Morty sollozaba en su asiento mientras intentaba colocarse nuevamente sus prendas. Rick estaba en el asiento trasero revisando que sus cosas estén intactas. Aparte de que también aprovechaba para vestirse allí detrás.
Aún ninguno hablaba de lo recién sucedido. Encima de ser sumamente incómodo y extraño, era la sensación de bienestar y satisfacción que sus cuerpos cargaban lo que les impedía discutirlo. Pero Rick no iba a evitar lo inevitable.
Tosió en su mano para avisarle al otro que iba a hablar.—Ehh, revisé esas plantas y al parecer... hmm... Resulta que son usadas para fabricar afrodisíacos de calidad y bastante efectivos. Su olor es muy, potente y-y más si no es procesado. Eso causó lo que pasó. Eso es todo.
No se vieron a los ojos, no podían. Sin embargo, hubo algo que molestó al castaño.
—¡¿Có-Cómo mierda puedes d-decirlo con t-tanta tranquilidad?! ¡Te acabas de venir d-dentro de tu nieto! ¡Obvio! ¡LO MÁS NORMAL DEL PUTO MUNDO! —no podía tomarlo con serenidad. Su virginidad acababa de ser tomada por su propio abuelo. ¿Cómo debía sentirse?
Morty estaba ignorando esa sensación agradable que sentía. Prefería evadirla con odio. ¿Acaso disfrutó hacerlo? Un debate mental empezó.
—Wow wow, tranquilo, Morty —sostuvo sus brazos por si acaso—. No creas que no me siento igual de molesto y, asqueado —en eso mintió—, pero lo mejor y único que podemos hacer es ignorarlo —realmente no quería, deseaba repetirlo—. Maldición, puedo borrarlo de tu mente si quieres. Idiota.
—¡No puedes b-borrar mis recuerdos sólo porque sí! ¡¿Y para qué, para que sienta un jodido dolor en mi trasero sin saber porqué razón?! ¡Carajo, Rick...! ¿D-Debías... de tenerla t-tan grande? Cielos.. —el tono de su voz bajó. Por suerte, Rick ya empezaba a rezar para que se quedara mudo. Mas debió admitir que disfrutó del último comentario. Morty se percató de lo mismo demasiado tarde.
—¿Grande, eh? —hizo burla.
—Vámonos a casa —dijo medio enojado y ruborizado. No podía hacer más. Se quedó sin flores, sin un regalo exótico para Jessica y sin virginidad. No iba a arriesgarse a tomar otro afrodisíaco o incluso algo venenoso.
Mejor sería tomar una aburrida flor terrestre, y decirle algo cursi y patético como "lo simple es hermoso". A ver si tenía resultado con ello.De nuevo dirigieron el rumbo a la Tierra. Ahora sólo había silencio.
Los dos estaban distraídos en sus pensamientos. Morty en lo avergonzado y extrañamente bien que se sentía. Miraba por la ventana intentando olvidarlo.
Y Rick estaba arrepentido de haberlo llevado a ese planeta, de haberlo dejado ir solo a explorarlo. Si no hubiera encontrado esas cosas, tal vez hubiera tenido una oportunidad. Tal vez ahora mismo no esté siendo odiado por el menor —según él—. Quizás estarían riendo mientras comen helado. Rick sabía que era así en otra realidad alterna.
Se deprimió al no estar en ella.—Rick.
Su melancólica burbuja explotó.
—¿Qué quieres? —un nerviosismo tremendo le invadió de inmediato.
Tomó más valor que aire antes de hablar.
—Si me gustó... eso, ¿e-está mal? —¿Eran acaso restos del aroma floral? No, Rick supo que Morty estaba consciente de sus palabras.
Una rara felicidad llenó su cuerpo. Prefirió esconderla antes de darse falsas esperanzas.
—Uhh, creí que estabas molesto...
—No le digas a mamá, pero... Sí me agradó. ¡A-Aunque fuera involuntario al principio! —hizo una ligera pausa—: Ahora que lo pienso, se sintió bien —volvió a callarse un segundo—: ¿Eso me vuelve raro? ¿O-O gay? —estaba divagando en voz alta porque quería una respuesta a sus dudas.
—No le digas a tu madre, pero, ¿quieres volver a intentarlo? Esta vez sin drogas espaciales —imitó el tono del chico al principio. Pasó un rato para que el chico reaccionara, y al hacerlo, escupió una leve risa. ¡Cuánto amaba esa risa!
Lunes por la noche: Sánchez junto con el joven Smith llegaban a hurtadillas a casa luego de pasar la tarde varados en un planeta, juntos.
Ambos se reían por la travesura que acababan de efectuar. Rick abrió un portal directo a la habitación de Morty. Todos dormían ya. Era mejor no hacer ruido.—¿Quieres quedarte? —ofreció su cama para pasar la noche. Morty estaba seguro de lo que hacía. Lo estuvo desde que aceptó disfrutar las caricias del mayor.
—Tus padres podrían vernos. Mejor me voy al garaje —abrió otro portal.
—Marica —le retó divertido. Rick bajó su pistola de portales y se acercó al castaño.
—Mira quién habla de maricas —jugaron unos minutos una guerra silenciosa de cosquillas, hasta que Mortimer empezó a cansarse. Mañana tendría clases y debía descansar.
Se usaron como almohadas mutuamente durante la noche.
Y antes de quedarse dormido, Morty agradeció por milésima vez que esas flores lo hayan encontrado y abierto los ojos. Aunque hay que admitir que pudieorn haber otras mil maneras de empezar ese lazo, y que le habría encantado conocerlas... Sin embargo, también debía confesar que no sentía muchos arrepentimientos
Su día terminó justo como empezó; perfectamente. Apretó su agarre a Rick y sonrió, gustoso.
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❝Flowers❞ Rickorty
Fanfictionᵗʰᵉ ˡᵒᵛᵉ ᶤˢ ʲᵘˢᵗ ᵃ ᶜʰᵉᵐᶤᶜᵃˡ ʳᵉᵃᶜᵗᶤᵒᶰ ᵗʰᵃᵗ ᶜᵒᵐᵖᵉˡˢ ᵃᶰᶤᵐᵃˡˢ ᵗᵒ ᵇʳᵉᵉᵈˑ La desesperación por conquistar a una chica lleva a Morty a tomar algo que no debió. Rick se ve involucrado en el error que no pudo prevenir.