hola chicasss, pueden creer que este es el primer capítulo que narra Harry!!
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Harry
Luego de salir de la casa de Selena decidí que sería bueno visitar a Taylor, hacía mucho que no sabía nada de ella, necesitaba hablarle, besarla.. ¿Pero que rayos? Yo estaba con Selena, no podía hacerle daño, recién nos habíamos casado y aunque Taylor halla sido mi gran amor no podía estar con ella solo mantener una relación como amigos. Disque su número de celular y llame.
-Hola, ¿quien habla?- Sentí la suave voz de Taylor resonar por los parlantes del móvil.
-Hola Taylor tanto tiempo-Dije animadamente mientras sonreía.
-¡¿Harry?!-Sentí que dijo emocionada.
-Si, extrañaba oír tu voz, ¡tenemos que vernos!-Dije caminando en dirección a su casa.
-¡Cuando quieras!-Rió divertida.
-¿Puede ser ahora?-Pregunte ansioso.
-¡Claro!--Sentí por teléfono como comenzaba a saltar.
-Bueno, pasare por ti, nos vemos-
-Nos vemos-Luego de oír sus últimas palabras corte y comencé a conducir rumbo a su casa que no quedaba tan lejos de donde me encontraba, al llegar baje del coche y toque timbre, esta no tardo ni dos minutos en atenderme.
-¡Harry!-Grito mientras se tiraba a abrazarme.
-¡Taylor! Te ves muy bonita-Al observar su fabuloso cuerpo y su sonrisa que combinaba con su lujoso vestido blanco.
-¿Quieres ir a casa? o ¿simplemente por un café?- Dije mirándola mientras comenzaba a sacar las llaves del auto que se encontraban en mi bolsillo.
-Vamos por un café y después a tu casa, ¿qué te parece?-Rió y luego me tomo de la mano lo que me puso algo incómodo, Taylor no sabía nada de Selena y mucho menos de mi casamiento con ella. Intente safarme de su agarre al abrir la puerta del coche. Luego de subirnos a al carro y conducir hasta Starbucks frenamos nos bajamos y pedimos nuestras correspondientes comidas.
-¿Te parece si nos sentamos un poco a charlar?-Dije mientras me sentaba en la mesa a lo aje ella asintió.
Estuvimos hablando de nuestras cosas, menos de Selena le conté todo. Por lo que me iba enterando ella había tenido novio pero este la engaño con una chica de su instituto. Luego de charlar un par de minutos mas quería que conociera mi nueva mansión ya que ella nunca la había visitado.
-¿Quieres que te muestre mi mansión nueva?-Pregunte observándola, esta sonrió.
-¡Por supuesto!-Rió y luego de esto la tome de la mano ayudándola a levantarse del asiento.
Caminamos hasta el auto y nos volvimos a subir, el viaje fue bastante largo, ya que mi mansión no quedaba muy cerca que digamos, al llegar nos bajamos y caminamos hasta mi casa nos adentramos en ella e inmediatamente me tire en el sofá, ella se sentó al lado mío y contemplo mi gran hogar.
-Es sumamente hermoso tu hogar-Dijo con la boca entreabierta.
-Gracias, puedes quedarte cuando quieras-Sonreí. Ella mi miro y luego de hacer esto se corrió un poco de lugar quedándose pegada a mi, apoyo su cabeza en mi pecho y juro que en ese momento quería besarla, hacerla mía como lo había echo millones de veces atrás.
-¡Oye¡ ¡No me mires!-Dijo escabulléndose de entre mi cuerpo mientras queda completamente roja.
-Eres hermosa, quien no querría mirarte- Dije mientras me acercaba a ella, ya no aguantaba más, necesitaba besarla, esta me tomo por la nuca rasgando mi cabeza mientras me acercaba a cada ves mas a ella. Nuestros alientos se intersectaban, nos encontrábamos a un centímetro de distancia y cuando estaba a punto de besarla alguien toco timbre. Inmediatamente me separe de Taylor algo nervioso, ¿y si era Selena? Me levante del sofá rápidamente y camine hasta llegar a la puerta, mire por el rabillo del ojo y vi que se encontraba mi madre. Abrí la puerta y esta se adentro a casa dándome un beso en la mejilla.