༻Embarazo Inesperado༺

XXXIX

Narrador Omnisciente
.
.
.
.
.

YoonGi terminó por rendirse y se quedó dormido con la cabeza en las piernas de NamJoon. 

¿Perder a un ser amado?, era un sentimiento horroroso. Hay personas que cuando se pierde un ser querido dicen “Comprendo tu dolor ”, mientras palmean tu espalda, pero en realidad no es así, nadie puede comprender el dolor de otra persona, aunque hayan pasado anteriormente por algo igual, el dolor de una persona jamás es igual al de otra.

Sentir como si en tu interior hubiera fuego, sentir que tu corazón se deshace con cada lágrima que brota de sus ojos.

Y estamos tan acostumbrados al dolor, que cuando estamos triste o extrañando a una persona, comenzamos a recordar momentos felices, haciéndonos sentir aun mas miserables.

NamJoon suspiró rendido, analizando cada parte del rostro de su amigo, sus ojos se miraban hinchados, su rostro estaba mas pálido de lo normal y unas ojeras bastante notorias adornaban el contorno de sus ojos.

Comenzaba a sentirse muy agotado, llevaban varias horas esperando en el hospital, que comenzaba a pensar que dormir en el suelo sería cómodo.

—¿Familiares del joven Park? — preguntó un hombre que a los ojos de NamJoon era un poco mayor de edad.

—YoonGi — susurró — Despierta — comenzó a zarandear a su amigo, con la intención de despertarlo.

—¿Mgh? — fruncio el ceño y se levantó con pesadez, tallando sus ojos — ¿Qué sucede? — preguntó volteando a ver a NamJoon con un ojo cerrado, este solo señalo con la barbilla en la dirección en donde se encontraba el doctor. 

Al girar la cabeza y toparse con la mirada del doctor, YoonGi brincó de su lugar y se acercó a el — Yo soy novio de JiMin, ¿Cómo esta el?, ¿Como están mis bebés? — el hombre lo observó unos segundos a el y luego bajó la mirada a un cuadernillo que llevaba en las manos.

—Hicimos todo lo que estuvo en nuestra manos — los ojos de YoonGi comenzaron aguarse — Pudimos salvarlos a ellos, Pe... — quiso continuar hablando, pero fue bruscamente interrumpido por el menor. 

—¡No!, ¡no quiero saber nada! — se alejó un par de pasos del hombre.

—Amigo— NamJoon se acercó a el y lo tomó de los hombros.

—¡No me toques! — se zarandeo bruscamente, zafándose del agarre de su amigo.

—Debe dejarme terminar de explicar — el hombre delante de ellos apretó la mandíbula con desesperación.

—¡¿Qué me va explicar?!, no hay nada que explicar — tironeo con fuerza de su cabello y se dejó caer al suelo, recargándose contra la pared, al mismo tiempo que comenzaba a llorar con mas fuerza.

El doctor se agachó hasta quedar a su altura, acarició su cabeza, YoonGi levantó la mirada, centrando sus ojos llorosos en el doctor.

—En unas horas puede pasar a ver a el joven Park, lamento que allá perdido a su bebé.

—¿Qué?.

—Pudimos salvar a el joven Park y al varoncito, pero no pudimos salvarla a ella, lo lamento mucho — sin decir más, el hombre se retiró, siendo seguido por la mirada de YoonGi, hasta que desapareció en el ascensor.

—NamJoon — susurró — Mi niña... Mi bebé, ella, no...

—Tranquilo amigo, respira — se acercó hasta el y lo envolvió en sus brazos, YoonGi dejó reposar su cabeza en el hombro de su amigo, dejando caer ahí sus lágrimas.