emocionado.
- De eso nada - me quejo. No pienso entrar en esa casa ni loca.
- Vamos, no seas aburrida. No da ningún miedo - me dice Lucas riendo.
- Me da igual, no pienso entrar ni loca.
Seguimos hablando hasta que llegamos y Lucas aparca. Bajamos y esperamos un rato a que llegue Zoe, ya que los demás ya están aquí. Zoe llega quince minutos después en su coche, aparca y sale.- Hola, lleváis mucho tiempo esparándome? – pregunta llegando hasta nosotros.
- Solo un rato, pero no te preocupes por eso. Estamos aquí para pasarlo bien – digo dándole un abrazo cariñoso.
- Entonces qué estamos esperando para entrar? – dice Max emocionado. Parece un niño pequeño que nunca ha venido al parque de atracciones. Todos nos reímos de él y hace un puchero, igual que los niños pequeños.
- Vamos entonces – le dice Ian pasándole el brazo por los hombros y tirando de él hacia dentro. Los demás los seguimos, riéndonos de ellos.
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Un Verano Diferente
RomanceEver Valdés es una chica de 20 años que lo tiene todo pero a la vez no tiene nada. Sus padres murieron hace 4 años en un accidente de coche dejándole su fortuna. Aunque ahora vive con la mejor amiga de su madre, Anne, aún sigue sufriendo por la perd...