Jimin estaba cayendo por Min Yoongi más rápido de lo que había esperado, y ser consciente de aquello claro que había generado una guerra de sentimientos encontrados en su interior. El omega nunca pensó que a esa edad, más bien a ninguna, se vería involucrado en algo como aquello. A su lobo nunca le habían agradado los alfas o betas que lo habían intentado conquistar, y como su lado humano y su lado lobo estaban muy conectados, por obvias razones a su corazón no se sentía conmovido en lo mas mínimo por todas aquellas palabras con vacías promesas de amor eterno.¿A caso eso existía? Era algo que se cuestionaba con bastante frecuencia. El bombardeo de las canciones, películas y series de romance, en las que se mostraba como el amor romántico siempre podía superarlo todo. Como todos tenían alguien para quien habían nacidos. Él sentía que todo aquello estaba muy lejos de reflejar la realidad, y aunque a veces renegara cuando le parecían representaciones muy absurdas, aun así, podía entender el propósito de para el que eran hechas o por que la gente decidía consumir ese contenido. Al final de cuentas todos buscaban en aquello un simple alivio de lo dura que podía llegar a ser la vida real.
Las parejas destinadas era otra de las cuestiones que con bastante regularidad se cuestionaba sobre su veracidad. Las tantas historias que tus padres te contaban antes de dormir durante su adolescencia lo habían hecho soñar con miles de escenarios donde el encontraba la suya, pero conforme crecía y veía que la cifra de personas que realmente lograban encontrar a su alma gemela iba en descenso fue comprendiendo que tal vez aquel mágico amor del que tanto se habla poco a poco se iba transformando en solo un relato.
Últimamente pensaba de nuevo con mas regularidad en todo aquello, siempre girando alrededor de una principal duda, ¿Qué tenía Min Yoongi que en tan poco tiempo lo hacía replantearse todo lo que hasta ese momento había dado por sentado? ¿Qué hacía tan especial a ese alfa?
Definitivamente necesitaba hablar con alguien con experiencia, alguien que lo escuchase y le ayudara a encontrar una respuesta a todos esas interrogantes que se estaban formando en su mente.
—¿Me estaré volviendo loco? —murmuró pensativo mientras cerraba su casillero.
—A veces las personas consideradas locas son las más cuerdas —contestó una conocida voz a su lado.
—¡Tae! —chilló emocionado girándose hacia su amigo, lanzándose a sus brazos.
—Vaya, nunca te había visto tan emocionado por verme —comentó el omega rubio entre risitas.
—Eres mi mejor amigo y últimamente no has tenido tiempo para visitarme, obviamente me voy a emocionar por verte —se defendió el peliazul haciendo un adorable puchero.
—Bueno, tienes razón —se rindió el rubio rodando los ojos y rodeó los hombros del más pequeño con uno de sus brazos—Por cierto, ya me enteré.
—Te enteraste de...
—¿Interrumpo algo? —preguntó una tercera voz a sus espaldas.
Ambos omegas se giraron sin despegarse uno del otro y observaron al alfa que los miraba con una sonrisa agradable. El omega peliazul sintió como sus mejillas se calentaban al tener rápidos flashbacks de sus anteriores pensamientos sobre el alfa.
ESTÁS LEYENDO
20 Puntos | YoonMin
Fanfiction-¿20 puntos? ¿Cómo un videojuego? -cuestionó el mayor confundido-. Pero lo comprendo, porque tendrías que estar muy loco para aceptar el cortejo de un alfa que a penas conoces y te lo acaba de pedir, como tu dices, a la mitad de un pasillo -se rascó...