Dos almas y un sueño

Capítulo 11

A la mañana siguiente:

Raoul:

A las 06:00 me levanté, me vestí y me preparé una mochila para el viaje. Bajé a desayunar un poco a la espera de que mi hermano bajara

Sobre las 06:20 apareció por la cocina

- Buenos días. Susurró

-  Buenos días. Hablé en el mismo tono

Desayunó algo y los dos nos fuimos al aeropuerto en su coche. Unos 30 minutos más tarde llegamos y esperamos a que llegara la hora de mi vuelo

A las 07:00 sonó el megáfono indicando mi vuelo

Miré a mi hermano con una sonrisa

- Te veo esta noche. Habló él

- No me eches mucho de menos he. Solté burlón

- Más quisieras canijo. ¿ Quien te recoge en Adeje?. Preguntó

- La hermana de Agoney. Con quien hablé ayer

Nos despedimos con un abrazo, le dije que cuando tocara tierra le mandaría un mensaje. Me acerqué a mi salida, le dí mi billete a la mujer y fui al avión

Una vez subí, me senté a esperar a llegar a Tenerife

(...)

10:30:

Raoul:

Ya había llegado al aeropuerto de Tenerife

Miré la foto que ella me envió por WhatsApp

De repente veo una mano a lo lejos. Mientras me iba acercando veo más de cerca a la hermana del moreno

Cuando la tuve delante de mi nos dimos un fuerte abrazo

- Ven. Conozco un atajo hasta el aparcamiento poco transitado. No vaya a ser que alguien te reconozca

- Si no lo han echo ya

- Pues vámonos más rápido

Los dos comenzamos a caminar y me llevó hasta el aparcamiento que me dijo antes

Me llevó hasta su coche y me senté en el asiento del copiloto

- Hay un ratito de aquí a casa yo solo aviso. Habló ella

- Está lejos de aquí?. Pregunté

- 45 minutos pasados

Arrancó el coche y salió del aeropuerto

Unos minutos más tarde sentí su voz

- Raoul. La escuché

- Dime. Hablé con una sonrisa mirándola

- Sé tu edad, de donde eres y de momento no me hace falta saber nada más de ti. Solo una cosa. Para mi la más importante

- Te escucho. Hablé para que siguiera

- Amas a Agoney de verdad

Aprovecha que el semáforo está en rojo para girarse hacia mi y mirarme a los ojos

- Lo amo como nunca creí amar a alguien. Con Agoney me siento libre. Se que puedo ser yo mismo. Le confié mi corazón cuando más me hizo falta y él hizo lo mismo conmigo. No pienso permitirme ni a mi mismo que sufriera. Así que si con eso contesto a tu pregunta si. Estoy enamorado hasta las entrañas de tu hermano y eso nadie me lo va a quitar de la cabeza ni del corazón

Cuando terminé de hablar, el semáforo se puso en verde y arrancó de nuevo

- Espero y deseo con todas mis fuerzas que por fin seas el indicado y el último que ocupe su corazón. Sonrió