Cadillac

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Cuando me desperté me sentía muy bien. Había dormido toda la noche de un tirón, sin despertarme y sin pesadillas, nunca había dormido con nadie, pero no era del todo incómodo, lo único malo fué que no había tanto espácio en la cama.

Probablemente, si Tate no me hubiese parado, hubiese perdido la virginidad. Fué bueno que me parara, pues no me tendría que haber dejado llevar tanto por el momento.

No, no me arrepiento, tampoco.

Estié mi brazo para tocarle, sin abrir los ojos, pero a mi lado no había nada, ni nadie. Abrí los ojos lentamente, como un puto vampiro, cegada por la luz. 

Tate se había ido, la ventana abierta lo demostraba.

Me vestí con una sudadera de Harley Davidson que me llagaba por las rodillas y unas medias negras. Me puse mis botas de cuero de siempre, pues son mis favoritas y me hize mejor el moño, pue estaba echo una mierda. Puse un poco de rimmel a mis largas pestañas y me puse la línea legra, para resaltar mis ojos azules.

Me comí una manzana y salí de casa, despidiéndome de mi madre, que por cierto, estaba medio zombi, pues había llegado hace dos horas de su ''Party Hard''

Cuando salí, vi a Tate apoyado en un Cadillac negro, una pasada de coche, no era el coche en el que me había llevado la última vez, este relucía.

Tate estaba vestido con una sudadera gris y unos pantalones pitillos negros, que le quedaban muy pero que muy bien. Se estaba fumando un piti, mientras escuchaba musica con unos auriculares, no pareció que se diera cuenta de mi preséncia, hasta que le toqué.

-Joder, que susto - Dijo él - Buenos días.

-Buenos días ¿Y este pedazo de coche? -Le dije mientras nos subíamos.

-Pues me lo compré ayer - Soltó una sonrisa y me invitó a subir, mientras me ofrecía un cigarro, al que no me pude negar.

Cuando estábamos a dos manzanas del instituto, paró el coche en seco.

-Bajate.

-¿Que coño dices ahora? - Dije mirándole incrédula,

-Pues que te bajes, no quiero que todo el mundo empieze a decir que estás como una puta cabra, ni que tus profesores llamen a tus madres

-Madre* - Dije corrigiéndole - y me da igul a quien llamen o lo que digan, tampoco quiero caerles bien.

Tate puso el coche en marcha susurrando un ''Yo te he advertido''

 Cuando llegamos, Tate aparcó el coche y bajamos. La gente nos miraba, realmente, me daba igual, pero incomodaba.

Algunos me miraban como si estuviera loca, otros ponian cara como de temer por mi muerte, y mientras pasabamos entre la gente, en sus bocas se dibujaba una ''O'' como una puta casa. Las pijas cuchicheaban cosas y todo el mundo se apartaba de nuestro camino. Hasta que sonó el timbre y todo el mundo entro a su clase.

Miré a mi lado para despedirme de Tate, pero él ya no estaba. Fui directa a la primera lase que tendría en este día de mierda. 

Literatura, puaj.

Narra Tate:

Esta chica era realmente asombrosa. Le daba absolutamente igual lo que la gente pensara, lo que dirían. No le importaba una mierda pasearse por ahí con un asesino como yo. 

Me gustaba, y mucho, muchísimo, pero cuando estaba con ella, necesitaba enerla muy cerca, y creo que eso es malo.

Necesitaba alejarme de ella, en el pasillo, cuando sonó el timbre, sentía unas ganas locas de besarla, pero no debía, no ahí, delante de todo el mundo. Podría meterse en problemas. ¿Como reaccionaría su madre si se enterara? ¿Y los profesores? Puede que a ella no le importara en absoluto, pero yo si que sufría por ella, ella no debía pasarlo mal por mi.

Quería pedirle salir algún día, pero lamentablemente, soy mentalmente inestable. Me encantaría poderla llevar a pasear de la mano por las calles, sin que la gente piense que la voy a matar. Invitarla a cenar a un sitio caro y bonito.

Me compré el Cadillac con mis ahorros, mis ahorros, que tristemente, los saco de vender drogas. Intenté trabajar en un lugar de verdad, pero nadie quiere a un psicópata, esquizofrénico y bipolar trabajando en su local. Bueno, me compré el Cadillac solo para impresionarla, quería cambiar, quería cambiar por ella. 

Ser una buena persona.

Quizás, algún día la gente se olvidaría de toda esta mierda del pasado, y ella y yo podríamos estar bien, si es que ella no sale huyendo de mi antes. 

No iba a cagarla, no esta vez.

Ella era como yo. Solitaria, y siempre pensativa, ella me dijo que no se le daban bien las personas, pero que con migo podía ser ella, no le costaba hablar y sentía que nos entendíamos. Yo sentía lo mismo.

Cuando ayer me alejé de ella, fué porque tenía miedo de estos sentimientos. Pero no pude evitar seguirla cuando acabaron las clases, necesitaba verla de nuevo. En un principio, no quería que ella me viera, solo quería observarla dormir. Parecía un ángel, aunque para mí, si que era un ángel, un ángel oscuro y salvador, que venía a rescatarme.

Pero ella se despertó, pero no se asustó, que fue lo que mas me extrañó. ¿Que clase de chica ve a alguien mirándola mientras duerme y no grita? Ella.

Megan Mason.

Era realmente diferente a las demás, el resto de chicas, cuando me ven temen por sus vidas, lo tios aún, me respetan pero alguno que otro me a hablado durante este año. Ellas huyen y corren por su vida.

Pero ella, era perfecta, perfecta para mi. 

Estuve las res primeras horas ido, pensando y pensando en ella, nadie me molestaba, nadie me miraba. Solo yo y mis pensamientos en una aula con 50 alumnos mas.

Cuando fué la hora del patio, allí estaba ella, con su amiga Andrea, creo. Bueno, esa del pelo rojo.

Su pelo iba al ritmo del viento. Era preciosa. Su amiga se percató de que las estaba mirando y le dió un golpecito en el hombro. Ella me miró y me saludó.

Le devolví una media sonrisa y me fuí, a sentarme debajo de ese arbol, donde la primera vez que hablé con ella.

No quería que su amiga se sintiera incómoda si yo me acercaba, y tampoco que se fuera, porque que yo no tuviera amigos, no significa que ella no pueda.

Estaba sentado fumandome un cigarro, cuando alguien se sentó a mi lado, era Megan. Scó un piti y se lo puso entre los labios. 

-Hola, te estaba llamando antes - Dijo, mientras tocaba mi mano delicadamente.

Agarré su mano y le dí un peuqeño beso.

-Nadie debe vernos juntos,va enserio Megan. Me gustas, y mucho, pero no estoy bien, no soy el indicado.

-Tate, ¿ya estamos otra vez? - dijo ella. - No seas capullo, tu a mi también me gustas, tonto, aunque creo que los dos somos demasiado raros, podemos entendernos.

No me lo pensé dos veces y le di un corto beso en los labios, sus labios eran secos y con sabor entre a menta y a tabaco, pero me encantaban.

Me levanté y me fuí corriendo.Dejándola sola, de nuevo.

Me sentí como un gilipollas, pero en ese momento, necesitaba estar solo, otra vez.

Holaaaaaaaaaaaaa, bueno solo quería decir que he puesto una foto del cadillac, y un video, en el que sale Tate y muchas cosas relacionadas con la história ya lo ireis viendo a medida que vaya sucediendo, la canción se llama mama - my chemical romance.

El video es de la primera temporda de American Horror Story.

Saludos a todos los que seguiis mi novela

kissessss <3 

El infierno tiene un nombre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora