22 de julio, 2018.

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22 de julio, 2018.

La madrugada tranquila con las suaves canciones desprolijas de las distintas aves comenzó a ser un poco molesta para el adolescente Kurt Cobain. 

Su casa, mejor dicho su mansión, cuenta con una habitación enorme para él solo. Diseñada de un mueble blanco contra la pared oscura donde coloca todos sus cómics, libros —aunque la mayoría son sagas de Stephen King—, y adornos de colecciones como por ejemplo la mayoría de los muñecos Marvel. Su único amigo, Krist Novoselic, se ha reído cantidad de veces al ver que el rubio aún mantiene su infancia intacta. Después, a su lado, tiene un enorme placar también blanco donde coloca todo su vestuario... Negro. De playeras de Slayer hasta calcetines oscuros. Frente a estos dos, Donald Cobain colocó dos camas blancas para que Kurt pueda invitar algún amigo a dormir en cuánto quiera, y en el medio de ellas un enorme balcón que da vista a la calle de la aburrida ciudad Aberdeen, de Washington, en Estados Unidos.

Las paredes de su cuarto son totalmente negras al punto que las luces pocas veces logren hacer impacto, y durante el verano tiene que encender sí o sí el aire acondicionado, Kurt siempre gustó mucho de ése color y si no fuese por la insistencia de su madre, entonces tendría los muebles, placares y camas también oscuras. Wendy siempre menospreció el gusto de su hijo por el negro y lo ha intentado convencer de usar colores más alegres. Kurt Cobain se negó, y sólo pudo convencerlo de usar los detalles de la habitación en blanco.

Aberdeen es una ciudad muy fría y nublada la mayor parte del tiempo. Y a veces el clima cuenta mucho en el humor de cada persona que vive allí. Sobre todo del rubio ojos azules llamado Kurt Cobain.

Abrió sus ojos cuando la alarma sonó, y se sintió sumamente abrumado de tener que levantarse, apenas había descansado. La noche anterior pudo dormirse a eso de las tres de la madrugada siendo que su reloj sonaría a las seis y media de la madrugada.

Y sonó exactamente a esa hora.

Su cuerpo está cansado, sobre todo su cuello y espalda que parecen tener peso de más, pero eso no omitió que se levantara y haga sus actividades habituales; Ir al baño para hacer sus necesidades, salir de su habitación para entreabrir la puerta del cuarto de su madre y ver que todavía respira con el paño en su cabeza, bajar por las escaleras de madera hasta llegar al centro del living donde sus padres esperan a los empleados que sirvan el desayuno y subirse al auto del chofer de la familia para llegar al colegio.

La preparatoria puede ser un poco angustiante y presionada para los jóvenes de quince a dieciocho años, un conjunto de problemas emocionales más la vida dentro del instituto puede llevar tranquilamente a cualquier adolescente directo al suicidio. Pero Aberdeen, y probablemente el resto del mundo, no tiene políticos que piensen en la psicología de cada uno de éstos chicos y sólo piensan en su experiencia personal que puede no haber sido tan mala en sus épocas de preparatoria.

Al entrar al instituto, mientras el auto lo deja parado justo frente al enorme edificio de ladrillos anaranjados prolijamente uno arriba del otro, Kurt colocó sus lentes de leer sobre su vista y acomodó su cabello dejándolo dirigido a un costado. 

Aunque su madre ruega que deba cortarse más el cabello, él cree que ya lo tiene suficiente. Kurt gustaría de gozar mechas hasta sus hombros como hacen sus rockeros favoritos, pero no, Wendy Cobain jamás dejaría que su hijo lo haga. Por el contrario, Kurt tiene su cabello bien rubio que llega hasta el principio de su cuello y fin de su nuca, traspasando sus orejas y cayendo un flequillo hasta casi sus ojos. Muchos adolescentes de su edad se han reído a carcajadas por verlo con un estilo "Justin Bieber", y Kurt no puede sentirse más avergonzado al saber que lo relacionan con un cantante comercial y barato, cuando él escucha sonidos fuertes y pocos conocidos.

Darkness. [KurtAxl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora